Los más reaccionarios del oposicionismo: Delsa Solórzano, Freddy Guevara, Julio Borges, Tomás Guanipa -la lista es larga- no se les arruga el ojo para decir que el chavismo, ahora disminuido, caduco y perdedor- ha iniciado una campaña de miedo contra el pueblo que apoyó “el cambio” en Venezuela; es más, los 112 del patíbulo han enfilado las baterías contra Ramos Allup de manera silenciosa, quien al final de la situación no tiene pena ni le importa dar a conocer el libreto neofascista y liberal, antes de tomar posesión. Es mucho más fácil para ellos decir que el Gobierno: “sinvergüenza, desesperado, alocado, inmoral” y cuánta vaina más, inició una campaña de miedo al perder la mayoría en la Asamblea Nacional, cuando en realidad minutos después que el CNE dio los resultados, los “ganadores” en especial Henry Ramos -que por su condición de adulto mayor- no sufre ni tienen miedo al ridículo, dijo que la Unidad iba a reformular la Ley del Trabajo, que iban a eliminar la Ley de Precios Justos, que la Ley habilitante iba a ser derogada y que el referendo contra Nicolás Maduro iba, sin entender que esos son logros de la revolución a favor de las clases desposeídas.
El asunto es que las palabras de Ramos Allup atacan directamente a quienes por desilusión, engaño o rabia votó por “el cambio”, salen sus compañeros hacerle una cayapa y él hace lo propio en el programa de Globovisión: Vladimir a la Una, intentando salvar su responsabilidad con una arremetida mediática que denominan, campaña de miedo. Qué miedo van a meter aquellos que son “perdedores, alocados y disminuidos”, digo, porque así es como la oposición ve a quienes votamos por la patria, por el bolivarianismo y por el chavismo.
Este artículo va con especial afecto a quienes se abstuvieron a sufragar por los el proyecto político de comandante Eterno: Hugo Chávez y por su legado al dejarnos la vía de hacer patria, es decir que quienes no votaron a favor del chavismo no vayan después a estar molestos si la derecha -en alianza con la banca nacional y extranjera- aplica nuevamente el crédito balón y sube los intereses inmobiliarios de acuerdo a como se mueva el mercado, ustedes votaron por ello, que las mujeres no disfruten del beneficio de amantar a sus hijos en edad de lactancia, luego de derogada la Lottt, bueno ustedes votaron por ellos y cuando volvamos a la Venezuela de 1989 y se produzca un nuevo Caracazo, ustedes votaron por ellos y si para la Mesa de la Ultra Derecha es esto lo que ellos denominan una campaña de miedo, pues claro que tenemos miedo a perder nuestras casas, la posibilidad que nuestros hijos estudien en una universidad gratuita y de calidad, tenemos miedo por la desaparición forzosa de todos los programas del chavismo, como La Gran Misión Vivienda Venezuela, Mercal, UBV, tememos que ahora esa gota de petróleo transformada quede en manos de uno pocos como en tiempos de la cuarta república. Asumo que los que no temen fueron los que votaron por “el cambio”.
Conciencia mi gente, conciencia patria, conciencia ciudadana y conciencia de clase es lo que Venezuela requiere y espera de sus ciudadanos que la vean como su mamá, como su familia, como su sangre; que hubo errores en el chavismo, que hubo excesos y que hubo acomodo para una clase política, no se niega, es más, para los despechados que votaron por “el cambio” y andan asustados, le sugiero la lectura de los maestros Miguel Ángel Pérez Pirela, Luis Britto García, Earle Herrera, Eleazar Díaz Rangel, en fin, para que entiendan que la revolución en 17 años, asediada por poderes económicos nacional y extranjeros, vilipendiada por medios de difusión (comunicación) las 24 horas del día los 365 días de año e infiltrada por chavistas blancos-blanquitos, verdes, amarillos, anaranjados, uff, logró liberar al país del analfabetismo, pudo incrementar la matricula escolar en sus tres modalidades: primaria, secundaria y universitaria; más de 20 millones de venezolanos hicieron turismo exterior gracias a los dólares de Gobierno y antes cuando en la cuarta muchos comían perrarina, ahora hacen las tres papas gracias a Pdval, Mercal o abastos Bicentenario.
Bueno Feliz Navidad y que el 2016 nos agarre confesados. Dios me los cuide y nos volvemos a leer el próximo jueves 24.
