Administraciones similares en América a los gobiernos actuales de empresarios prestados a la política, o políticos cohonestando acciones y con alianzas de sus industrias empresas y comercios, a políticos corruptos, fue característica de la democracia representativa venezolana entre 1959 y 1999, gobiernos presentados por la mediática internacional cual "modelo de democracia representativa".
Con el exterminio a todo adversario que fuese catalogado de comunista para estigmatizarlo, lucían estolidez arrastrada a sus protectores capitalistas, que los mandaban desde Washington, dando ejemplo disimulócrata para el Continente acerca de lo "representativo", pese a que en su proceder actuasen lo contrario a lo que debe representar una democracia mediante Presidentes electos por votación popular.
Igual que en 2019 y un poco antes viene ocurriendo en Chile, Brasil, Argentina, Perú, Bolivia y Colombia, el Poder Legislativo venezolano en ocasiones tampoco tuvo mayoría en el Congreso en Caracas, los Diputados o Parlamentarios electos ocultaban su rechazo popular posterior, ayudando a perseguir e incomodando económicamente a quienes dieran a conocer que en la Presidencia, al pasar un tiempo gobernando perdían el fervor y el respaldo obtenido inicialmente.
2019 año de rebelión colectiva, nos trae la claridad contra el cinismo presidencial de los Macri-Bolsonaro-Vizcarra-Piñera-Lenín Moreno y varios más, o la autojuramentada fundamentalista religiosa Añez. El rechazo aumenta para quien llaman Chuky en Colombia, por su rostro similar al del personaje de terror en la cinematografía, Duque afronta la mayor protesta de su mandato desde que asumió en agosto del 2018.
Colombia, tiene 48 millones y cuarto de habitantes, un crecimiento económico para este año por encima del promedio en la región, pero con elevados índices de desigualdad y desempleo, fórmulas capitalistas que en lo macro disfrazan al país neogranadino y también a Chile, llamándoles ejemplos de democracia representativa capitalista, así los efectos se logren a costa del abandono social a las clases de menores recursos. Si se presentan protestas, las aplastan llamando vándalos seguidores del marxismo cubano-venezolano, a quienes manifiesten descontento, y detienen bestialmente a los que rechacen la brutal represión que vemos.
No cambian los colombianos del bipartidismo alternativo, por lo que el pueblo los reconoce y los rechaza cada vez más. Los disimulócratas del gobierno homicida demócrata representativo pitiyanqui colombiano, esconden por ahora su deseo de imponerle a trabajadores y estudiantes medidas similares al asomado "paquetazo" que incluye rebajas en el salario mínimo para jóvenes, un "tarifazo" de aumentos a la electricidad, y cambios desfavorables en la edad y otros beneficios de los escasos pensionados.