Estos tres personajes y muchos otros que con sus estudios nos han permitido entender, analizar y desplegar un accionar político cultural sin precedente. Ellos cambiaron la imagen del mundo capitalismo, salvaje, criminal y explotador que han impuestos las elites sobra las masas y que habían logrado herir por muchos años el orgullo del ser humano. Por ejemplo, Carlos Marx, nos dijo que nuestra cultura y toda nuestra conciencia estaba determinada por las condiciones económicas (capitalismo). En otras palabras: quién tiene dinero se creía amo del mundo o dueño de los demás, a los otros se les hacia sentir y vale menor. El acceder al trabajo y a la producción de bienes y servicio se vendía como un favor o una dadiva que otorgaba el rico a quienes carecía de tales riquezas y oportunidad para desempeñarse en una labor y vivir dignamente de ella. Darwin, por su lado nos hizo ver que, a diferencia de lo que creíamos, el hombre no ha sido creado a imagen o semejanza de Dios sino que somos primos hermanos del chimpancé, y que el proceso evolutivo no precisa de nadie que lo planifique ni tiene finalidad alguna, sin ser tampoco por ello un proceso desordenado. Einstein, descubrió para la ciencia física, así como para la comprensión de la realidad humana el arrebatarnos lo que parecía ser el unico fundamento fiable: la objetividad del mundo externo físicamente mensurable. Revoluciono nuestra comprension del tiempo. La clave – llevándolo a las ciencias sociales- para comprender esta revolución está en la posición del observador. Puesto que el observador –el pueblo- habia sido excluido del mundo para impedir que la objetividad de las cosas se viese alteradas por factores y puntos de vista subjetivos por quienes pretendían manejar los asuntos del gobierno a su exclusivo interés. Aquí viene Chávez, quien es el observador y reintroduce al pueblo en la condicion de observador de la política como un conjunto de cosas que va unidas y entrelazadas entre sí. Hasta nos puso a observar como observa el observador.
Chávez, le dijo al pueblo: es hora de despertar; y no tan solo que despertase sino de cómo hacerlo, cuándo hacerlo y para qué hacerlo. La nostalgia de la Venezuela de los techos rojo el fuego de la corrupción se la consumió, porque borrar todo vestigio del pasado emancipador de nuestros libertadores implicaba eso. Pero ¿Cuál es el legado dejado por la cuarta republica? El Seguro Social, el Banco Industrial de Venezuela, la CVG, el puente sobre el Lago de Maracaibo, la UCV, la represa de Guri, el Metro de Caracas, si estas obras fuera concebida e iniciadas por Medina y Pérez Jiménez. Lo que dejo la cuarta fueron: sus carreteras inconclusas, la masificación de la educación sin calidad, el borrón y cuenta nueva de los millones de dólares para la agricultura despilfarrados en “la Miami ta barata dame dos”, el entierro de la Reforma Agraria, la inducción del abandono del campo y la migración de los pueblos a la ciudad, cuyas consecuencias de la explosión demografía descontrolada en los cerros multiplico aun mas las desigualdad social, generando un caos en todos los sentidos. Servicios de salud, trabajo, deserción escolar, la prostitución infantil, la promoción del juego y los vicios en condiciones miserable para la vida, etc.
Yo los invito a que se pongan a evaluar lo que dice y hace el candidato de la oposición, sí, el mister Danger, porque el tal Rosales es un mal apéndice de este. Fíjense, como está el mundo, cuántos niños mueren de hambre a cada segundo, quienes no tiene el acceso a los servicios médicos básicos e indispensables, quienes son explotados y esclavizado con trabajos en condiciones deplorables. Si eses es el mundo que la oposición –incluyendo a mi primo Joe-, anhelan con tanto deseos de que vuelva a implantarse. Bueno, creo que de verdad le hace falta mucho soles sobre la realidad. Las montañas de programas sociales, las grandes obras que a diario inaugura el gobierno revolucionario de Hugo Chávez, los avances tecnológicos y científicos alcanzados, los proyectos y acciones que están en estudios para los próximos seis años, no tienen sino la única meta de elevar las condiciones sociales y mentales del pueblo venezolano. Esas montañas son como el cerro El Ávila, quién no la quiere mirar -o aceptar- no se hace el ciego, es porque cerebralmente está ciego. No se podrán tapar esas montañas con un solo dedo, ni que nos pongan por delante al mismísimo Bush. Que de paso, hay que hacer una morfometría con urgencia donde se incluya, por supuesto, al mismo Rosales y su combo. Todos tienen las puestas abiertas para ser llevados a la Misión Milagros por la puerta de emergencia. De paso es gratis.
Los lindos ojos que te ven... un pueblo entero ¿Quieren más?
miguel_agostini@msn.com