La pasión es indispensable e insustituible en la Revolución. Cuando un Pueblo adquiere la pasión revolucionaria, es decir, cuando la Revolución se transforma en un asunto vital, entonces se pueden superar todas las carencias. Por el contrario, cuando un Pueblo pierde la pasión revolucionaria, cuando el fervor popular es ahogado por otros sentimientos, valores y pasiones, entonces, la Revolución se pierde, se extingue.
La pasión de la gente tiene que ver con la actividad de los dirigentes revolucionarios, o mejor, la actividad de los dirigentes revolucionarios, su responsabilidad, es estimular la pasión revolucionaria en la población. Y de allí depende el éxito de la Revolución.
¿Cómo saber por donde anda la pasión del Pueblo?
Una buena medida de la pasión popular es oír de qué habla la gente, qué lo preocupa, qué lo llena. Y sobre todo qué lo moviliza. Veamos.
Nosotros no vamos a decir lo que hemos oído en la conversación del Pueblo, siempre sería parcial. Nos limitaremos a plantear lo que creemos sería la pasión revolucionaria, de lo que debería hablar el Pueblo revolucionario, de las cosas por las que estuviera dispuesto a dar su esfuerzo diario y hasta su vida si fuese necesario. Por lo tanto, es deber del gobierno revolucionario de sus motores y de todos los revolucionarios estimular esa pasión.
Recomponer la sociedad como una sociedad del amor.
Sustentar esa sociedad del amor en una economía de propiedad social.
Luchar contra el capitalismo como el mayor obstáculo a las dos pasiones primeras.
Luchar por la construcción del Socialismo como única manera de conquistar las dos pasiones primeras.
El internacionalismo: entender que si no ayudamos a la humanidad donde quiera que esté, no podremos construir una sociedad amorosa, por el contrario seremos una sociedad comida por el egoísmo.
El antiimperialismo: la pasión de la lucha antiimperialista como la lucha internacional contra el capitalismo.
Defender la Patria como el territorio grande que Bolívar nos enseñó a amar, con su ejemplo de guerrero mundial, territorio que alcanza cualquier territorio donde el hombre aún sea lobo del hombre. Repetir con Bolívar, Martí y el Che: La Patria es América, Patria es Humanidad, Patria es Revolución, y repetir junto al Comandante Chávez: Patria Socialismo o Muerte.
Defender al Comandante Chávez como el símbolo de las mejores luchas de este Pueblo, y de las posibilidades reales de ir hacia el Socialismo.
Si el Pueblo es capaz de vibrar por estas pasiones la Revolución está garantizada, pero en la medida que estas pasiones son sustituidas por valores egoístas, capitalistas, la Revolución se nos escapará de las manos.
¡Con Chávez todo, sin Chávez nada!
¡Luchemos contra los valores capitalistas egoístas!
¡Que la Revolución sea una pasión!