Como era de esperarse, el representante en el CNE de posiciones y argumentos de la oposición, el Rector Luis Emilio Rondón, empleado de muchos años en el Poder Electoral y el más nuevo de los rectores principales designados, hijo de un dirigente medio de AD, se disgustó por los anuncios perfectamente legales aprobados por mayoría, que hizo la Presidenta Dra. Tibisay Lucena el 9 de Agosto. Con Rondón se repiten las actuaciones de Vicente Díaz, hoy retirado del CNE por tiempo cumplido, quien se reunía con representantes de agrupaciones adversarias al proceso bolivariano, socialista, chavista y obrero, para recibir líneas de trabajo político, contra todo lo que decidiera el resto de integrantes rectores o rectoras del CNE.
El "pataleo" es conocido porque a pesar de argumentar diciendo: "es probable", "si es posible si se hace tal o cual cosa", en definitiva no hay revocatorio presidencial el 2016. Tanto Rondón ahora, como antes Vicente Díaz, no mencionan ni lo van a hacer, las torpezas de dirigentes opositores, quienes no cumplen plazos constitucionales, se cubren con tremendas alharacas nacionales e internacionales de prensa, radio y televisión, pues creen que dominando opiniones y creando matrices mediáticas, arrodillan al CNE, o cualquier funcionario de voluntad legal, en aras de los caprichos de la oposición violenta, insultadora, clasista, racista y muy altanera.
El pueblo de todas las clases sociales los conoce, y si el 6-D 2015 quiso darle una lección al gobierno madurista, por la tardanza oficial en emprender de forma más efectiva la lucha contra la guerra económica, la huida de votos chavistas se tradujo en casi dos millones de sufragios menos, aunque no fueron a parar íntegramente a la oposición, la cual ganó la Asamblea Nacional con su gente de siempre, excitando el descontento, y con los llamados "votos prestados". Venezuela es un país amante de la paz, alerta e inteligente.