Hoy, en el escenario de la Aula Magna de la Universidad Rafael Urdaneta (que da pa todo), se presentó formalmente la candidatura de Eveling (nombre en presente continuo del inglés por su terminación “ing”) Trejo de Rosales. Caras conocidas de Maracaibo y el Zulia desfilaron rebosantes de felicidad y beneplácito porque la recién licenciada en Ciencias Políticas (egresada summa cum laude por cierto…) en la misma Universidad, ya que ella había logrado “gracias a la voluntad del pueblo” la asignación como la Candidata de Un Nuevo Tiempo, partido cuyo líder prófugo, (que aún no se sabe si está en Perú o el Lima), es su esposo. Me refiero a Manuel, Manuelito, este muchacho, el filósofo.
Lo que realmente causa más que extrañeza, dolor y una gran decepción no es el acto ridículo y mediocre de la presentación de la candidatura de Eve, porque, entre otras cosas, no se le puede pedir “peras al horno”. Lo realmente lamentable es ver como personas a quienes se les ha tenido respeto por su trayectoria y perfil académico son capaces de convertirse en instrumentos de la oposición que tanto ha atentado contra el orden constitucional en nuestro país, todo solo por sentar distancia frente a la posición política del Gobierno Nacional. Una cosa es sentar posición y otra es sacrificarse hasta el punto de mimetizarse entre tanta podredumbre, así pienso.
Por supuesto que no me refiero ni a Ángel Lombardi ni a Neuro Villalobos que ya representan los tiempos de deterioro del nivel académico y humano de las ultimas generaciones de autoridades de La Universidad del Zulia (que vivo y padezco siempre manteniendo la esperanza de la vuelta del pensamiento Lossadiano a sus pasillos y aulas), me refiero a la Doctora Lolita Aniyar de Castro, quien, en otrora se hiciera identificar del lado izquierdo del proceder político venezolano y del Estado Zulia.
Los niveles de impotencia y de decepción no se hicieron esperar… por momentos sentí verdadera lástima de ver como una figura que ha hecho tantos y tan buenos aportes académicos en materia de criminología se haga eco y apoyo de un no-proyecto político que tiene a Maracaibo y al Zulia sometidos al caos más terrible de los últimos años… Maracaibo se cae a pedazos con la gestión del Alcalde interino con mayor tiempo de gobierno Alca Ponne (cuestión que, por cierto, no parece ser un problema grave para el oficialismo en el Zulia porque teniendo todas las herramientas y argumentos no se le ha hecho la debida oposición ni se ha mostrado, hasta hoy, un interés real por recuperar el espacio de gobierno municipal en la ciudad). Actualmente, en materia de seguridad, damos verdadera vergüenza después de haber tenido a la policía municipal más eficiente del país, y justo siendo ella experta en la materia, decide avalar con su presencia (hoy disminuida irremediablemente) a la aspirante a dedo por UNT para la Alcaldía de Maracaibo. MUUUUUUCHHHHAAAAAAA VERGUEEEEEZAAAAAAA DA ver a quien pudo mantenerse en una digna posición opositora caer tan bajo y darle con su presencia, más que evidente, un espaldarazo a la indecencia política.
Dra. Lolita, he crecido escuchando sus méritos y los avales indiscutibles de su trayectoria académica y profesional, pero verla hoy en el escenario dándole el apoyo a una mujer que no le llegaba (tiempo pasado) a los tobillos la ha hecho minimizarse de manera súbita ante mis ojos y creo que ante los ojos de muchos que, a pesar de sus muchas declaraciones abiertamente opuestas al Gobierno Nacional, jamás pensamos que haría un acto público de tan aberrante involución.
Son muchos los intelectuales y académicos que han sentado posiciones en contra de Chávez y han argumentado (con sus razones) su posición opuesta a él y a sus políticas, pero han sabido, sin embargo, mantenerse al margen de aparecer en público con la escoria política. Lamento mucho que no haya tenido usted la suficiente agudeza para haberse mantenido al margen de la basura siendo opositora política al gobierno bolivariano
