Pequeñas cosas de la revolución

El general Alberto Müller Rojas en un escrito titulado: “Preocuparnos por las pequeñas cosas” y publicado en internet en enero del año en curso, dice que ve con estupor como las cosas más sencillas y pequeñas que se debían resolver desde la revolución, no sólo no se han hecho, sino que ahora hay una nueva burocracia que en si misma es un proyecto político y de vida de quienes la dominan. Traigo a colación esta opinión, porque creo que eso es una verdad del tamaño de un templo.

Y no darle respuesta a esos “simples” incidentes le ha hecho mucho daño a la revolución que lidera el presidente Hugo Chávez. De hecho, Müller Rojas refiere, en ese mismo artículo, cómo unas irregularidades en un mercalito, en una misión gasíferas y en unas cooperativas, le restaron votos a la revolución en el referéndum de diciembre.

Por eso es inevitable compartir con mis amigos lectores, otro caso similar, pero aquí en Maracaibo, como el de Jessica Mariana Mavárez, quien perdió la identidad presuntamente por un error de la Onidex y, pese a las diligencias, no ha encontrado quien le resuelva el problema, por lo que tendrá que cargar con la frustración de no votar el 23 de noviembre ni de obtener su título de comunicadora social en la universidad.

Sé que contado así hasta parece una tontería que no merece una línea escrita, pero si nos ponemos en el pellejo de esa joven o nos hacemos la idea de que con ese problema de identidad cruzamos una alcabala o nos tropezamos con una redada policial, les aseguro que pensarán lo contrario.

A Jessica Mariana le otorgaron la cédula 18.572.524, pero años después, este mismo número le fue asignado a una joven de nacionalidad colombiana llamada Dioseline Uribe Santana y allí comenzó su vía crucis.

Ha sido víctima de un peloteo entre la Onidex de Maracaibo y Caracas, donde la han atendido altos funcionarios, sin embargo, no le dan respuesta. Por cierto, es digno de aprovechar para decir que a Jessica la pueden contactar por los teléfonos: 0414-6457398, 0424-6411564 y a los correos lorenamavarez@gmail.com, jessicamavarez@hotmail.com, a ver si alguien de identificación se apiada de ella.

Pero bueno, siguiendo con la opinión del general, sólo añadiría que esas cosas son pequeñas dentro de la inmensidad que encierra el proceso revolucionario, pero una familia o una persona con uno de esos percances, siente que el mundo se le viene encima. Lo preocupante es que pienso que de estos casos existen otros que también se traducirían en menos votos, sino se hace algo a tiempo. Y es que pareciera que en este país si Chávez no resuelve los problemas, no los resuelve nadie. Con razón, ya el llamado de Jessica Mariana no es a la Onidex, sino al propio líder revolucionario.


albemor60@hotmail.com


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Alberto Morán


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