Debemos construir una nueva sociedad civil que se interrelacione con los vecinos y las cooperativas, en una economía plena. Dejar atrás, la gestión autoritaria de los militares la actitud neoliberal de algunos personajes. En este sentido, el movimiento feminista nos da un buen ejemplo de trabajo y, debemos ir a una revisión de las instituciones para lograr un cambio en ellas e incorporarlas a las redes del municipio, para ejecutar una buena labor social. El proyecto de país que queremos, debe tener un sentido común, es el momento que cada venezolano piense en un cambio de participación urbana.

La razón es simple, las fábricas se convierten en chatarras oxidadas y se encuentran repartidas como tumbas, en las zonas industriales. Los negocios ilícitos y los bachaqueros, ya constituyen un elemento activo de servicios, como de costo social.

Hay que evitar los extremismos, solo basta caminar por los pueblos para descubrir nuestra realidad, somos un país maravilloso, pero, totalmente desecho.

Los ciudadanos de élite, privilegiados, deben ser llamados al trabajo comunitario para encender el motor del desarrollo social. La gente, quiere mayor orientación y, que le digan las cosas. Los activistas y analistas periodísticos, deseen romper caos y, estremecer a los dirigentes del Socialismo, para que, empiecen a trabajar.

Hay Estados rojos y azules en Venezuela. Es una gran grieta que debe ser quebrantada para forjar un gran país, lo vital, es entender los intereses del pueblo y adaptarse a un criterio progresista, donde todos, hagamos las cosas bien.

Hay que abrir debates, en toda La República Bolivariana para llegar a un proyecto primario colectivo.

Los acuerdos, deben pasar por un Consejo de Ciudadanos por parroquias e incorporar los elementos necesarios para elaborar herramientas hacia el cambio social. Es la gran coalición para emprender hacia el desarrollo de un gran país.

En Venezuela, no hay que elegir entre un partido democrático y otro impugnador, debemos manifestar una sola propuesta y diseñar una metodología para beneficiar a los grupos participantes en el Consejo de Ciudadanos, luego a los demás sectores que hacen vida activa en la parroquia. Hay un compromiso para la población del Continente Sureño e hispano, que, es fortalecer un frente común para alcanzar mayores beneficios a la industria y a los seres humanos. Es el impulso al desarrollo de nuevos contenidos para la población, que es luchar por su propio destino, de allí que las reformas sociales y la Constituyente, son focos de significación para el reordenamiento del Estado.

Ahora, la situación no es sencilla. Hay que eliminarlos riesgos y analizando los nuevos impulsos que los especialistas indican, para mejorar al Estado Socialista y Democrático.

Nos encontramos, frente a un gran movimiento nacional, cuyo principio es cambiar a Venezuela, bajo la proyección de una reforma jurídica y política. Romper con el dominio clerical y salvar nuestro proyecto político, es hacer pensar a la gente y distanciarlos de la ignorancia. La idea, con este cambio, es hacer mejor uso de la tecnología.

Hay odio en los venezolanos, nos encontramos en un punto de no retorno, están como romanizados, en un territorio ocupado por el chavismo.

Por lo tanto, aquí, no hay guerra económica, es una crisis vierta, que, exige de nuestra participación en asuntos de Estado.

Hay que evitar la dialéctica en zig zag. Todo, debe ser directamente y, con su propio criterio para levantar en equipos importantes materiales del sistema político- español, como venezolanos.

La Iglesia y el gobierno, se encuentran manejando sus propios lineamientos políticos y el hombre, debe reencontrarse a sí mismo.

El campo ideológico es fuerte, los países deben hacer reformas y, así avanzar, más allá de nuestro perfil. En Venezuela, la mayoría es demócrata, en ese lineamiento, nos encontramos con la Jefatura del Estado, pero, el militarismo viene abarcando áreas destinadas al Poder Civil, con tal, que el presidente Nicolás Maduro se sostenga en el poder, lo tienen allí, es duro para algunos venezolanos.

El sistema socialista bolivariano de Venezuela, es solo una caricatura de lo yo represento para el pueblo. Es necesario avanzar y, no dejarse domesticar, ser hombres críticos hacia el mañana.

El presidente, Hugo Chávez Frías, nos llamó a una formación política inédita Se constituyó una democracia interna, apasionante, con sus respectivas contrapartidas. Ahora, nos vemos reflejado en una campaña contra compañeros y camaradas. Se busca, simplificar y sacarnos de la estructura de gobierno, a los mejores hombres. Especializados en su campo laboral.

Existe, un debate ideológico intenso, sobre esto. En España, La Universidad Complutense formó muchos líderes políticos, que se reagruparon para hacer un frente común y asesoraron al gobierno de Chávez Frías, conocí a algunos docentes de esa universidad Complutense. Los resultados se encuentran a la vista, todo debe hacerse con mucha claridad, sin haber pecado de ingenuidad.

Todos los portavoces del mundo entero, miran hacia Venezuela, pero, los pronunciamientos públicos se hacen con cautela y, los encuentros verbales o presenciales se realizan, validando las razones ideológicas. Europa, tiene una estrategia de compromiso con EEUU y, los contactos diplomáticos vienen haciéndose con cautela, para que la OTAN, en principio, asuma el verdadero liderazgo y active, toda la flota, porque, lo que se busca es tener un comercio equilibrado y beneficioso, entre los continentes y, acabar con la piratería marítima.

El debate político, debe darse entre la gente y, todo forma parte de nuestros problemas de madurez. Lo importante es sumar voluntades y satisfacer con el trabajo, lo hecho,

Santander, en Colombia, se ha convertido en la cuarta economía del país en término de exportaciones, en el ámbito nacional bogotano. Muy cerca de nuestras fronteras y, allí se ofrecen muchos productos venezolanos y de fácil adquisición. La Alianza para el Pacífico integrada por Colombia, Chile, México y Perú, se fortalece con las oportunidades comerciales que da Venezuela, pero, nuestro país se abate en u gran conflicto comercial.