BOLÍVAR: Bienvenido, General en Jefe, Manuel Piar, Libertador de Guayana. Bienvenido desde la eternidad en el tiempo a tocar tierra en el Santuario de la Patria en la apuesta común de la Segunda Independencia, continuidad de la Primera.
Usted es la tierra misma de Upata y de Chirica, pecho empinado de caballo libertario, sin el cuello torcido, volando en el escudo de los inmensos chaparrales de la sabana…Hijo de Tomás Kaurima y de Anakari; Batallón Rifles con Bolívar y Sucre hasta Ayacucho.-Usted regresa con Guaicaipuro, con Túpac Amaru y Túpac Katari, que encarna en Haití y su democracia antiesclavista. Con esos indios de San Antonio del valle del Yocoima de Upata, de Altagracia y de Cupapuy…
PIAR: Gracias General Bolívar, Libertador de Colombia La Grande. Afortunadamente tanto Ud como yo y todos los patriotas vivimos hoy, porque ambos vencimos el fantasma de la muerte.
Los dos venimos del frío del exilio, todavía más helado y terrible que el heroico paso de Los Andes que supera el paso de los Alpes por Aníbal y Napoleón. Aún no hemos vencido la colonia. La colonia anida en nosotros todavía.
Mucho hay por hacer en el siglo XXI, diría el Prócer José Martí..
…[Tampoco será fácil, nada fácil: los poderosos nunca renuncian espontáneamente a sus groseros privilegios dijeron los dos Padres de aquel célebre Manifiesto de 1848]. [Su propuesta: ¡tomar el Cielo por Asalto!].
BOLÍVAR: i Aún después de muertos desde otros paisajes no somos General Piar indiferentes a la suerte de Venezuela. El Sol de Colombia La Grande, nació en Chirica. Con el Sol de San Félix, la Indiada de Upata, las Misiones del Caroní y la bendición de Amalivacá Usted nos legó la Independencia del Orinoco y multiplicó con 500 flecheros a los hijos del Moriche, del Maíz y de la Yuca. De la Piña y del Cacao.
El Sol de Colombia, Colombia La Grande nació por Angostura cruzando llanos, andes de ponchos escarchados y serpientes de agua.
.El Sol de Venezuela nace en el Esequivo.
PIAR: Al levantar el Cristo de Plata en el Juicio Final, sentí en mi pecho el verbo encendido del fraile Antonio Montesinos en la Catedral de Quisqueya denunciando los nuevos encomenderos en las Misiones de Upata y del Caroní que habían profanado el Evangelio y esclavizaban a los Hijos de Guaicaipuro y de Yocoima.
Sentí la mano justiciera y el dedo acusador de Bartolomé de Las Casas sacando los Mercaderes del Templo por la destrucción de Las Indias.
BOLÍVAR: Era el inicio de un cristianismo de liberación en América, como a tiempo lo vio el Prócer Juan Germán Roscio. También sometido a examen de limpieza de sangre para ejercer el derecho. Pero su Biblia hablaba la lengua de la independencia. Triunfo de la Libertad frente al despotismo….
PIAR: Al besar el arcoíris de la Bandera Nacional que nos legó el Generalísimo Francisco de Miranda, desde la Piedra del Medio del Río Padre, abracé a la Madre India como primera Madre de América. Madre Común de generación en generación y con ella, pedía por la Octava Estrella al grito irreductible de ¡Viva la Patria! De esa Patria, olorosa a Zapoara, a Joropo, a Calipso y a Serenata Guayanesa. ¡Morir por la Patria es vivir, decía el Gran Miranda, el hijo de la panadera, entregándome el pan de San Antonio para la vida eterna, que ahora compartimos juntos en la Segunda Independencia.
BOLÍVAR: ¡Esos Cristos azotados de Las Indias! ¡Esos Cristos azotados de Las Indias! … Replicaba el padre Las Casas. ¡Esos Cristos que también fueron negros y zambos! en la esclavitud de la diáspora africana.
PIAR: Crucificados también Nosotros, aunque en diferentes momentos del proceso de Independencia. Que de algún modo también nos acusaron de zambos y su retrato fue retirado del Salón Ayacucho del Palacio de Miraflores y de la Asamblea Nacional por los lacayos de Wáshington. Después lo sacaron de la Alcaldía de Bogotá, colocando en su lugar, el retrato del conquistador de Cundinamarca. Cuando lo creyeron muerto, dijeron sus enemigos: Ha muerto el genio del mal. Bolívar, la tea de la discordia, el enemigo de la Patria ha dejado de existir.
