Marta es una periodista y una intelectual, una militante y una propagandista de mensajes de esperanza. Nos conocimos en Chile, en 1971 (¡ya hace casi cuatro décadas!), en los comienzos del gobierno de la Unidad Popular. Allí trabajamos juntos en el CESO (Centro de Estudios Socio-económicos de la Universidad de Chile), con Ruy Mauro Marini, André Gunder Frank, Theotonio dos Santos, Tomás e Inés Vasconi, Marco Aurelio García, Germán Sánchez, Tito Pizarro, entre tantos otros. Marta, con su voz propia, siempre lograba conjugar todas esas actividades de forma coherente.
Por una parte, publicó “Los conceptos elementales del materialismo histórico”, que tuvo y sigue teniendo la más impresionante tiraje para un libro crítico de pensamiento social,, a partir de los cursos a los que a había asistido de Althusser, en Paris, con el éxito que estamos conmemorando hoy. Por otra parte, Marta dirigió la mejor publicación periodística que tuvo Chile en aquel periodo: el semanario “Chile HOY”.
Pero Marta desarrolló otra vertiente muy importante, a partir de los reveses, pero sobre todo a partir de las nuevas experiencias de la izquierda latinoamericana. Buscó en cualquier lugar donde se moviera la esperanza, a nivel local, a nivel nacional, a nivel sectorial, buscando entender determinadas políticas, cruzando todo el continente varias veces, entrevistando a los protagonistas de esas nuevas experiencias y promoviendo debates sobre el balance de los avances, sin olvidar también los reveses.
Pero Marta nunca dejó ser la pedagoga, la profesora, la propagandista —esa actividad tan importante que hay que reivindicar, que trata de ser descalificada por el pensamiento conservador y por cierto pensamiento universitario intelectualista—. Sus libros siempre han tenido ediciones populares, ella misma se dedicó y sigue dedicándose a hacer charlas, a dar cursos, a promover la publicación de folletos, que difunden ese pensamiento que ha construido hablando con la gente y los distintos sectores que componen el campo de la izquierda latinoamericana.
Así es Marta, tantas Martas en una sola, que es imposible dar cuenta de todas ellas. Chilena, cubana, venezolana, latinoamericana como la que más. Militante, compañera, solidaria. Marta.
* Sociólogo, secretario general de Clacso