Iniciamos esta tertulia, solicitándole las debidas disculpas al decano del periodismo internacional en Venezuela y corresponsal de guerra, el compatriota Walter Martínez, por el uso de su slogan: "En pleno desarrollo"; pero, consideramos, que es el título que mejor refleja lo que viene ocurriendo en la Patria de Bolívar y Chávez, una vez que el Hno. Presidente Constitucional, Nicolás Maduro Moros, ha puesto en ejecución un experimento de amplio impacto, no solo en materia monetaria, sino económica, cultural, social y política, una verdadera revolución, que acerca a los venezolanos y venezolanas a la economía digital del siglo XXII en pleno siglo XXI.
El Hno. Presidente Nicolás, muy a diferencia de los experimentos que ejecuta el imperialismo de los EEUU sobre los pueblos ubicados al sur del río Grande, a quienes considera parte de su "Patio Trasero", pues no los considera como humanos; ha llevado a la familia venezolana de pensionados y pensionadas, más empleadas y empleados públicos, un poquitín de felicidad más su acercamiento con el mundo de las nuevas tecnologías, en especial, el mundo de las criptomonedas, que se ha venido desarrollando a pasos agigantados en el planeta. No será fácil este proceso, sin dudas, pero, el pueblo venezolano, lo viene asumiendo como una nueva batalla para derrotar al imperialismo de los EEUU, obsesionado éste, con acabar con el pueblo venezolano, sus instituciones y destruir su Estado-Nación.
La memoria colectiva, siempre debemos tenerla activa para mayor comprensión de los procesos en curso actualmente. Cuando en 1959, la Administración Eisenhower, procuraba el derrocamiento de la incipiente Revolución cubana, dirigida por el Hno. Fidel Castro Ruz; el jefe de la CIA, Alien Dulles, se quejaba de que "en Cuba no había oposición contra Castro en capacidad de actuar", y lo justificaba sobre el falso supuesto de que "en esos países primitivos donde brillaba el sol, las exigencias del pueblo eran muchos menores que las de las sociedades más avanzadas", de manera que, no se daban cuenta [el pueblo cubano] de lo que sufrían. Esa forma de mirar a los pueblos y seres humanos que habitamos al sur del imperio, ha sido una constante de la arrogancia imperial de la élite gobernante y las transnacionales de EEUU. Por ello, siempre nos ven como ratas blancas de laboratorio. En octubre de 2010, el mundo se quedó estupefacto ante el hecho horripilante que hacía público el presidente Barack Obama, quien le manifestó al presidente guatemalteco Álvaro Colom: "una profunda disculpa por un acto que, dijo, causa indignación en los EEUU y que no es compatible con los principios y valores de esa sociedad". El presidente Colom, aceptó las disculpas del presidente Obama y tan solo, se limitó a exigirle una investigación profunda de los hechos y determinar sus alcances. Hechos, que afectaron a 696 personas según la Casa Blanca y 1.500 personas, según el gobierno de Guatemala. Eran, presos y pacientes de instituciones mentales. Los experimentos, buscaban probar si la penicilina servía como vacuna contra las enfermedades venéreas, y fueron realizados por la Administración Truman (1945-1953). Las infecciones de personas en Guatemala, tenía como objetivo estudiar el desarrollo de las enfermedades de transmisión sexual en períodos prolongados de tiempo, sin ofrecer tratamiento alguno a los infectados, y sin que los contaminados estuvieran enterados de ser parte del estudio. El caso, sale a la luz pública gracias a la investigadora de la Universidad de Wellesly, Susan Reverby, quien descubrió los archivos de los experimentos mientras se preparaba para iniciar un estudio sobre enfermedades de transmisión sexual. Obama, se adelantaba con su disculpa al eventual escándalo que se generaría en la opinión pública, por lo descubierto por la investigadora de la Universidad de Welley. La entonces, Secretaria de Estado, Hillary Clinton, calificó esos experimentos como "espeluznantes" y "crímenes de lesa humanidad" y pasados ya, 9 años de aquella disculpa pública, de un presidente de EEUU a otro de Guatemala, y el compromiso adquirido por Obama de investigar aquellos hechos; lo real, es que el olvido se ha encargado de ocultar aquellos hechos y no se ha producido investigación alguna que ponga al descubierto, la naturaleza criminal que caracteriza a las Administraciones estadounidenses, y sus acciones contra los pueblos del sur, sus vecinos y no, su culo o patio trasero, como pretenden.
