“De cada cual según su capacidad, a cada cual según su trabajo”

Carlos Marx (1891) en Crítica al Programa de Gotha.

El dilema de los alimentos, el agua y los combustibles en la sociedad moderna

Al igual que los alimentos y el agua, los combustibles son una necesidad para la sociedad actual, valga decir, para la sobrevivencia de la especie humana. En las últimas décadas, los precios de estas tres variables han sufrido drásticos aumentos a escala global, con grandes consecuencias económicas y sociales.  Una de las preocupaciones de los gobiernos es definir políticas que conlleven al desarrollo de un sistema productivo y de distribución de los diferentes bienes y servicios que de estas se desprenden a precios accesibles por la población y el resto de las industrias. El dilema siempre ha sido si esos precios son justos y razonables.

En la mayoría de los países del mundo, la producción y distribución de alimentos, agua y combustibles son controlados por un pequeño número de corporaciones globales, y ante cualquier incremento de sus precios las familias ven afectados sus ingresos, por lo tanto, su nivel de consumo, con graves consecuencias en las sociedades con condiciones más desfavorables, como Haití, Nicaragua, Guatemala, India, Bangladesh, Somalia, Etiopia, entre otros, que ven magnificada su situación de pobreza extrema.

La falacia sobre la necesidad de igualar el precio de la gasolina a precios internacionales

En el marco del debate convocado por el presidente Nicolás Maduro sobre la determinación de un precio justo para los combustibles en Venezuela, específicamente el de la gasolina, han surgido varias propuestas entre ellas el de igualarlos a los “precios internacionales” o  a precios del mercado internacional con diversos fines, que considero necesario rebatirlo por cuanto pudiera generar confusión en la opinión pública nacional.

No existe un precio internacional de la gasolina

La gasolina o nafta es un producto derivado del petróleo crudo, que se obtiene en mayor cantidad de la destilación de los hidrocarburos livianos y se utiliza en motores de combustión interna, como vehículos de motor, con exclusión de los aviones, que utiliza “jet fuel”.

Hay que aclarar que no existe un precio internacional de los combustibles, entre ellos el de la gasolina, porque cada país tiene sus propios precios de acuerdo con su política energética, que entre otros elementos, depende de la infraestructura energética disponible, sus propias regulaciones, políticas impositivas y de comercialización diferente, del sistema de refinación, una estructura de oferta y consumo de combustible diferente, y la calidad del producto ofertado.

Lo que realmente existe es un sistema de formación de precios del petróleo en su forma cruda, es decir aquel hidrocarburo que se extrae directamente del pozo para luego ser vendido a su principal cliente: las refinerías, cuyo precio es fijado con base en los precios marcadores referenciales de diferentes crudos. Por ejemplo, en Europa el crudo referencia es el Brent (de alta calidad, 38° API), ideal para la producción de gasolina; Estados Unidos y la mayoría de los países de América se referencian por medio del West Texas intermédiate (WTI), de alta calidad (39,6º) y dulce (0,24% de azufre). En Arabia Saudita se toma como referencia el Arab Light, un crudo mediano de 34ºAPI. En Asia Pacífico se utiliza el DUBAI, un petróleo más pesado y cinco veces de menor calidad que el Brent.

Por su parte, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) se referencia en 12 tipos de crudo de calidad mediana y ligera con excepción del Bachaquero de Venezuela (17º API) que es el de menor calidad (grados API) entre los socios, cada uno con valor distinto en el mercado petrolero internacional: El argelino Saharan Blend, el indonesio Minas, el iraní Iran Heavy, el iraquí Basra Light, el Kuwait Export, el libio Es Sider, el nigeriano Bonny Light, el Qatar Marine, el saudita Arab Light, el Murban de los Emiratos Arabes Unidos, el BCF (17° API) de Venezuela y el angoleño Girassol.

Por la calidad del crudo venezolano, suele cotizarse con un fuerte descuento cerca del 12% (diferencia promedio de 10 dólares por barril) con respecto a los crudos de alta calidad (WTI y el Brent). No obstante, el WTI como el Brent están entre los más escasos a nivel mundial, representando cerca del 2% del total de las reservas mundiales con tendencia a la baja, que hace que su comercio sea limitado, mientras que los llamados crudos no convencionales (crudos extrapesados) como los de la Faja Petrolífera del Orinoco de Venezuela, el de las Arenas de Esbelta y de esquistos representan casi el 80% de las reservas mundiales, que explica una de las razones porque las compañías transnacionales están tendiendo a invertir para producir crudos más pesados.

