Para responder esta pregunta debemos primero recordar cuál es la meta de la Revolución Bolivariana , hacia dónde se dirige: Está establecido que la meta es el Socialismo.
Veamos entonces las características universales del Socialismo y algunas particularidades de su implantación en Venezuela. Sólo con estas precisiones podremos determinar si los pasos que demos son adecuados, nos acercan a la meta, o si por el contrario son perjudiciales, nos alejan de la meta.
El Socialismo es un sistema social que divide la historia de la Humanidad en dos períodos:
Uno, el primero, caracterizado por la posibilidad de que unos hombres se apropien de la vida de otros hombres. Esta apropiación adquiere diversas modalidades: esclavismo, servidumbre, capitalismo. De esta condición económica se deriva una espiritualidad, una cultura encargada de justificar, defender, perpetuar, reproducir la relación. La principal característica de esta espiritualidad es el egoísmo y su principal consecuencia es la fragmentación de la sociedad, estos rasgos sociales han evolucionado a través del tiempo, se han refinado, hasta llegar a los días del capitalismo.
El otro período está por verse, sus manifestaciones han sido o erradas, o muy pequeñas. Se caracteriza por la integración de la sociedad, el rescate de la Conciencia de pertenencia a la Sociedad , del deber social.
El primer período en su corta existencia de algunos miles de años, ha conseguido lesionar de tal manera a la naturaleza que hoy peligran la existencia de la humanidad y de la vida, en estas circunstancias ya la lucha no es por superar la explotación del hombre por el hombre, la lucha es por existir, por la sobrevivencia de la vida.
De allí que, de la entrada de la humanidad en el segundo período depende la vida planetaria.
En Venezuela estamos luchando y avanzando en ese camino, el de ser ejemplo para el resto del mundo, convencer con el ejemplo para que el camino al segundo período, al Socialismo, sea emprendido con fuerza. Ese es el reto.
Pero ¿Cómo saber si vamos bien, cómo saber si una acción, un plan, una táctica es conveniente, nos lleva hacia la meta?
La Revolución en feroz lucha contra el capitalismo, contra el egoísmo humano, tiene un tiempo muy corto para consolidar la Conciencia del Deber Social, si en ese corto tiempo no logra establecer una fuerte espiritualidad amorosa, será irremediablemente atrapada por el capitalismo. De la misma forma que el capitalismo tuvo su acumulación originaria de capital, el Socialismo necesita su acumulación originaria de Conciencia del Deber Social, de amor. Esta es la real medida de su fortaleza.
De aquí se desprende la regla de oro que mide las acciones revolucionarias, y nos dirá si las Comunas son ángel o demonio: “Si integran a la sociedad, entonces son buenas, si contribuyen a su fragmentación son malas.” Es un engaño pensar que la suma de egoísmos individuales o grupales es la integración, eso es una ficción. La integración social es la suma de individuos o grupos con conciencia social, con visión de sociedad.
¡Chávez es Socialismo!
¡Irreverencia en la discusión, Lealtad en la acción!