A medidos de los 70, asciende al gobierno, Salvador Allende, un presidente que le dio un alto contenido social a su gestión. Los ojos de América, se colocan sobre esa nueva experiencia que se autoproclamaba como Socialista de amplia Democracia, en que el pueblo chileno se convertía en el actor fundamental de la acción de gobierno. El imperialismo de EEUU, apenas triunfa –electoralmente- Allende, le ubica como una "amenaza inusual" al control férreo que ejercía entonces sobre los gobiernos de la totalidad de la América, con la excepción honrosa de Cuba, la pequeña isla que desde siempre se ha constituido en un desafío a la hegemonía imperial estadounidense. Ahora, Chile, "parecía como demasiado" según el pensar de la élite imperial y, en particular, de la Administración Nixon. En el plano internacional, con la llegada de la crisis del modelo económico de posguerra, en 1973, el mundo capitalista cae en una prolongada recesión, combinando bajas tasas de crecimiento y altas tasas de inflación. Las incipientes ideas neoliberales, de entonces, comienzan a ganar terreno. Las raíces de la crisis, la ubicaba Hayek y sus afines, en el poder excesivo de los sindicatos que habían socavado las bases de la acumulación privada, con sus presiones reivindicativas sobre los salarios y sus presiones para que el Estado aumentase cada vez más el mal llamado "gasto" social. El remedio propuesto, consistía en lograr un Estado fuerte en su capacidad de mantener a raya a los sindicatos y sus exigencias de mejoras reivindicativas y en el control de la emisión de masa monetaria, siendo ésta última la meta suprema de cualquier gobierno, según los teóricos neoliberales. Para eso, se requería una rigurosa disciplina fiscal, de contención del "gasto" social y de restauración de una tasa "natural" de desempleo, la creación de un ejército industrial de reserva para quebrar a los sindicatos. Además, de imprescindibles reformas fiscales que garantizasen reducciones de impuestos sobre las ganancias más altas y sobre las rentas. De esta manera, se dinamizarían las economías avanzadas sobre bases desiguales. El ideario neoliberal, había incluido desde sus inicios, un componente ideológico central en el anticomunismo más intransigente de todas las corrientes del pensamiento capitalista de posguerra y se encontraron, en el Chile de los tiempos de Allende, un leit motiv inspirador de sus pretendidas ambiciones y comprobaciones. La Escuela de Chicago, se convierte entonces, en el centro de estudios de las soluciones económicas a aplicar a la economía chilena para resetearla de años de un gobierno de alto contenido social y posicionarla como un "oasis", un experimento económico único en su estilo, que cambiaría, como cambió hasta el presente, la historia de la sociedad chilena.
El neoliberalismo, en su acepción chilena, presuponía para los investigadores de Chicago, la abolición de la democracia. El experimento neoliberal de la Escuela de Chicago, apoyado por la Administración Nixon, condujo a Chile por los senderos de una brutal dictadura. Este experimento social, aplicado por el gobierno de los EEUU, representó un costo elevadísimo en vidas humanas y sufrimiento del pueblo chileno. "En Chile se vivió una horrorosa dictadura como resultado de un terrorismo de Estado durante la etapa de Pinochet, en la que fueron asesinadas más de cinco mil personas y otras 50 mil sufrieron persecución, torturas y cárcel". Asimismo, más de 28 mil personas, fueron torturadas y centenares de miles debieron exiliarse por las políticas represivas de Pinochet, según la Asociación de Familiares de Ejecutados Políticos (AFEP) de Chile. Costoso experimento social, político, cultural y económico, que hoy día, manifiesta aún sus secuelas en las protestas populares que sacuden la sociedad chilena de los tiempos que transcurren, bajo la Constitución de Augusto Pinochet.
Dice Benjamin Disraeli, que "Los experimentos en política significan revoluciones". Conclusión determinista, que no siempre es cierta. El Petro, conjuga a la ciencia con la tecnología para obtener una solución a un problema económico, inducido desde el exterior a la economía venezolana: la híper inflación. Revisando, la historia de la época imperial China, entre los siglos X al XII, se nos reflejan los tiempos de la llamada revolución económica medieval. La agricultura, entonces, se revolucionaba en cuatro puntos fundamentales: mejoras en la preparación de la tierra y perfeccionamiento de los métodos para su conservación; aumento de la calidad de las semillas, lo que conlleva a mejores cosechas; mejor control del agua y extensión de los regadíos; especialización local, derivada del incremento del comercio y del transporte. Esta revolución agrícola, tuvo lugar en el valle inferior del río Yangzi. Uno de los efectos de la revolución agrícola sobre la sociedad china, fue el aumento de la circulación monetaria durante la época de los Tang y los Song, que será causa y efecto de una revolución económica que se proyectará en el progreso del transporte terrestre, motivado por la pavimentación de gran parte de las rutas con losas de piedra o ladrillos, que combinado con el desarrollo del transporte fluvial, permitieron un despegue económico del imperio chino. En conclusión, las mejoras de la agricultura, el comercio, los transportes y la industria, se van a combinar para producir sobre la sociedad China, un proceso de revolución económica, que provocará cambios trascendentales en la vida de la China clásica de aquellos años imperiales.
