"El único medio de conservar
el hombre su libertad
es estar siempre dispuesto
a morir por ella"
Diógenes el cínico
Al gobierno estadounidense le están devolviendo sus mercenarios, como si los hubieran utilizados en un desfile para escoger al mayor villano, tan cuidaditos, que si los ponen en reserva para usarlos en una nueva incursión de las que pedía a gritos la María Corina, no lo piensan dos veces para montarse nuevamente en una de esas aventuras bien pagas, sin importarles si fracasan o triunfan, porque mercenario cobra por adelantado y tiene asegurado el refugio si le toca salir en huida, como ha venido sucediendo últimamente con los títeres de cuanto gobierno se instala en la Casa Blanca.
Los últimos movimientos en la mesa de negociaciones para liberar a varios presos a través del canje, nos permite hacer una real comparación del motivo, por el cual se encontraban privados de libertad. Cuando se presentó la planificada y criminal escases de alimentos, con largas colas en todas las ciudades, pueblos y caseríos, alguien tenía, que cumplir la noble labor patriótica de buscar las provisiones y la tarea la asumió Alex Saab, quien salió a rastrear en los mercados, pero con la amenaza del gobierno de Donald Trump y sus perros de presa dispuestos a todo y Saab, significaba darle un duro golpe al gobierno de Nicolás Maduro y el proceso bolivariano, pero asumió la prisión con dignidad y heroísmo.
Por el otro lado, las amenazas de invasión, cada momento parecían estar a la vuelta de la esquina, con una pandemia del Covid-19 haciendo estragos y además, como si esto fuera poco, se presentó el Guaidó, con su teatro en cada esquina, haciéndole la vuelta al gobierno gringo; pero antes este panorama no muy halagador estaba presente la valentía y la estrategia del presidente Nicolás Maduro y el pueblo venezolano, capturando a varios de los que intentaron atentar contra el estado venezolano al ser apresados in fraganti. Estas joyitas con su respectivo prontuario, los reclamaba el gobierno estadounidense a través del chantaje sin dejar de aplicar medidas coercitivas y bloqueando cualquier iniciativa del gobierno venezolano en su legítima defensa.
La hora de la verdad, se ha presentado, por varias razones muy difíciles de evadir por el gobierno estadounidense de turno y es la crisis del capitalismo salvaje mundial y han tenido que ceder, porque cada día se les reduce el radio de acción y a pesar, que el dólar sigue siendo fuerte, pero la aparición de otros mercados les hace muy difícil seguir manteniendo esa férrea hegemonía, con la moneda y un ejército, que solamente espera órdenes para actuar. Pero además la situación interna, es una guerra, como bien lo describe una canción interpretada por Henry Fiol: "Nací en Nueva York, en el condado de Manhattan, donde perro come perro y por un peso te matan."
Por eso me preguntó ¿Dónde están los traidores de la patria? La mayoría en los Estados Unidos, como cualquier mercenario o terrorista; otros en España y no sabemos si es que no olvidan lo que llaman la madre patria, pero lo que si es cierto, es que la tiene, como un refugió, dónde se mueven, como pez en el agua y no se postulan a cargos, porque se encuentran turisteando haciendo el papel de ridículos mortales, ya que, en cada declaración u opinión parecen unos pájaros sueltos, pero al observarlos bien, cargan su pita amarada, el cual les impide andar libremente. Mientras tanto Alex Saab, se ha graduado de héroe al estar preso, por una labor encomiable: buscar los alimentos para los venezolanos, cuando el gobierno estadounidense cerraba todas las puertas.