La supuesta inteligencia del sistema mundo que pretende imponer su maquiavélica estrategia de laboratorio para seguir dirigiendo las riendas de la sociedad a su antojo, para sobrevivir ante el desgaste que viene sufriendo por la evolución social, natural, de la humanidad que cada vez más, busca satisfacer su necesidad de inclusión, reconocimiento, de alteridad, de justicia social, no es nada traído de los cabellos, es algo real, cuyo ejemplo es tangible, al observar los últimos acontecimientos políticos que se han venido sucediendo en el mundo.
El gatopardismo de la izquierda es más de eso. El sistema deja o propone que surjan “nuevos líderes” que harán gala de “ tratativas pespunteadas de tiroteos inócuos y despues todo sera igual”. Lo importante es resguardar el órden del sistema en su trayectoria hacia la consolidación de una unidad de pensamiento regida en este caso, por el neoliberalismo. Te dejan ser, para que cuando esbozes la señal de querer ser, conducirte por el camino que ya se tiene trazado.
Así ha venido pasando con éstos, eufemisticamente “y que líderes”, para no llamarlos como debería ser, pero es lo que provoca, cuando un conocido eurodiputado español, Pablo Iglesias, que viene izando las banderas del socialismo gatopardo, descaradamente, desconoce el sistema jurídico venezolano y decide cuestionar una decisión propia de la institución tribunalicia nacional, soberana, sólo porque él cree, que su par de casta rancia, política, Leopoldo López, es un santo niño de Atoche.
El “señor” Pablo Iglesias, engreído, por lo que piensa que es ya su panacea política, cree, que Venezuela como “país periférico” como acostumbra a tildar despectivamente a los países del llamado tercer mundo, es una de sus colonias españolas, donde existe un mundo sin ley, como el que ellos instauraron aquí cuando cometieron genocidio con nuestros primeros moradores y trajeron a toda suerte de los “malandros de la época” para que robaran,saquearan y expoliaran nuestras riquezas.
“Pues no “señor Iglesias” en Venezuela existe una realidad histórica que ustedes nunca se podrán dar el lujo de tener, porque en primer lugar, estas realidades económicas políticas y sociales, por más que quieran asociarlas a otras, socialmente no resultan como tal. Surgen de realidades propias, extraordinarias, como ha venido sucediendo con Venezuela, desde Guaicaipuro, José Leonardo, Bolívar y los libertadores,Zamora y Chávez.
Sabe, “Señor Iglesias” el Poder Judicial en Venezuela, fundamentado en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela,1999, y en la Ley Orgánica del Tribunal Supremo de Justicia, son autónomos y soberanos .Y aquí , precisamente en Venezuela, no obedecemos a ningún mandato externo y mucho menos de la corona española a la que desde hace muchísimos años con Simón Bolívar y los libertadores, mandamos a freir monos.
Y más cuando un ser excepcional, como el comandante eterno y presidente constitucional de Venezuela Hugo Rafael Chávez Frías, ratificado en más de 15 consultas electorales democráticas, planteó al mundo un modelo de socialismo del Siglo XXI, en el que una Constitución única en el mundo establece, igualdad, inclusión ,justicia social, democracia participativa y protagónica, pluriculturidad, multiétnia, etc. El amado Chávez, desarrolló una revolución social cuyo objetivo es una unión cívico –militar y el empoderaramiento de un pueblo con igualdad, la máxima felicidad posible, Justicia y seguridad social .
Y de allí, “señor Iglesias” que nuestro sistema de justicia obedezca a los reclamos de un pueblo que exige justicia y en el caso del opositor al gobierno, representante de la ultraderecha venezolana , Leopoldo López, se dictó una sentencia por ser responsable de los delitos de incendio intencional, instigación pública (guarimbas, vandalismo, golpe de estado), daños a la propiedad colectiva, asociación para delinquir, lo que ha dejado un saldo de 43 personas fallecidas y cientos de heridos. Además, de que este individuo también se encontró ligado a actividades paramilitares ordenadas desde la frontera con Colombia,que han ocasionado daños a las familias y a la economía y seguridad nacional, publicamente denunciadas por autoridades del gobierno. Y las investigaciones sobre el caso, apuntan a muchos más cargos.
¿Sabe usted eurodiputado, cuántas unidades de transporte, universidades, casas de alimentación, casas de cuidado diario con niños adentro, instalaciones de asistencia médica (CDI, Ambulatorios de Barrio Adentro) transporte de alimentos, instituciones públicas y oficinas; árboles, semáforos, SE QUEMARON, SE DESTROZARON BAJO INSTRUCCIONES DE SU LEOPOLDITO. Esto sin contar los muertos y heridos, que enlutaron y causaron dolor al pueblo venezolano.
Como puede ver, señor Iglesias, aquí en Venezuela no tenemos Ley Mordaza. Aquí hay ,diría yo, demasiada libertad para hablar y hacer. Por eso el mister Leopoldo, trasgredió sus libertades para convertirse en más que un delincuente, en un enemigo número 1 de la sociedad. Por eso, la justicia venezolana, atendiendo al clamor del pueblo, lo encarceló y lo sentenció a más de 13 años de cárcel.
Pues, sí, señor eurodiputado, no la siga cagando, usted debería más bien empaparse un poco más sobre la realidad de “sus países periféricos”, pero aún más de un país libre y soberano como Venezuela, atrincao, para no decir arr… que no obedece a dictámenes imperialistas, neoliberalistas ni gatopardeanos. Aquí nos decidimos a cambiar con el amado Chávez y como PUEBLO CHÁVEZ, seguimos con el presidente Maduro. Y júrelo, sin que me quede nada por dentro, señorcito Iglesias, que ni usted, ni sus amiguitos de casta gatopardeana como Leopoldo López y su combo, no nos quitan el sueño, porque “Águila no caza moscas” y porque, MÁS NUNCA VOLVERÁN!!!