Biardeau acaba de entregarnos dos sendos artículos, cuya lectura recomiendo. El último de estos dos artículos[i] que al momento de escribir este, aún estaba colgado en Aporrea, no debe dejar de leerse.
Es bueno leerlo en primer lugar, porque Biardeau asoma un hecho que poco se discute. El día a día nos consume en lo que pudiéramos calificar como la superficialidad de la crisis, que no deja de ser una situación importante. Biardeau apunta a la crisis del Estado y de la Nación, no dejando fuera de esta crisis que corroe a la Nación y al Estado, la crisis prematura de la democracia protagónica. No llegó a morir la democracia representativa y la protagónica fue prematuramente manipulada.
Desearía detenerme en muchos de los aspectos tratados por Biardeau y en las referencias que utiliza para ahondar en estos aspectos, pero opto por tomar ligeramente un punto (Crisis de la Nación) que asumo como particularmente importante en este trabajo, porque le concede valor a otros, que igualmente no deja de ser estratégico.
Pero antes de entrar a considerar este aspecto, creo necesario expresar, que contrariamente a lo que sostiene Biardeau sobre como los pos-chavistas "olvidan a Chávez", soy de la idea, que más que un olvido, lo que está en juego es una destrucción cínica e ingrata de Chávez, Es tan cínica e ingrata esta destrucción, que hacen uso de él para canalizarla. La Dirección política del proceso diariamente le echa manó a la figura de Chávez y algunos de sus discursos, no para que lo olvidemos, sino para que vayamos quemando su ideas fundamentales. Presentarnos todos los días a un Chávez y con algunos de sus discursos que revisan muy bien, tiene la intención de desactivar las ideas esenciales de Chávez. Este Chávez que día a día nos los imponen, es un Chávez previamente procesado-manufacturado, que cuando mucho, tiene la intención de sacar una lágrima.
En algunos espacios de este artículo Biardeau hace alusión a la crisis Estado y de la Nación. Destaco aquí y en nuestro particular caso, la crisis de la Nación porque parece ser en nosotros un hecho como recurrente. Como que históricamente se ha ido madurando la idea en ciertos sectores de abandonar o desertar de la Nación, que tanto preocupó a nuestros más notables ensayistas (Mijares, Picón Salas, Briceño Iragorry). La destrucción de Bolívar se inscribe en esa idea. La insistencia de Chávez en ese Bolívar intenta volvernos a esa idea, que tanto animó a Chávez con su propósito de avanzar en el proceso de independencia y darle al pueblo un lugar destacad en el ejercicio de la política.
Me interesa este punto, porque la idea hobbesiana del hombre lobo del hombre, tiene en este intento de destruir la idea de Nación un condimento muy particular que le da una especial sazón a este proceso que avanza especialmente desde la derecha, cuyo norte es destruirnos como Nación y como Estado.
Mientras desde el frente de la derecha se avanza en esa idea de destruirnos como Nación, desde el frente de la "revolución" avanza de la idea de destruir uno de los aspectos más emblemáticos del legado de Chávez que lo fijo muchas veces y a través de diferentes expresiones. Su primer acto como presidente no está muy distante de su casi agónica idea de "Comuna o nada". Chávez comenzó todo esto con la idea de confiar en el pueblo con su proyecto de una constituyente para refundar la Nación y el Estado con una nueva carta de espiritualidad.
Dirán algunos, que esa idea está muy viva en la actual ANC. El origen e historia de esta ANC es un remedo que no alcanza o pasa la de una junta de condominio. El PSUV que se siente dueño de la junta d condominio, seleccionó primero y eligió después, cada miembro de esta ANC y este mismo PSUV ha venido desmantelando la ANC porque cualquiera elección de concejal o alcalde es mucho más importante, que un constituyente. Al PSUV le Importó muy poco la elección de la ANC. Muchos constituyentes migraron a una alcaldía o una gobernación y esto es un dato que mide la valoración que el PSUV (dueño de la junta de condominio) asumen la ANC.
La posibilidad d un pueblo-sujeto se transformó en un pueblo bambalina. El PSUV-Gobierno pudo haber fortalecido esa idea de pueblo-sujeto expuesta por Chávez. Hubo y hay tantas gestiones en alcaldías y gobernaciones desastrosas, que el propio PSUV pudo ser activo en la aplicación de un revocatorio y le tuvo miedo y lo que pudo ser una fortaleza, fue matando esa idea de pueblo sujeto para asumir luego al pueblo como una bambalina. Ese miedo fue un cómplice de grandes actos de corrupción.
Este chavismo hizo del pueblo una bambalina y con una imagen de Chávez vienen destruyendo a Chávez. Esta destrucción o muerte política de Chávez se visualiza en un vació. Cualquier idea de Chávez tenía un profundo sustento programático y político. El alto "chavismo" creo que es un poco analfabeto.
La oposición no tiene mejor suerte. Le hace falta desde hace mucho rato un Pocaterra para argumentar su particular decadencia.