Hace poco tiempo reapareció en el país la lotería de animalitos, es un símbolo del poschavismo, una señal del rumbo social, la marca de la acción del periodo madurista.
Un sistema social se mide, en lo fundamental, por la relación humana que en él impera, o dicho de otra manera, por la condición humana que él determina. En el esclavismo, por ejemplo, la condición humana era la del esclavo y el dueño. La relación humana del capitalismo es la del egoísmo, el individualismo, el explotado, el expropiador, el marginal.
Una Revolución cambia las relaciones económicas, pero lo esencial es el cambio de la condición humana: una Revolución es, en lo fundamental, un cambio de cultura, eso la define.
Cuando se investigan los intentos socialistas siempre se encuentra que su fracaso fue una incapacidad para mantener, estabilizar, la relación humana fraterna, amorosa, el sentido de pertenencia a la sociedad que consiguió su mayor nivel en las etapas tempranas.
Y cuando se investigan las grandes hazañas de esas sociedades siempre se encuentra que se realizaron en periodos de elevada fraternidad, alto sentido de pertenencia a la sociedad. Ese es el reto de toda Revolución: instalar en el fondo del alma social la fraternidad, el sentido de pertenencia a la sociedad.
Con el Comandante Chávez se inició, para asombro del mundo, el camino al Socialismo, se intentó tomar al cielo por asalto. Fueron días de emoción, sentimos la posibilidad de un nuevo mundo donde todos vivamos como hermanos; en aquellos días del sabotaje petrolero la masa respondió como un todo, la sociedad dejó atrás su fragmentación y reaccionó unida tras un objetivo altruista, corrió riesgos, privaciones con la pasión del que se sabe perteneciente a una causa común. Las Misiones en su origen fueron demostración de la nueva sociedad, ahora con el carnet se transformaron en un "ciberegoísmo". Barrio Adentro, con los Médicos Cubanos, trajo una prueba de que el hombre puede dejar de ser lobo del hombre, allí en esos modulos, manantiales de amor, el amor, el sentirse querido curaba más que los medicamentos.
Desaparecido Chávez se perdió el rumbo socialista. Las modificaciones en lo material, la alianza con los capitalistas, con pasmosa rapidez, deterioró la construcción de la conciencia de pertenencia social, se decretó el sálvese el que pueda, el egoísmo, base espiritual del capitalismo, regresó con fuerza. Es sorprendente ver la mentalidad capitalista que muestran los bachaqueros, "pequeños empresarios, émulos de mendoza, o lo que es peor, los muchos que cambian votos por dádivas, que literalmente entregan la Patria por un plato de lentejas.
Si a esta situación de base sumamos la política mercenaria del gobierno, solicitar apoyos a cambio de bonos, la extorsión con el carnet, con los claps, el populismo rentista en su máxima expresión; si le sumamos la desvergüenza con la que miente, el manejo tramposo de la cosa pública, el uso delincuencial de las elecciones; si todo esto lo sumamos, nos encontraremos con la causa de un país destartalado en lo ético, donde un litro de aceite puede costar millones, un medicamento se venda en dólares, la comida sea inalcanzable. Pero más lamentable, más importante donde todos seamos enemigos de todos, nos veamos con recelo. Volvimos a la guerra de todos contra todos, todos somos lobos y todos somos presa.
No hay dudas, el fracaso de este gobierno está a la vista, nos convirtió en poco tiempo en una sociedad fallida, en una nosociedad, en la suma egoísta de millones de egos. Esto no sólo no es Socialismo, es uno de sus antagonistas más perversos, es la Barbarie de que tanto nos habló el Comandante. Y no se percibe la solución, por ahora la masa juega animalitos, allí está, lamentablemente, la esperanza.
