Los españoles para reflejar algo que parece ser muy vistoso y escandaloso, pero que después de tanta algarabía, termina en que no era lo que se esperaba, apelan a la frase "TANTO RUIDO Y POCAS NUECES"
En la alocución de ayer del presidente Nicolás Maduro, en la Asamblea Constituyente, mostro serias preocupaciones por las cosas que están pasando en el país, entre ellas la falta de voluntad política de su equipo de economía, para atacar con eficiencia la problemática ocasionada por la guerra económica, a la que se encuentra sometida la población venezolana, la cual es banalizada por sectores de la derecha y también de nuestras propias filas por el solo interés político que los mueve.
Por supuesto ante tal reconocimiento por parte del Presidente, la reacción de los constituyentes, no se hizo esperar, tanto es así, que el hemiciclo se lleno de algarabía, de esa manera los presentes, demostraron que si saben dónde está el meollo del asunto.
No hay duda que las políticas económicas aplicadas por su equipo, han sido erráticas e incoherentes, sobre todo en materia monetaria, donde no han dado pie en bolas frente al dólar TODAY y en lo atinente a la implementación de políticas para desarrollar la producción nacional, su calificación es muy pobre. En consecuencia se impone un nuevo enfoque de gestión y porque no la participación de otros actores extraídos del movimiento popular revolucionario, donde también hay buenos hijos e hijas de Chávez.
Cuanto quisiéramos los venezolanos, que el Presidente Maduro, encontrara la fórmula para seleccionar un equipo de gobierno, que responda a ese sentimiento nacional, que exige autoridad, eficiencia y eficacia revolucionaria, para atacar los males sociales y económicos que aquejan a la población.
Bien dice el refrán "con solo voluntad no se empreña" .Durante su discurso el Presidente reflejaba su angustia por la problemática que vive el pueblo con el tema de la especulación, siente que sus Ministros fueron rebasados en su capacidad de acción para enfrentar la dura realidad que padece la mayoría del pueblo.
No percibe a sus Ministros consustanciados con la gravedad del problema, al punto que todo el mundo sabe lo que está pasando y quienes andan detrás de esta guerra para derrocar al Presidente, menos dichos funcionarios.
La mejor prueba de lo que estamos afirmando para respaldar la preocupación del Presidente, es que ante tantas evidencias que existen sobre las practicas que están utilizando los gerentes de la banca pública y privada para generar un corralito disimulado , reteniendo y restringiendo la entrega de efectivo a los cuentacorrentistas , para obligarlos a caer en las manos de los Bachaqueros financieros , con quienes seguramente, tienen acuerdos previos, para que nunca les falte suficientes billetes para hacer avances de dinero al costo entre el 20 y 30 por ciento, al respecto, no se ve una sola iniciativa, pronunciamiento o una acción contundente de sus despachos, para disminuir el malestar que esta situación está produciendo en la gente.
Lo mismo ocurre con la especulación inducida, con la cual los empresarios y comerciantes, desafían al gobierno abiertamente, a conciencia que dentro del equipo de gobierno del presidente, no existe voluntad ni disposición para enfrentar con manos de hierro a esta inusual conducta comercial que salto todos los parámetros conocidos en materia de precios.
Tal es el convencimiento que los comerciantes tienen de esta situación, que hoy después de los anuncios hechos por el Presidente, en relación con el aumento de salarios y las medidas que se aplicaran para sancionar a quienes incurran en delitos de usura ,acaparamiento, Bachaqueo, amanecieron anti parabólicamente remarcando los precios de los alimentos y productos en general.
Ellos parten de la idea, que esta vez pasara como otras veces, que el gobierno hace ruido, amenaza, pero todo sigue igual y cuando no peor.
Allí está el tema del desvió en la distribución de los alimentos y productos de consumo masivo, esos camiones que salen con una ruta determinada y con su guía de origen y destino, no se desvían por obra del espíritu santo, esos toman las rutas que les marcan los mafiosos, entre los cuales hay empresarios y comerciantes corruptos en connivencia con funcionarios de la Guardia Nacional, y de otras instituciones policiales.
Eso es verdad, pero se hace muy poca cosa para meter en cintura a tanto bandidaje.
El gobierno y la Asamblea Constituyente están obligados a garantizar que las expectativas creadas por el Presidente, se conviertan en hechos tangibles, en donde la participación del pueblo organizado en sus diversas expresiones, sea determinante, pues a nadie les duele más lo que está ocurriendo que al pueblo de a pie, que al contrario de los Ministros del Presidente, si sabe donde le aprieta el zapato.
No es fácil la situación que tiene el Presidente por delante, en principio tiene que lidiar con la ineficacia y falta de iniciativa de sus Ministros, el complejo escenario internacional, donde se mueve la diplomacia venezolana, la real y efectiva amenaza de invasión que existe contra Venezuela, el cerco económico impuesto por el gobierno de TRUMP, la guerra mediática internacional contra nuestro país, la cotización de la actividad económica por parte de los sectores vinculados a la derecha golpista, ataque brutal a nuestra moneda, el alza de los precios a niveles inalcanzables.
Viéndolo bien, la masa no esta paz/ bollo, creo que para poner orden a tanta desidia y quintas columnas dentro del gobierno, hay que actuar con mano de hierro contra todo aquel que dentro o fuera del gobierno, contribuya a sembrar el caos y a crear las condiciones para que nosotros, no salgamos de este Berenjenal en el que estamos metidos.
El daño que se le ha hecho al presupuesto familiar por mucho tiempo, ha perjudicado la salud y la alimentación de buena parte de la población, por lo tanto el daño ocasionado no puede quedar a un lado a la hora que el gobierno decida o escoja la fórmula para implementar la nueva política de precios.
Lamento que el Presidente no haya aprovechado su alocución en la Asamblea Constituyente, para decretar el carácter de artículos de primera necesidad a los 50 rubros mencionados y su rebaja preventiva en un 80 % de su precio actual, en el entendido como lo dijo, que el incremento de los mismos llega al 1000 %.
De haberlo hecho como todo el país lo esperaba, hubiese comenzado la real protección del salario de los trabajadores y por ende del incremento anunciado. Aumento salarial que mientras no entren en vigencia los nuevos precios, será devorado por los insaciables comerciantes, como en efecto comenzaron hoy con su nueva escalada de precios altos.
Por los vientos que soplan, LOS NUEVOS PRECIOS SERAN FIJADOS mediante acuerdo entre los productores, industriales, empresarios, comerciantes y representantes del gobierno. En otras palabras CONSENSUADOS.
Modalidad ya experimentada sin mucho éxito en el pasado reciente, toda vez que la misma está afectada por la cultura capitalista que mueve todos los resortes de la economía en Venezuela, particularmente en esta fase de economía de guerra en que nos encontramos, que requiere de un verdadero tratamiento revolucionario.