A las puertas de esta realidad educativa tan tristemente lamentable esta la vieja profesora Antonieta, lleva años esperando los churupitos para poder terminar de vivir sus últimos días de jubilación.
Como todas las semanas viaja noches enteras en un frio autobús para venir a escuchar las mismas maledicencias de una nueva ministra que parece enemiga de Chávez, ¡no hay real, siga esperando!
Con la tristeza de sus lagrimas dice: hay que decirlo la educación en la revolución se convirtió en la hija olvidada, a esta ministra no le preocupa cómo están los planteles, la calidad de enseñanza que se imparte, si es liberadora o bancaria, si niños, niñas o adolescentes comen en el comedor del plantel y qué tipo de alimentos, los proveedores están artos, primero tienen que esperar que desde Caracas les paguen cuando quieren y se le esconde a los padres la realidad del precio de la bandeja servida, tres bolívares fuertes, ¿Quién como así en el país?
El material de las mesas sillas es endeble por lo tanto no durara, se deteriora muy rápido, entonces vemos una cantidad de escuelas con cementerios de mesas sillas, y los alumnos recibiendo clases en asientos sin espaldar o mesas con el tope por la mitad.
Ya las escuelas bolivarianas no son tales, a las doce todos se han ido. Pero lo más grave en el debate originado desde el ministerio con las Cinco Líneas Estratégicas, las propuestas con mayor aceptación era los cargos para un grupito.
Pero desde Caracas se ponen bravos con los Jefes de Zonas de Educativas si estos no les dan las cuotas de apertura que a cada momento piden para sus amigos.
Hasta las asistentes y secretarias de la ministra llaman a los Jefes de Zonas para pedirles cargos.
Prosigue Antonieta: esto lo discutimos, pero somos minoría y nuestras posiciones son rechazadas por un grupo de “militantes” que recién llegaron a comandar este ministerio.
Mijo, si La Cosiata neoburguesa, conspiradora, enemiga de Chávez, la que disimula muy bien su asco por lo bolivariano está dentro del Ministerio de Educación, todos al mando de su nueva ministra, quien acurrucada descalifica a quien le parece, tilda de contrarrevolucionarios a quien se le antoje, utilizan el poder popular como un apéndice de sus apetencias personales.
Quien llegue con más chismes hasta la parroquia Altagracia donde funciona el Ministerio de Educación, será premiado por la ministra con cargos para dirigir cualquier Zona Educativa del país.
Esto lo han aprovechado hasta los viejos sindicaleros corruptos, quienes en cuclillas tratan de tapar su sombra del robo, uno de ellos muy famoso por hechos de corrupción con una cooperativa que estafo el PAEB, pero recientemente fue nombrado junto a otra corrupta más proveniente desde la propia industria petroquímica, pero son amparados por su amigote Quinta Columna. Están haciendo lo que se les viene en gana.
Finalmente
y con la paciencia de los años Antonieta parte a tomar el autobús
de la noche, la otra semana volverá.
Para: www.aporrea.org
06 de marzo de 2011
