“Allá, más arriba de la colina del "Cuartel de la montaña", están sembrados los sueños que quedaron grabados en el corazón del pueblo venezolano, de América y de los excluidos del mundo. ¡Por Ahora y Para Siempre!, con el Comandante Chávez para afianzar la Revolución Bolivariana y el futuro de una Patria Bonita”.
El título del presente artículo lo tomamos prestado de una cita de Alí Primera que el Comandante Presidente Hugo Chávez Frías, incluyera en la presentación de su programa del candidato de la Patria, el 12 de junio de 2012 y que resume, junto a su testamento de los cinco objetivos históricos, el pensamiento del gigante, quien nos dejó físicamente el 5 de marzo a las 4:25 de la tarde del presente año.
Ahora, cuando apenas empezamos a escudriñar el legado del hijo de Sabaneta y nos adentramos en el pensamiento de un hombre que cambió la historia contemporánea de la Patria de Bolívar, es importante buscar antecedentes como los escritos de su puño y letra en el programa que hoy enarbola su discípulo Nicolás Maduro y el cual será el mapa de vuelo para el próximo periodo de gobierno, luego de su partida.
“Como decía nuestro Libertador en 1820: – escribió el Presidente – Es imperturbable nuestra resolución de independencia o nada. Independencia definitiva o nada debe ser la divisa de los bolivarianos y bolivarianas de hoy. Independencia definitiva es nuestra causa y nuestra tarea permanente”.
En este sentido explica: “La Independencia entendida desde el ahora, desde el aquí, nos obliga a ver hacia el pasado para encontrar el rumbo cierto hacia el provenir. Es por eso que la tesis reaccionaria del Imperio y de la burguesía apátrida contra la Patria, nosotros y nosotras le oponemos la tesis combativa, creativa y libertadora de la independencia y del socialismo como proyecto abierto y dialéctica de construcción: la Independencia no ha terminado y la forjamos en nuestra lucha diaria y permanente”.
Si alguien dejó claro y delineado el futuro de la Patria fue nuestro Comandante Hugo Chávez, luego de superar en aquel histórico 4 de febrero, el karma de nuestro país en la búsqueda de un camino de unidad revolucionaria, que tanto le había costado al pueblo y el cual había servido a la derecha para aferrarse al poder, espoliar nuestra riquezas y acabar con nuestra identidad nacional.
“Nos toca – según lo expresó nuestro Comandante - realizar plenamente el sueño libertario que nunca ha dejado de palpitar en la Patria y que hoy está latiendo de manera incesante. Así lo creo desde la fe combativa y la razón amorosa que me alienta: la herencia heroica nos obliga y tal exigencia es bandera y compromiso para nosotros y nosotras. Desde el tiempo que nos ha tocado vivir es preciso honrar los retos; tantos sacrificios no pueden ser en vano, hacerlos carne y sangre de la vida nueva tiene que seguir siendo el horizonte que nos llama y desafía”.
Es por ello que Hugo Chávez, “el gigante de América”, nos recordaba a cada instante para fortalecer el “Socialismo del Siglo XXI” las bases del “Proyecto Nacional Simón Bolívar” y el Primer Plan Socialista de Desarrollo Económico y Social de la Nación.
Su reto es impostergable y lo aclaraba: “No nos llamemos a engaño: la formación socioeconómica que todavía prevalece en Venezuela es de carácter capitalista y rentista. Ciertamente, el socialismo apenas ha comenzado a implantar su propio dinamismo interno entre nosotros. Este es un programa precisamente para afianzarlo y profundizarlo; direccionado hacia una radical supresión de la lógica del capital que debe irse cumpliendo paso a paso, pero sin aminorar el ritmo de avance hacia el socialismo”.
Las cartas están echadas y el camino quedó trazado. El reto es inmenso y las lecciones aprendidas junto a Chávez, quedaron sembradas como lo decía su consigna “en el corazón de la Patria”. Su memoria debe ser honrada el próximo 14 de abril con el triunfo de Nicolás Maduro, el cual no es contra el candidato majunche; sino contra el Imperio; el verdadero enemigo que siempre ha asechado nuestra Patria.
¡No pasarán…! ¡ venceremos!
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