Don MARIO Briceño Iragorry en su libro Alegría de la tierra publicado en 1952, nos habla de las papas que las habían llevado al reinado de España, no refiere al cronista capitán Fernández de Oviedo, el primer cronista del nuevo Mundo en la edición del año 1535 la primera parte de La Historia General y natural de la Indias ,UNA BATATA CURADA NO ES INFERIOR EN EL GUSTO A GENTILES MAZAPANES, se comen cocidas o asadas, en potajes e conservas, e de cualquier forma son buena fructa, e se puede presentar a las Cesárea Magestad por muy preciado manjar, la papa oriunda de los altiplanos de los andes era junto al maíz y la yuca el trípode de la alimentación de la dieta de los aborígenes que plantaron su civilización en el continente sus platos alimenticios proteicos eran acompañados con los tomates, el cacao, los pimientos del buen gusto de sus comidas.
En las montañas andinas, desde muy al sur en la Patagonia austral hasta el páramo del jabón en las serranías larenses, nuestros pueblos aborígenes cultivaron su pan nuestro, centenares de tipos de papas nativas de diferentes colores, formas y sabores, sus predilecciones en ser sembradas en lugares diversos climas, diferentes alturas sobre el nivel del mar desde las costas de las aguas del Océano Pacifico hasta las cumbres del Chimborazo, la variedad de texturas, sabores de la Creadilla de la tierra permitían al ser seleccionadas para la elaboración de recetas específicas según el conocimiento y gusto apropiado de los pueblos andinos, tradición hoy vigente en la gastronomía de los naciones suramericanas como parte de la resistencia cultural ante la hegemonía trasculturizadora.
Los Andes venezolanos las papas nativas eran pocas las variedades existentes, en relación a las del altiplano del Alto Perú donde se cultivan centenares de semillas de papa, pero muy apreciadas por los habitantes de nuestros páramos, la investigadora del INIA Mérida, la ingeniero Lourdes González elaboró un catálogo de papas nativas del estado Mérida donde logra registrar la vigencia de 34 variedades de papa en los páramos de Mérida y Trujillo entre ellas arbolona negra, la negra,cucuba,tocana,vidrio rojo, concha gruesa,timinuca,guadalupe,y los nevados, semillas nativas sembradas en tierras de alta pendiente, laderas o pequeñas planicies hasta una altura de 3500 metros sobre el nivel del mar.
El manejo agronómico de costumbres ancestrales, la aplicación del riego a disposición de Dios, solo la lluvias apropiadas a un buen tiempo de siembra, no aplicaban agroquímicos , ni fertilizantes, las frondosas cultivos eran resistentes a plagas y enfermedades y a los cambios climáticos, la única preocupación de los agricultores parameños era efectuar el aporque o limpieza de las malezas agregarle bastante suelo al pie de los cultivos, la duración en ser cosechadas era de un año de espera, las papas obtenidas eran totalmente orgánicas y el logro de excelentes rendimientos de cosechas, garantizando el alimento de todos los días para la familia , el entorno de la comunidad, las papas permitían ser almacenadas en trojas ventiladas durante meses sin dañarse, y los excedentes eran intercambiados o trasladados en arreos de mulas hasta los pueblos para su comercialización.
El desarrollo de Venezuela en la década de los sesenta al inicio del periodo político de la naciente democracia su eje centro norte costero de las ciudades Barquisimeto, Valencia, Maracay y Caracas, donde se establecieron los nuevo desarrollos industriales y urbanísticos poblacionales, la creciente explotaciones hidrocarburos que impulsó el desarrollo de las nuevas ciudades petroleras de la Costa oriental del lago y de la ciudad de Maracaibo, todo apuntalado por la renta petrolera, incrementó la demanda de bienes y servicios por los habitantes, entre ellos el consumo de alimentos, la política el ejecutivo nacional la denomino sustitución de importaciones.
El Ministerio de Agricultura y Cría la primera medida implementada fue todo lo contrario la importación de semillas de papa de los países de bajos de Holanda y Alemania con las variedades de papa granola, cebago,atlantics, el ciclo de cultivo desde la siembra hasta la cosecha era de cuatro meses, tiempo que llamó la atención de los agricultores de los páramos quienes sembraban papa y la espera era de un año de las variedades nativas, surgieron nuevas regiones paperas al incorporar de diez mil hectáreas bajo los nuevos los sistemas de riego en Chirgua en Carabobo, Quibor en Lara, Pueblo llano en Mérida. La Grita en Táchira y Túname en Trujillo.