BOLÍVAR: Somos Quijotes. Pero ya no estamos tirándole piedras a los molinos de viento ¡Ni aramos en el mar!
PIAR: Mi crucifixión fue en Angostura, después del triunfo de San Félix, la suya fue en Bogotá. Pero antes, ya en Bogotá habían crucificado al Prócer Antonio Nariño, los mismos asesinos de Gaitán y del padre Camilo. Los mismos que mataron a San Romero de América en El Salvador. Los mismos asesinos del Pastor Protestante Martín Luther King en el Apartheid más criminal del planeta. Sin embargo, todos hemos resucitado de entre los muertos. Y hoy volvemos hecho millones, como Túpac Katari en su regreso a Bolivia y Túpac Amaru al Perú. Caupolicán a Chile.
BOLÍVAR: General Piar. Está Ud. en lo cierto. Me recordé mucho de Piar en toda la guerra de Independencia. Le cuento que en los Puertos de Altagracia, ciertas damas mantuanas no querían bailar conmigo, que ya me veían como "el zambo". De algún modo, la Independencia fue tomando de nuevo su tinte racial, su tinte colonial para los nuevos libertadores…en una sociedad de castas[algo que va más allá del color de la piel, como veremos más tarde]
En el sur de América no quisieron bailar con el General José Laurencio Silva y entonces yo, irónicamente, lo saqué a bailar, entre burlas y carcajadas y para asombro de las damas encopetadas que nos declaraban locos.
Después de Ayacucho, la oligarquía de Lima, los mismos del Grupo de Lima se burlaban del Ejército Libertador de Colombia que los había liberado. Con la indiada de Piar en Chirica y con Sucre en Ayacucho.[En Lima a los venezolanos y al Ejército Libertador nos llamaron mulatos]
[¡Dejen la burla y el garabato!¡No fueran libres sin los mulatos!]
Después en Marruecos, asesinaron al Gran Mariscal de Ayacucho, derramando la sangre de Abel.
Si no es por Manuela, que me ha salvado de los Santander de Ayer y de hoy, Longaniza estuviera contando otra historia desde otros paisajes. ¡Tampoco hubiésemos tenido el atrevimiento de Tomar el Cielo por Asalto!…en la Historia Insurgente de Venezuela, encarnada en Colombia La Grande.
Permítame esta Auto confesión: El viejo Miranda fue víctima del ímpetu de la juventud en medio de la confusión y El Hijo de la Panadera, ese blanco de orilla de padres de origen canario, cayó en manos del enemigo. Es parte de los traumas de la guerra a muerte, que no la decreté yo: había decretado la intolerancia mantuana aquella guerra social…en la cual ya estábamos sumidos. Después entendí que el viejo Miranda capitula más por la conspiración mantuana, que por razones militares frente a Monteverde.[Con Monteverde no hubiésemos podido regular la guerra a muerte como lo hicimos después con Pablo Morillo] [no por Morillo o por Monteverde sino porque la coyuntura mundial era otra, con la situación interna de España]
PIAR: Así es … Libertador…. ese mantuanaje del llano, pasando por las humillaciones de los Zarrasqueta de las Mercedes del llano, las madres "intruseras", las vicisitudes y exclusiones de una sociedad de castas y su esclavismo, fabricaron sus Boves con la complicidad del clero y durante un tiempo nos llevaron a la guerra civil. Después de la Independencia y la disolución de Colombia y la pérdida de Panamá, estalló aquí con el General Zamora la Guerra Federal al grito de ¡Tierras y hombres libres!… [que reclamaban en un grito anónimo ¡Patria para los Indios!¡Patria para los Negros!¡Patria para los pobres!]
BOLÍVAR: [Antecedido del grito ¡Patria para las Mujeres! Con el Generalísimo Francisco de Miranda emplazando el parlamento francés: ¿cómo tienen ustedes un parlamento sin mujeres?].
PIAR: Tres exclusiones que sugieren alianzas. Alianzas prohibidas. A veces clandestinas.
BOLÍVAR: Manuela ¿dónde estás? ¿Que me contradigo? Sí…me contradigo. La vida también es contradicción. Es de humanos virtudes y defectos. Ni el Hijo del Hombre decía que era perfecto. Habría que saber….¡qué piensa Dios de sí mismo!.
PIAR: Así es. Nos contradecimos en la vida para encontrarnos en el polvo de la tierra y en la eternidad.
