La expresión: “Con tabaco en la vejiga” en los llanos venezolanos se entiende: Un hombre fuerte, valiente, arrojado, e impetuoso
Al regresar Domingo Alberto de su pueblo, Tovar, estado Mérida, Venezuela, a Caracas, le cuenta a su buen amigo doctor Juan Pablo Pérez Alfonso lo que estaba ocurriendo en Bailadores, un pueblo merideño que está enfrentado al gobierno y a las trasnacionales capitalistas interesados en la explotación de una mina. Pérez Alfonso se entusiasma y se ofrece venir a Bailadores para incorporase a la lucha, y saca tiempo de sus muchos compromisos por el mundo para llegarse a Bailadores. Pérez Alfonzo se maravilló tanto con el paisaje y la participación popular, que dijo. –“No sabía que Venezuela tenía este Valle tan hermoso, de saberlo, la experiencia de la comuna de Tacal la hubiera realizado aquí, donde me gustaría vivir y pasar los últimos días de mi existencia”. La lucha contra la mina duró 25 años y estos dos eminentes venezolanos fueron, junto al pueblo, los baluartes que derrotó la pretensión del gobierno y las transnacionales mineras.
Por otro lado, hay que decir que la obra escrita por Domingo Alberto Rangel está dispersa por Bolivia, Colombia, Costa Rica y en numerosos periódicos y revistas de Venezuela y del mundo; por cuanto Domingo Alberto escribía en inglés y en francés. Domingo Alberto y el venezolano Pedro Duno, fueron los organizadores en 1983 del Congreso del Libro Verde de Muammar el Gadafi, realizado en Caracas en el Auditorio de Parque Central. En el acto de inauguración a Domingo Alberto le correspondió dar el saludo de bienvenida a los 1500 delegados de universidades, sindicatos, movimientos campesinos y políticos de todas las tendencias provenientes de todo el mundo. Domingo Alberto tenía una frase muy suya y siempre la repetía en sus charlas: “Los revolucionarios debían tener ética franciscana” por lo que no desaprovecho este Congreso Mundial para hacer hincapié en aquellos principios de lucha por lo revolucionario.
Domingo Alberto en aquella oportunidad pronunció un discurso improvisado de bienvenida, primero en castellano, luego en francés, por último en inglés; y en cada uno de ellos fue interrumpido por los entusiastas aplausos de la Asamblea. Hoy se sabe que Libia fue invadida con una intervención militar encabezada por mercenarios extranjeros y fuerzas de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) contra del Gobierno legítimo de Muammar el Gadaffi, esta guerra se inició en febrero de 2011 y hasta hoy diciembre de 2016 ese pueblo todavía no se ha estabilizado políticamente, al comienzo de esta guerra se destroza la ciudad de Trípoli, asesinan al líder libio y OTAN deja su gobierno en manos de los rebeldes. Los hechos que condujeron a la invasión, bombardeo, destrucción de la infraestructura de ciudades y muertos muchos libios, el saldo fue de 160.000 víctimas entre muertos y heridos, todo por el cuento de los EEUU de imponer un régimen de democracia directa y darles a sus pobladores más libertad y recobrara sus Derechos Humanos. Libia bajo el gobierno de Gadaffi, pasó de ser el país más pobre y atrasado de África, a ser el de mayor riqueza y seguridad social; durante cuarenta años de lucha antiimperialismo.
Domingo Alberto tuvo una vida de 89 años, y como tituló su autobiografía “Alzado contra todos” así la vivió. En las conversaciones, cuando quería referirse a personas conservadoras, aludía a "las beatas de Tovar” Procedente de una familia acomodada, Domingo Alberto pudo dedicarse a cultivar su intelecto, y es por ello ganado por los intelectuales de Acción Democrática, algún tiempo después de la fundación de e4ste partido, cuando estudiaba la carrera de derecho en la Universidad de Los Andes, (ULA). Pero después que Rómulo Betancourt vende los principios adecos, lo fustigó de tal manera que lo tildó de “EL GRAN TRAIDOR” porque defraudó al pueblo venezolano y lo vendió por un plato de lentejas de origen capitalista. Es el valenciano venezolano, Manuel Vadell, su entrañable amigo y el editor de casi todos sus libros. La verticalidad ideológica crítica de Domingo Alberto, nunca dio tregua; siempre estuvo de opositor a cualquier clase de gobierno. ALZADO CONTRA TODOS.