El manejo agronómico de la nuevas variedades importadas de los países europeos, aplicaban un paquete tecnológico con insumos todos importados de agroquímicos y mezclas de fertilizantes para garantizar el ciclo vital del desarrollo vegetativo de los cultivares que en cuatro meses lograban su cosecha y altos rendimientos de diez mil kilos por hectárea, para que no fueran atacadas por plagas, enfermedades y las adversidades climatológicas ambientales de virus, hongos y bacterias, nuestros agricultores abandonaron las papas nativas y cargaron en sus hombros la bomba de aspersión manual de 20 litros para asperjar las soluciones de los venenos como fueron bautizados por nuestros campesinos los insumos químicos que requerían las nuevas semillas de papa de Holanda y Alemania.
Las consecuencias seis décadas de dependencia tecnológica en un rubro tan importante como es el cultivo de papa, que integra a más de diez mil familias de agricultores y veinte mil hectáreas de superficie de suelos infestados por el alto e intensivo cultivo de papa todos los años siembran las mismas superficies de papa, los agricultores y su familia llevan en su torrente sanguínea altas dosis de elementos fosforados provenientes de los tóxicos según reportes de los estudios del Instituto de la cuenca del lago de Maracaibo ICLAM, contaminación ambiental mediante la escorrentía e infiltración de los agroquímicos en los suelos y nacientes de aguas, mortalidad de la fauna y contaminación de la población de consumidores por la ingesta de papas con altas dosis de agroquímicos, en Venezuela jamás se ha efectuado un estudio por parte de los centros de investigación sobre la carga de toxicidad de las papas y hortalizas ,no existen los reportes si están dentro de las normas de tolerancia de alimentos inocuos y sanos disponibles para el consumo fresco para seres humanos, lo más lamentable esta norma sanitaria no existe en el ordenamiento jurídico del País para el consumo de alimentos frescos.
Cincuenta años importando semillas de papa de Holanda, Alemania y Canadá, la inversión del Estado venezolano en autorizar a la importación de semillas de papa era de veinte millones de dólares anuales en semillas de papa para los Andes, Lara y Chirgua en Carabobo. El impulso de los agricultores andinos en crear y construir soberanía agroalimentaria llevó a que durante la gestión en el 2005 del Ministro de Ciencia y Tecnología Yadira Córdoba, el Presidente de la República Hugo Chávez Frías aprobara el plan nacional de semilla entre ellos el rubro papa, se construyeron tres estaciones experimentales nuevas en Táchira, Trujillo, Lara y se amplió la estación madre en Mucuchíes estado Mérida, se desarrolló la liberación de ocho variedades de semilla de papa por parte del INIA ente rector en el plan nacional de semilla con altos niveles de adaptabilidad ,disminución en más del 50% de las aplicaciones de agroquímicos por ser variedades más resistentes a plagas y enfermedades ,altos rendimientos como el caso de la semilla maría bonita que llego volúmenes de cuarenta mil kilos por hectárea y adaptabilidad a todos los pisos climatológicos para la siembra de papa, se formaron más de trescientos semilleristas de papa a nivel de la región andina y Lara, se logró avanzar en el financiamiento mediante créditos en insumos que eran entregados en agropatria y los mismos cancelados con los arrimes de semilla se construyó y otorgó el financiamiento de toda su infraestructura el laboratorio y casa de cultivos de la organización de la sociedad civil PROIMPA asociación de productores del páramo en Mucuchies.
Los semilleristas de papa desde el 2005 hasta el 2015 diez años en lucha permanente elevaron los niveles de producción para garantizar la demanda interna nacional de la siembra de papa, confrontando con la política de los agro negocios de nuestro propio Ministerio de Agricultura y Cría que continuaba su burocracia dando prioridad a la importación de semilla de papa, los agro negocios imponían la política gubernamental todos los años desde los años sesenta hasta el 2015, el Estado invertía veinte millones de dólares en importar semilla de papa, igualmente obstaculizando mediante atrasos hasta de dos años de los pagos a los semilleristas los arrimes de semilla nacional.