Destaco que aquí negaron siempre a la Primera Madre de América: la Madre Tierra y la Madre India de carne y hueso, que todavía la siento estampada en aquella bandera mirandina, que me acompañó hasta la muerte y resurrección de la memoria histórica de mis ancestros. Pero que nos fue arrebatada ´por la guerra después de 1817. ¿Quién la borda ahora en mi memoria, en la memoria de mi propia Bandera en pleno campo de batalla?
BOLÍVAR: Hay que bordarla de nuevo en las luchas…en las batallas. A cielo abierto y en el tronar y en la luz de los relámpagos.
Ah…ya sé…las Josefa Camejo, las Ana María Campos, las Juana la Avanzadora, las María Rosario Nava, Las Luisa Cáceres, hijas de Apakuana, de Ana Soli, de Guiomar y de Hipólita…Las hijas de Manuela Sáez.
BOLÍVAR : Indios, Negros y Mujeres, como ya lo olfateaba Manuela Sáez, desde Alaska hasta Tierra del Fuego, quedaron como la guayabera, por fuera de las nacientes Repúblicas.
PIAR: Algo muy grave…
BOLÍVAR: Por eso es fundamental General Piar, que en la segunda Independencia, el abanico se abra desde el Sol radiante, en el rostro de Dios a imagen y semejanza del prójimo; donde escribamos una Historia Insurgente, viva, vivenciada en la Resistencia Indígena. Emancipadora, que había permanecido cerrada bajo las sombras de una noche triste, sin cocuyos ni estrellas, cerrada por los groseros privilegios del mantuanismo burocrático, terrateniente y depredador, de una Iglesia colonial, muda y sorda y de una Madrastra Desnaturalizada, que devora a sus propios hijos y nietos. Y de un Padrastro accidental y transitorio.
PIAR:. Necesitamos también una revolución cultural y educativa,, comunicacional, espiritual y simbólica que sirva de humus fecundo a la revolución política económica y social, cuando la lluvia viene a preñar la tierra y la Sierra Imataca bajo el arcoíris de tonos verdes, verdosos, azules y azuleicos y los pájaros hablan con el aliento de flores montañeras . Imataca, gota de agua en la noche oscura. El amanecer está por llegar…
BOLÍVAR: Es parte esencial de lo que hemos llamado nuestra urgente regeneración biológica y espiritual. Más en esta guerra asimétrica, simbólica y mediática. Que poco perciben las mayorías nacionales y las minorías oprimidas. No entienden que esta guerra tiene el tapaboca de una guerra invisible y del silencio, el distanciamiento social de la Organización Mundial de la Salud y de la ONU.
PIAR: Sin Independencia, sin unión indo americana y bolivariana, sin unidad cívico-militar, nacional, continental y caribeña, sin alianzas tácticas y estratégicas a escala mundial, seremos siempre esclavos de la Santa Alianza del colonialismo europeo, de la Doctrina Monroe, de los bloqueos inclementes y la diplomacia del Garrote del Tío Sam, de Tarzán y del Llanero Solitario, con Tonto a su derecha. [De esos bloqueos de La Planta Insolente del extranjero que desde los tiempos de Cipriano Castro y ahora en nuestro tiempo, han profanado el suelo sagrado de la Patria, imponiéndonos Presidentes paralelos, nombrados a dedo desde Wáshington, en complicidad con el colonialismo europeo]
BOLÍVAR: Creo que no fue en vano el mágico ¡Por Ahora! de aquel terrenal Ángel Guardián de nuestro legado, que abrió las compuertas de Guri al abrazo eterno del Caroní y el Orinoco desde el Sol de San Félix hasta el Sol de Carabobo, con eco hacia Ayacucho hasta el Alto Perú. Allí se encuentran de nuevo la Primera y la Segunda Independencia, en la nueva coyuntura mundial. Las alianzas estratégicas con el Mundo Emergente (China, Rusia, Irán, Turquía, Siria, India, Sudáfrica); que apuntan hacia un Nuevo Equilibrio del Universo.
PIAR: El Prócer Antonio Nariño siempre fue un cuerpo extraño a la rancia oligarquía bogotana…El Palacio de Nariño, manipulado por los Santander –de ayer y de hoy- siempre expulsó de las entrañas de la tierra a sus propios Libertadores.
