El haber sido criado en un hogar donde se discutía en la mesa como forma de convivencia, donde se hablaba de lo terrible de la invasión a Checoslovaquia por parte de los ejércitos del Pacto de Varsovia y se comentaba con pasión el libro de Lillian Hellman si ese texto que desnudaba la persecución del gobierno de USA a su intelectualidad, creo que deberían leerlo algunos de los amigos de esos que vienen paridos por Las Cinco Tesis Filosóficas de Mao Tse Tung o Por Cuestiones de Leninismo de Stalin. Ambos me parecían aburridos y nada tropicalizados, poco adaptables a nuestra realidad, lo cierto es que más de un amigo los tenían como libro de cabecera o como fetiche revolucionario. Otros nos quedamos con libros que nos daban ciertas herramientas de lo que no debería ocurrir en una democracia legitima, dos libros me marcaron Archipiélago Gulag y Tiempo de Canallas, les dejo por aquí uno de los dos y el otro sé que se encargaran de buscarlo, los dos escritos como denuncia a la arbitrariedad, el sadismo de ambos Estados contra la disidencia: http://pirateaydifunde1.wixsite.com/librosenpdf/lillian-hellman--tiempo-de-canallas-pdf
Bien con esto de haber sido criado en un hogar así me eduque en la lucha por un Estado Laico y claro en un hogar ateo ambas cosas me parecieron fabulosas, y creo que eso me permitió ver a Chávez como una circunstancia más en la nación, me gusto ver siempre a Chávez con ese magnetismo y al mismo tiempo me despertaba cierto temor, algunas suspicacia verlo rodeado de militares impermeables a la lógica civil, donde un sargento por obra y gracia de un mando sabia más de música que Antonio Lauro y más de ciencias físicas y biológicas que Humberto Fernández-Morán, era difícil para un civil suscribir a ojos cerrados la creencia que un militar podría asumir la condijo de un civil a la hora de confrontar ideas. Claro en la izquierda latinoamericana de la cual formo parte aún se mantiene la idea de que un fusil portado por un revolucionario, tiene más poder y trascendencia que la palabra, la letra, la hoja impresa. Por cada Freire en la pedagogía existen 5 Joaquín Villalobos, si ese Joaquín Villalobos con el que sentían identificados los chicos del PRV o de RupTUra en mis años de estudiante, por cada Frantz Fanon había por ahí 8 Jorge Meléndez (Jonás) de esos con los que se regodeaban más de un militante o militar de esas izquierda extraña ya que llamaba al orden, al miedo, a la acusación, al señalamiento, a la obediencia (incluyendo aquellos que se autocalificaban como DESOBECIENCIA) y ojo no hablo de Carlos Lanz y sus grupo de obedientes cotidianos. Bien lo innegable es que la izquierda nacional es hija de un mundo pétreo y piramidal, por cierto veamos las desgracias que cometían estos militaristas: http://www.rdarchivo.net/reportajes/villalobos-y-melendez-mataron-a-roque-dalton-dicen-testigos . El comportamiento fue igual que el de los fascistas españoles cuando mataron a García Lorca.
La vida nos permitió ver el desengaño y la fragilidad de la embarcación bautizada por Chávez, la misma no soportaría su muerte, pero en vida el militar había podido conectar con la población civil, agotada de gobiernos que eran culpables del mal rumbo que llevaba la república. Corrupción, desempleo, devaluación, colas. Todo esto multiplicado a la enésima potencia en el gobierno de Nicolás Maduro, con la diferencia que antes acusábamos al gobierno por su desastrosas gestiones y hoy el culpable hasta de la calvicie de Cabello es el imperialismo Yankee y sus lacayos criollos. A diferencia de Chávez que le gustaban los uniformes, las voces de mando, la obediencia a la orden, pero que había aprendido que para convencer al civil debía que tener un aura de discurso amplio, amable, solidario, de entendimiento y tenía herramientas de lenguaje y de gestos que permitían esa comunión con la nación. Estas herramientas de las que carece Maduro y que solo en base a la fuerza y la complicidad de los hombres y mujeres de verde olivo se mantiene en el poder, el poder más allá de lo imaginable y hoy en la Venezuela del siglo XXI vemos como algunos poetas emulando a los que cantaban a Stalin a Hitler o a Franco apoyan o hacen silencio frente a los desaparecidos, a los quemados vivos en espacios policiales, a la devaluación, a la corrupción que hasta ayer criticaban y enfrentaron.
Son detalles de una nación golpeada, aislada por plantas televisoras del gobierno que no informan y si adoctrinan, de una nación que envía a estudiantes a juicios militares, que acosa a periodistas de más de 80 años, que detiene a viejos resistentes contra la dictadura, que encarcela a dirigentes sindicales, que no tiene cuentas del gasto público, que no entrega cifras de desenvolvimiento económico, que cierra medios de comunicación, que expulsa a miles de jóvenes, que desaparece a dirigentes de izquierda( Alcedo Mora y otros) que encarcela y vapulea a verdaderos dirigentes indígenas (Sabino Romero) . Maduro es la negación de la república, tiene todo el poder en sus manos, desconoce a cualquiera que no se sume a sus filas, coloca "protectores" en los lugares donde no gana su fórmula militar, policial, militante.
Notas a pie de página: El MAS está llamando a participar en las elecciones, difícil tarea con un poder electoral en manos del madurismo, con una ANC que se siente y se sabe todopoderosa, con cuerpos policiales que persiguen en forma inmisericorde a todo aquel que se atreva a levantar la voz, sin embargo digno de respeto en todo caso de la misma manera los compañeros de Marea Socialista. No estaría mal ver con atención a la necesidad de cubrir mesas electorales y claras desplegar campañas de volanteo cerca de los centros de votación. Mientras tanto a derrotar al madurismo y su paquete neoliberal y represivo.
En México acabo de ver billetes de 2, 5 y 20 bolivares, billetes sin valor alguno o muy poco valor que reparten algunos compatriotas con la leyenda "¿TU LE CREES A MADURO? ¡YO TAMPOCO!
Recordemos que en la Venezuela madurista leer a Sartre puede ser visto como un acto sospechoso: https://comunicacionymedios.files.wordpress.com/2014/11/sartre_fanon.pdf