En el año 2016 se produce la resolución de parte del Ministerio de Agricultura y tierras de la prohibición de la importación de semillas de papa, un logro de la lucha de los semilleristas en la construcción de soberanía agroalimentaria, nos llenamos de alegría y compromiso en avanzar en garantizar la producción de semillas de papa, para suminístraselas a los agricultores que siembran y cosechan la papa de consumo fresco,
Nos alegramos al ver que se iniciaba un nuevo ciclo en la producción de semilla nacional que la responsabilidad en la producción era endógena de nosotros los venezolanos, que permitía el ahorro en divisas de veinte millones de dólares, que ya no se quedaba en tierras extrañas y beneficiando a agricultores de otros horizontes , que se eliminaban las groseras coimas del reparto de comisiones a la burocracia gubernamental ,que de ahora en adelante parte de los veinte millones de dólares que le ahorramos a la República serán invertidos en el fortalecimiento del Plan Nacional de Semilla de los rubros de arroz, maíz, caña de azúcar, leguminosas, musáceas, hortalizas, frutales, café ,raíces y tubérculos y en ella la papa
El transcurso del tiempo, ya van cuatro años nos dimos cuenta que la política de la gestión del Ministro Castro Soteldo era asfixiar al ente rector del plan nacional de semilla, el INIA, cuatro años de gestión apretando el alicate al negarle los recursos financieros en bolívares y la asignación de las divisas para la importación de los insumos necesarios para los laboratorios y mantenimiento de la estación experimental del Táchira, Mérida, Lara y Trujillo que son las que producen las semilla pre básica.
El plan de semillas a nivel nacional dejó de existir en todos los rubros como programa permanente, es increíble , insólito el INIA que es el ente rector no le otorgaron en su presupuesto desde el 2015 hasta el 2020 , no existe un bolívar en el presupuesto, ni un dólar para el Plan nacional de Semilla de papa para adquirir insumos para las estaciones experimentales y lo más grave, llegó a ocurrir en el 2016 con la estación experimental la Cristalina del estado Trujillo la más moderna de Latinoamérica y la de mayor producción con seiscientos mil minitubérculos pre básicos se las transfirieron a la empresa agrofan por solicitud del ministro actual de agricultura y tierras y aprobada por el Presidente de la República y en cuatro años en manos de agrofan no producido un solo mini tubérculo. Es vergonzante el estado físico, de abandono de las estaciones experimentales, nos duele como agricultores, como semilleristas que hoy la gestión agrícola de un país es una tramoya, un acto de pres digitación, un farsante
Briceño Iragorry en su artículo sobre las papas en 1952, nos permite informarnos de la excelencia de la gastronomía francesa donde la papa llega a ocupar tanto mesas de pobres y ricos, LA PONMME DE TERRE A LA PARMENTIER, ES BUENA COMPAÑIA PARA UN FILET MIGNON. SU DEVOCION HACIA LA PAPA, LLEVO A PARMETIER A IDEAR UNA CUCHILLA PARA HACER LAS REBANADAS MAS FACILES DE SALTEAR. ESTE MODESTO INSTRUMENTO, FUE VISTO POR EL DOCTOR GUILLOTIN, A QUIEN DOLIA Y CON RAZON, EL MODO CRUEL COMO EL VERDUGO SEPARA DEL TRONCO LA CABEZA DE LOS CONDENADOS A MUERTE. DE ALLI SALIO LA FAMOSA Y PIADOSA GUILLOTINA, QUE DEJO SIN SITIO LA CORONA AL BUENO DE LUIS XVI…jamás desearía el retorno de la aplicación de estos artefactos creados por el médico cirujano Josep Guillotin implementados en la revolución francesa que estuvieron vigentes en Francia hasta 1977, deseo que las papas nacionales lleguen a todos los estómagos de los ciudadanos venezolanos que hoy mayoritariamente padecen la hambruna y por la voluntad democrática manifiesta en la Constitución de la República pronto nos demos nuevos y buenos gobernantes que permitan sembrar la comida y ser adquirida por el trabajo y dignos salarios para todos los venezolanos.