BOLÍVAR: Desde los tiempos de Guzmán Blanco, espero también en el Santuario de la Patria, los restos simbólicos del General de División José Cornelio Muñoz, compadre de uña y carne del General Páez, Centauro Gemelo de mil batallas en las sabanas del llano junto con el Negro Primero.
Le comento que en 1848 en la Batalla de Los Araguatos el General Muñoz le propinó al Taita, su compadre José Antonio Páez, la peor de sus derrotas. Le cobraba la traición al Proyecto de Colombia La Grande, la traición a la Patria Chica, a sus oficiales y soldados. Convoca a Páez a la regeneración humana y espiritual en los principios de la Independencia, la libertad y la justicia. Este es uno de los antecedentes más serios de la Guerra Federal.
PIAR: Hablamos también en la lengua de Abreu de Lima, porque los terribles 15 años de una guerra cruenta de Independencia de los países bolivarianos, crearon las condiciones históricas necesarias para que Brasil negociara con el Imperio portugués su Independencia por medios pacíficos y sin derramamiento de sangre.
BOLIVAR; Aunque quedaron apegados al esclavismo y así a los designios de la Santa Alianza, trasladando el imperio portugués al Brasil. El Mariscal de Ayacucho los amenazó con avanzar hacia territorio brasileño en una alianza anti-esclavista.
PIAR: Apoyado Portugal en la Santa Alianza. Pero hay una Santa Alianza contra Venezuela de Estados Unidos y de toda Europa. Porque aquí está El Dorado: ¿acaso olvidamos las falsas promesas de Walter Raleigh a los Caribes? Falsas promesas, de que la Reina de Inglaterra los trataría mejor que la Reina de España. Con ese cuento, los ingleses querían después llegar hasta Upata. Así trató Hitler de engañar a los descendientes de los Incas, prometiendo restaurar el Incanato. Lobos disfrazados de inocentes ovejas. Falsos pastores, falsas promesas.
BOLÍVAR: Eso es claro.
PIAR: Muy claro. Pero mucha gente no lo percibe así. No ve esta guerra no convencional contra Venezuela, fuera de serie.
BOLÍVAR: Dígame algo General Piar. ¿Es verdad que Ud. fue el primero que utilizó el ¡Vuelvan Caras! Como estrategia sorpresiva en la guerra desigual?
PIAR: Siempre entendí que debíamos aprender mucho de los indios en el tratamiento de una guerra muy desigual para el dominado. La huida simulada para después volver de frente contra el enemigo y atacarlo desconcertado para desorganizarlo son viejas tácticas de guerrilla indígena. Lo hizo Guaicaipuro, lo hacían los mapuche y los vietnamitas…. Ahora, los teóricos de la guerra muchas veces presentan como propio lo que han aprendido de los pueblos colonizados.
BOLÍVAR: El Mariscal de Campo Pablo Morillo había advertido al Brigadier La Torre de sus mañas militares y del factor sorpresa. Pero el mensaje le llegaba unos días después de la Batalla de San Félix.
PIAR: (Risas y muecas) Aprendí también en Haití que no podíamos pelear al enemigo con las mismas tácticas y estrategias de las guerras europeas. Aquí aprendimos a pelear a lo indio y a lo cimarrón. Usted mismo usó tácticas militares de sorpresas y apariencias para llevar a La Torre al Campo de Carabobo… Usted se curtió en el llano. Después lo hizo Zamora en la batalla de Santa Inés…En la Guerra Federal, hablé en la lengua de Ezequiel Zamora, encarnado en el indio y el negro-
BOLÍVAR:[El parte que presentó el Capitán Rafael Sevilla del ejército realista, ya lo veía como "el zambo" Piar, quien dirigía la caballería y, quien hizo del ejército del Brigadier La Torre, una verdadera carnicería humana, salvándose sólo los que emprendieron la fuga, perseguidos hasta en los montes, incluyendo al propio La Torre] Yo también muchas veces hablé en ese idioma: hoy amanecí vuelto un caribe y pasé por las armas a muchos españoles. ….Pero aprendí mucho de Sucre: Gloria al vencedor y honor al vencido.
PIAR: Por allí se comienza a lo Gandhi para humanizar la política.
BOLÍVAR: La guerra hace que el vencedor crea que son los únicos hombres. Pero esto se le ha atribuido sólo al ´pueblo caribe para demonizarnos y justificar su esclavitud y exterminio. A mí me atribuyen como caribe la guerra a muerte.