Al entrar en circulación, el Petro en la economía venezolana, no solo revoluciona la mentalidad y conciencia de quienes comienzan a comercializar en Petro, sino que –de inmediato- empuja a la consecución de nuevos instrumentos tecnológicos que faciliten la usabilidad de la criptomoneda revolucionaria. Se va creando, el llamado "ecosistema" del Petro. Estableciéndose, nuevas relaciones sociales de comercio justo, libre de especulación y dolarización. Se restablece, la Soberanía Nacional sobre la moneda. El Petro, entonces, comienza a verse como una alternativa monetaria viable para derrotar el brutal experimento que, desde 2014 en adelante, el imperialismo de EEUU ha lanzado contra la población venezolana, estrangulando su moneda, el Bolívar, devaluándolo –constantemente- hasta llevarlo a niveles mínimos de poder adquisitivo, y, con ello, pulverizan los ingresos de toda la población venezolana, en el pretendido propósito de conducirla por los senderos de la violencia social. No obstante, ese experimento social –imperialista- fracasó, sus resultados están a la vista de quien quiera verlo. No ocurrió, ni ocurrirá, la planificada en Washington, explosión social que aspiraban obtener y el consecuente cambio de régimen. A los efectos, ha ocurrido todo lo contrario. El pueblo venezolano, se ha afianzado en sus valores democráticos, y ha crecido con fuerza, el apoyo a la Revolución Bolivariana; mientras que, los factores políticos del oposicionismo pro EEUU, se han debilitado. A tal punto, que se oponen a toda posibilidad de que se realicen procesos electorales que corresponden, según mandato Constitucional, en 2020.
La ciencia y la tecnología son procesos sociales, su funcionamiento y desarrollo son parte constitutiva del contexto social que los envuelve y, al mismo tiempo, los condiciona. La teoría Marxista, nos enseña que los problemas políticos, económicos, y/o morales, no son ajenos a la ciencia y la tecnología. Cuando el imperialismo de EEUU, inició sus ataques a la moneda nacional, el Bolívar, mediante un instrumento tecnológico, sin antecedentes de aplicación hasta entonces, como lo es Dólar Today, se inició la devaluación permanente del signo monetario de los venezolanos y venezolanas, aún vigente, hasta el presente. Todas las medicinas tradicionales, aplicadas al cuerpo económico para neutralizar los efectos perversos que causó esa arma imperial, fracasaron y conllevaron a su prolongación en el tiempo. Fue necesario, esperar a un desarrollo tecnológico superior, en el campo de las criptomonedas, para llegar al Petro. Una idea proyectada, años atrás, por el Comandante Hugo Chávez, en su visión estratégica de adelantarse a los tiempos futuros, sin duda, un gran visionario, como también lo fue, el Padre Libertador, Simón Bolívar. El Hno. Nicolás, nutrido en los saberes de Chávez, ya que compartió experiencias de ejercicio de gobierno por más de seis años como Canciller de la República y luego Vicepresidente Ejecutivo de la República, en medio de la más brutal agresión imperialista multimodal contra la Patria Bolivariana, le ha tocado ir a las raíces de Chávez y encontrar allí, una solución tecnológica a un problema tecnológico que se proyecta a lo económico y, a partir de allí, al conjunto de la sociedad.
El Petro, ha sido esa solución que ha puesto a prueba en estos días navideños el Hno. Nicolás Maduro, otorgándole medio Petro a cada pensionado o pensionada, cada empleada o empleado público, hasta totalizar 8 millones de compatriotas. Esperaban, y aspiraban, los enemigos de la felicidad del pueblo venezolano, los hijos e hijas de la Malinche, que tal experimento fracasara y la criptomoneda se quedara atrapada en el Carnet de la Patria, sin poder de usabilidad. Apareció, nuevamente, otra solución tecnológica: los sistemas Biopagos del Banco de Venezuela, que permitieron tranzar en Petros, las compras de los sujetos del experimento, en diversidad de tiendas y comercios, que se están atreviendo a compartir con el pueblo venezolano, este desafío de derrotar una Orden Ejecutiva imperial, de comienzos de este año, suscrita por Donald Trump, que prohíbe el uso de la criptomoneda bolivariana. ¡Venezuela, ha salido triunfante de este experimento social! #CriptoViene
Caracas, 25-12-2019