El precio promedio mundial del litro de gasolina como un elemento más de referencia para la toma de decisiones

Voy a comenzar enfatizando que es un error hablar, de manera ligera o tan ambigua, de fijar el precio de la gasolina en Venezuela tomando como referencia el (o los) “precios internacional de la gasolina”, dado la complejidad inmersa para su determinación.

Cabría preguntarse ¿se tomará en cuenta el promedio mundial?, que como dato científico sólo sirve para ver el grado de dispersión entre los datos utilizados, y que no permite comprender los elementos que realmente inciden en los precios del combustible dentro de los países, que van más allá de simples parámetros cuantitativos, sino más bien de carácter cualitativos, como los elementos políticos, sociales, culturales, históricos y otras variables económicas como el ingreso pér cápita, la inflación, niveles de pobreza, los precios del petróleo entre otros, que como consecuencia, tienen un alto impacto en lo social.

Como indicador estadístico, sólo podría calcularse el promedio del precio de la gasolina de los países del mundo para compararlos con los de Venezuela. No obstante, este dato no debería ser determinante, como lo han sugerido un grupo de analistas y expertos en el tema petrolero, sino que, podría ser un elemento más a considerar a la hora de tomar una decisión racional, que en esencia es una decisión política con un alto impacto económico y social.

Abajo se muestra un cuadro comparativo de los precios de la gasolina tomando en consideración 41 países. En él se puede observar que el precio promedio del litro de la gasolina está por el orden de 1,04 US$/lt., que calculado al tipo de cambio de 6,3 Bs./US$, representa un valor de 6,57 bolívares por litro. Noruega y Hong Kong son los países con el precio de la gasolina más alto, ubicado en 1,84 US$ por litro (Bs. 11,59 por litros). Seguido por los Países Bajos, Italia, Turquia, Suiza y Dinamarca. Resalta Uruguay como la gasolina más cara de América (1,59 US$/lt.), seguido por Cuba (1,37 US$/lt.), Argentina (1,37 US$/lt.) y Brasil (1,16 US$/lt.). Las vecinas Colombia y Guyana la ubican en un dólar por litro.

Y Venezuela, sin duda alguna, es el país con la gasolina más barata del planeta, que calculando el dólar al precio oficial preferencial de 6,30 Bs./US$, la expende a 0,02 dólares por litros. Esto representa un diferencial con respecto al promedio mundial de 6 Bs./lt. y con respecto a Hong Kong de 11,5 Bs.

Una pregunta clave sería ¿cuál va ser el precio de referencia? ¿El de los países con la gasolina más alta? Que, como se puede observar, entre los 10 primeros se encuentran Hong Kong, Noruega, Italia, Suiza, Dinamarca, Israel y Reino Unido, con precios de la gasolina que promedian 1,72 US$/ltr., y son países que se ubican entre los que tienen mayores ingresos per cápita del mundo (más de 20.000 US$ al año), además que en su mayoría no son países petroleros (excepto Noruega e Italia).

O podría preguntarse: ¿se tomará como dato para el análisis el precio de la gasolina de los países productores de la OPEP sin Venezuela?, que están entre los más bajos del mundo, y juntos promedian 0,32 US$/ltr. (2,00 Bs./litro).  

El impuesto al consumo de gasolina: determinante fundamental

Uno de los principales determinantes del precio de la gasolina en los países es el impuesto aplicado a su consumo. Según el portal web de la Organización de los Países Exportadores de Petróleo (OPEP), en el año 2013, las variaciones del precio medio de un litro de gasolina en los mayores consumidores de energía, ubicados en los países que conforman el G7, así como los que conforman la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) conformado por los 34 países más industrializados, se debe al diferencial existente en los impuestos que les cobran al consumidor final.

La política impositiva en materia energética varía en cada país. La OPEP los clasifica desde los de niveles relativamente modestos - como en los EE.UU. - a niveles muy altos como es el caso de Europa y Asia/Océano Pacífico. Por ejemplo, en el año 2013, el gobierno del Reino Unido ganó aproximadamente el 58% del precio de venta por cada litro de gasolina expendido en las estaciones de servicio. En contraste, los gobiernos de los países productores de petróleo (incluyendo la OPEP) ganaron aproximadamente el 33 % del precio de venta al consumidor de ese combustible.

Cuadro 1. Relación de precios de la gasolina entre países según su cuantía

(A enero 2015)

...