PIAR: Así es. Debemos ser respetuosos de la lengua materna y de la espiritualidad de cada pueblo. El Libertador decretó la enseñanza del quechua en las Universidades del Perú como lengua franca. Lo cual significa que también le estrujó el corazón la grandeza cultural de todos los pueblos indios. Incluso del pueblo caribe y arahuaco.
BOLÍVAR: Por supuesto General Piar…
PIAR: De acuerdo, Libertador.
BOLÍVAR: El mantuanaje siempre vivió alarmado por los alzamientos indígenas de Túpac Amaru y de Túpac Katari.
Túpac Amaru decretó la abolición de los obrajes indígenas (1780). Ese mismo año, 16 de noviembre decretó la abolición de la esclavitud de los negros, estableciendo la pena de muerte para el clérigo, particular, civil o militar que persistiera en tener negros esclavizados.
PIAR: Es muy claro. Que eso fue antes de la revolución francesa, mucho antes de Haití y en plena época de la independencia de los Estados Unidos (donde también participó nuestro General Miranda y luego en la revolución francesa).
BOLÍVAR: A partir de 1803, con la Independencia de Haití, una democracia negra antiesclavista y la Santa Alianza de las monarquías europeas(1815), acusaban a los Libertadores de Sudamérica y del Caribe de querer restaurar la barbarie indígena y la barbarie negra. Los Libertadores estábamos en 1815, caminando por el filo de una peligrosa hoja de cuchilla. Por eso era muy fácil después de la batalla de San Félix, crearle a Piar esa imagen de exterminador de blancos, la resurrección de Boves y la continuidad de la insurgencia canaria.
PIAR: Un cerco mantuano me asedió después del triunfo en Chirica. Era un mundo hostil en las redes de aquella época: el clero, la inquisición, la Santa Alianza, la sombra del indio y del cimarrón detrás de nosotros, el terror de los blancos con el espectro de Boves y la guerra civil, Inglaterra y Estados Unidos como caimán en boca de caño, pescando en río revuelto. Desde Jamaica ya Ud., sentía que nos acusaban de querer restablecer la barbarie indígena, negra y canaria, pasando por el terror a la pardocracia.
BOLÍVAR: Eso es tan verdad, que en el año 15 cuando escribo La Carta de Jamaica, sentía que Europa y la misma Inglaterra sudaban en el temor de todos nosotros, acusándonos de querer restaurar la barbarie indígena de las insurrecciones andinas o de querer instaurar lo que ellos llamaban la barbarie haitiana. Ya olíamos al zambo Chirino y al movimiento de Gual y España.
PIAR: Ese fue el clima que me cercó en el año 17 después de la Batalla de San Félix, aparte de que el emporio económico de Guayana me llevó al enfrentamiento directo con las Misiones del Caroní. Me tocó liberar y convocar a los indios de Upata y de Tupapuy a la lucha por la Independencia. Por eso le dije. La clave está en Guayana, protegida con ese muro de bronce, el Orinoco. Después lo dijo el mismo Pablo Morillo: Si Piar controla el Orinoco, llegará hasta el infinito del territorio y perderemos el control de todo.
BOLÍVAR: Algo que en verdad, me costó entender. Desde el llano veía hacia Caracas, quizá movido por la nostalgia. Después Angostura fue más una ciudad republicana que una ciudad colonial.
PIAR: Por eso sentí en lo más hondo de mi corazón el llamado evangélico del fraile Montesinos y su denuncia de los encomenderos. Esto sin olvidar, que en los pueblos de misión el jefe religioso es al mismo tiempo el empresario y el jefe militar o de policía. Las misiones del Caroní eran ya una empresa capitalista con trabajo indígena esclavista.
Esto aparte de que en el proceso el mismo Ejército Libertador de La Gran Colombia fue excomulgado, pero apto de nuevo para la comunión cuando entraba triunfante a Bogotá.
BOLÍVAR: Como me decía la Madre Hipólita. Nadie le tira piedras al árbol que no da frutos.
PIAR (Sonriendo) El que a buen Árbol se arrima, buena sombra le cobija. Los Ejércitos Bolivarianos de Venezuela y de Colombia La Grande, nunca se convirtieron en ejércitos de ocupación en los territorios liberados. Y eso es único para ser justificados por la historia.
BOLÍVAR: La historia nos absolverá….
