Es absolutamente necesario que la nuevas generaciones de venezolanos se enteren de cómo fue el proceder de los dirigentes de tal organización política, ya que  aquel actuar constituye su antecedente histórico y es así como cada individuo hoy puede considerar si ese accionar estuvo bien o mal, más cuando allí se vio involucrada un buen numero de personas que al final algunas podrían sentirse satisfechas de su participación,  o la mayoría tendrían que sentir vergüenza por haber sido cómplice de una jugarreta que lo que hizo fue injuriar el glorioso gentilicio de venezolano. Escudriñemos un poco y veamos.  

En el temario del Congreso de la Juventud de Acción Católica, que se realizó en la ciudad de Roma el año 1.934, está como punto principal la constitución de un movimiento político internacional de tendencia demócrata cristiana, los delegados asistentes a ese conclave aprueban una resolución por medio de la cual se comprometen a fundar en sus respectivos países movimientos hacia esa tendencia. Por Venezuela firma ese documento el joven Rafael Caldera Rodríguez, por Chile Eduardo Frei Montalvo y otros personajes procedentes de otras naciones latinoamericanas. Al regresar a Venezuela Caldera trae el firme propósito de que se debe conformar una poderosa organización demócrata cristiana en el país, sin embargo cree prudente esperar que desaparezca el régimen gomecista.  

Al morirse el general Gómez no existen partidos políticos legalmente constituidos que adversaran al gobierno venezolano, sino que es la Federación de Estudiantes de Venezuela, FEV, la organización que había asumido la representación y defensa de los intereses populares. De ahí que  los dirigentes gubernamentales, el alto clero y otros elementos de pensamiento retrogrado alientan las disputas entre el grupo estudiantil con el ánimo de dividirlo. Poco después de morir Gómez los líderes estudiantiles de izquierda denuncian la intromisión de agentes extranjeros en la política interna de la nación y sobre ese tema se produce una tormentosa asamblea en la FEV el 6 de mayo de 1.936, al final se solicita sean expulsados de esa Federación los dirigentes reconocidos como traidores a la patria y defraudadores de los derechos de los estudiantes. Al poco tiempo la FEV se divide y aquellos estudiantes que se sintieron expulsados de su seno fundan un movimiento político de tendencia social cristiana y es Rafael Caldera quien le impone su nombre, esa nueva organización política de estudiantes se llamará Unión Nacional Estudiantil, UNE. Fue éste el resultado del enfrentamiento de dos corrientes políticas antagónicas dentro de la Federación de Estudiantes de Venezuela, una, dirigida por estudiantes revolucionarios venidos del exilio con ideas renovadoras, y la otra corriente conformada por estudiantes egresados de colegios religiosos y con mentalidad conservadora.  

El 19 de Septiembre de 1.936 la UNE en alianza con fuerzas reaccionarias constituye lo que llamaron la Liga de Defensa Nacional, frente de lucha  para combatir a los sectores de izquierda, en su directiva el joven Rafael Caldera es designado vocal y ese día hacen un desfile que llega cerca del Palacio de Miraflores, Caldera da un discurso y dirigiéndose al Presidente de la República, general López Contreras,   le pide combata abiertamente a los enemigos de Venezuela; los grupos de izquierda. El 10 de febrero de 1.937 la Universidad Central de Venezuela es allanada resultando muerto el joven Eutimio Rivas y heridos  4 estudiantes, enseguida la UNE hace público un comunicado lavándose las manos y responsabilizando  a los movimientos de izquierda. Se conocía que la UNE estaba influenciado por el pensamiento falangista español y que eran simpatizantes del fascismo y es por ello que los comienzan a  llamar los camisas negras venezolanos; este calificativo se intensifica cuando el 9 de octubre de 1.937 los integrantes de la UNE destruyen los talleres del semanario FANTOCHES y le dan una tremenda paliza al insigne caricaturista y luchador democrático Leoncio Martínez