La oligarquía capitalista, herida de Socialismo, se retuerce en todos los campos procurando zafarse de su destino de extinción. Es así que Julio Borges y Cudemus, cada uno de un lado de la talanquera, intentan deformar la idea de Socialismo. Esos son los ataques que más daño hacen a la Revolución, desorientan a la masa.
Primero, estudiemos a julio borges: este vocero principal de la oligarquía, nos trae en Últimas Noticias del domingo 7 de febrero una explicación de “por qué no funciona el Socialismo”. Se trata de una tesis infeliz y macabra. Expliquemos.
Nos dice borges que un profesor, en una universidad, quiso explicar a sus alumnos por qué el Socialismo no funciona. Para esto ideó un juego sencillo: igualar las notas de todo el grupo.
Supuso que el Socialismo es un promediar los buenos con los malos, y así lo hizo, obteniendo en el primer examen un rendimiento regular del grupo. En el segundo examen, cuando promedió a todo el grupo, el resultado fue mediocre, y ya para el tercer examen el resultado fue, todos aplazados.
Sigue el cuento julio, y nos dice que los estudiantes del experimento comenzaron a pelear porque ninguno quería estudiar para que se beneficiara otro que no quería estudiar, y concluye que todos perdieron el año. Y el profesor pontificó, que esa era la razón del fracaso del Socialismo.
Pero profundicemos un poco en la tesis del anónimo profesor de julio: en el fondo se intenta exponer que el humano es incapaz de tareas fraternas.
En el escrito, julio expone la esencia de su pensamiento: …“el ser humano está dispuesto a sacrificarse cuando la recompensa es justa y todo el mundo se esfuerza por igual”. Así resume el meollo de su tesis antropológica: “el humano es egoísta y sin recompensa no actúa, y no está dispuesto a ayudar a los menos favorecidos. El pobre es pobre porque es flojo”. Él no podría pensar de otra manera, es la tesis egoísta, inhumana del capitalismo, que desprecia a los humildes.
El Socialismo es humanismo, cree en el hombre, y cree que las relaciones humanas determinan la condición humana. Por eso, podemos deducir que el grupo del cuento de julio, era un grupo de una universidad privada donde se preparan los cerebros que utilizará el capitalismo, allí una de las enseñanzas más importantes es el egoísmo y la guerra de todos contra todos.
Si el grupo del experimento fuese en una Universidad Socialista, otro sería el comportamiento, se ayudarían a estudiar, los de veinte, ayudarían a los de diez.
Julio y su profesor se saltan a la torera las extraordinarias experiencias del humano en lucha por construirse. Se saltan el heroico comportamiento fraterno del pueblo cubano resistiendo el criminal bloqueo impuesto por los gringos, o la hazaña del pueblo soviético derrotando al peligro nazi.
Julio Borges es un ejemplo de la infame labor de los capitalistas del otro lado de la talanquera. De Cudemus nos ocuparemos mañana.
¡Chávez es Socialismo!