PIAR: En una sociedad de castas, clases y estamentos, las contradicciones y los enfrentamientos de padres contra hijos, de hermanos contra hermanos, es casi inevitable. Yo no vine a traer la paz si no la espada, dijo el Hijo del Hombre. Nos une la causa sagrada de la Independencia, donde jugaba y sigue jugando un papel esencial la lucha contra el esclavismo y la reivindicación en cada presente histórico de los pueblos originarios. Que todo pasa por la lucha contra los imperios europeos y aquel naciente imperialismo de "América para los norteamericanos".
BOLÍVAR: Los Estados Unidos parecen destinados a plagar a la América de hambre y miseria en nombre de la Libertad.
PIAR: Se adelantó Usted bastante a su época, General Bolívar…
BOLÍVAR: De paso a Venezuela le han reducido los vecinos su territorio y sin embargo, somos el único país del continente que no ha tenido guerra con sus vecinos. Por eso instrumenté aquello de que lo que ya posees, lo debes seguir poseyendo. Esto para evitar guerras y enfrentamientos entre países hermanos. De pueblo contra pueblo. Hoy somos una revolución pacífica, pero no desarmada para preservar nuestra integridad territorial, física, moral y espiritual. El Esequivo es nuestro y clave de nuestra fachada Atlántica.
PIAR: Siempre Ud., Sucre y Urdaneta, como los Maestros Simón Rodríguez y Andrés Bello guardaron distancia de los monarcas, de los Césares, de los Napoleones y de los Alejandro Magno. De los esclavistas y de los Boves; de los Sarmiento, los Alberdi y de los José Vasconcelos. Por eso, por todo eso, el Prócer cubano José Martí fue un gran bolivariano, pero también el más grande indianista de su tiempo. ¡América no caminará sin el indio!
BOLÍVAR: La Independencia es el primer acto de Cultura. ¿Cómo fue el Mensaje de Piar a los Indios de Upata y de Tupapuy?
PIAR: Vamos a pegarlo de nuevo en todas las Plazas Públicas y Municipalidades de nuestra Indoamérica y también en los cuarteles:
MENSAJE DEL GENERAL EN JEFE MANUEL PIAR A LOS INDIOS DE UPATA Y DE TUPAPUY
[El gobierno español se ha acabado. La Patria ya está libre y vosotros que sois sus primeros hijos, deben ser los primeros en gozar de la libertad, de sus privilegios y derechos. Hasta ahora habéis estado sujetos al capricho arbitrario de los capuchinos, que no contentos de ejercer su ministerio espiritual, los oprimían reduciéndolos a esclavos. En adelante no será así. El Ejército de la República es vuestro defensor. Nosotros los miramos como hermanos y como tales, les concedemos los primeros derechos humanos. Lo que trabajéis será para vosotros. Los servicios que hagáis se os pagarán y seréis premiados por ellos, con todos los honores a que os hagáis acreedores. Venid pues a reuniros con nosotros. Volved a ocupar vuestras casas y pueblos. Nadie os hará daño. Vuestras familias, mujeres e hijos serán respetados y disfrutareis con ellos, tranquilidad, paz, abundancia y felicidad.] General en Jefe Manuel Piar
Cuartel General de Upata: 7 de febrero de 1817.
BOLÍVAR: Como dijeran el Ángel Guardián y constructor de la CELAC y su hijo, la Comunidad de estados latinoamericanos y caribeños recoge el viejo llamado del Congreso de Panamá para construir La Patria Grande en la segunda Independencia. Luego expresaron que Bolívar y Piar se encontrarán un día para afianzar con nosotros la segunda Independencia.
Yo (también) me siento más indoamericano y afroamericano, que hispanoamericano, que iberoamericano y que latinoamericano.
¿Quinientos años de Padrastros y Madrastras no bastan? Seamos nosotros lo que somos sin importarnos el racismo europeo…Caminemos con nuestros propios pies, decía el Prócer Gervasio Artigas. Inventamos o Erramos, decía mi Maestro.
PIAR: Que de algún modo, también somos indígenas y afroamericanos. No somos un Pueblo Nuevo y sin raíces o con las raíces en el aire. Somos tan viejos y tan nuevos como Europa. Reivindicar la Madre para legitimar al Padre…y dignificar al Hijo o Hija. Porque el Padre también es Hijo de una Mujer…
Inventamos o erramos ¿Qué haremos ahora?
BOLÍVAR: ¡TRIUNFAR! Al final descubrimos con el Maestro Fruto Vivas y con Neruda, que hay hombres y mujeres que no han muerto y que no morirán nunca… Hoy tenemos Patria - Unidad, Lucha, Batalla y Victoria.
¡Unidad, Unidad o el enemigo os devorará!