La Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), en cambio, fue creada en 1946 con la firma de los gobiernos de Estados Unidos, Bélgica, Canadá, Dinamarca, Francia, Gran Bretaña, Islandia, Italia, Luxemburgo, los Países Bajos y Portugal. En 1952 se le sumaron Turquía y Grecia, en 1955 lo hizo la República Federal Alemana y en 1982 se incorporó España. Nació para Europa garantizarse el apoyo de Estados Unidos en caso de una agresión, es decir, contra –para entonces- lo que era la Unión Soviética. Una vez desintegrada ésta, corrieron a los brazos de la OTAN: Hungría, Polonia, la República Checa, Bulgaria, Eslovaquia, Eslovenia, Estonia, Letonia, Lituania y Rumania. Igualmente, la OTAN tiene su cuento chino: garantizar la paz… ¿Dónde?: en cualquier región –especialmennte- de Europa, Asia y Africa en que se requiera mantener la hegemonía de los supremos intereses económicos de las Naciones imperialistas. ¿Acaso nadie se ha preguntado: qué tienen que ver los países del Medio Oriente con la OTAN?
El Atlántico es un océano que separa a Europa y Africa de América y cuenta con 106.000.000 de kilómetros cuadrados. Una pelusa. Entonces, cabe la pregunta: ¿qué hacen allí Estados Unidos y Canadá? Sencillamente: son naciones imperialistas y la primera es la más poderosa del mundo. La diferencia fundamental entre la ONU y la OTAN estriba en que la primera es más esencialmente política mientras que la segunda es más esencialmente militar.
Si la audiencia que mira o ve televisión y escucha hablar al Secretario General de la OTAN, se observa, timbrando los oídos, a un nazi imitando a Hitler sin que de éste pueda aquel copiar o plagiar la innegable capacidad oratoria que lo caracterizó para electrizar o imanizar masas a favor de sus macabros y perversos planes de expansionismo geográfico, exterminio social y saqueo económico. Se parece mucho a la hiena devorando lo que de presa o migaja dejan los leones después de haber degustado las mejores carnes de la víctima. Cuado habla se le paran los cabellos, los ojos le brillan con un rojo encendido de desespero, las mandíbulas se le mueven como queriendo másticar mucho más de lo que puede caberle en la boca y la nariz le hace vibraciones como si le creciera con cada palabra que pronuncia porque sabiendo que es una mentira no es capaz de renunciar a ella.
Sus expresiones del rostro, especialmente cuando está al frente de cámaras de televisión, dejan –posiblemente sin que él lo desee- escapar su conflictividad interior, recvhaza a todo pueblo que quiera decidir su propio destijo sin injerencia externa, es un resentido que no ordena el inventario de sus actos ni de sus pensamientos, todo lo que no nace de él le parece falso, odia todo sistema social que no se arrodille a los supremos intereses del imperialismo, se mofa de las virtudes de otros que no son de su especie, convierte lo trágico para otros en algo festivo para él y sus allegados, trata de demostrar que él esmás bárbaro y cruel que quienes le rodean, es paranoico, al mercenario le otorga categoría de libertador… Es, en definitiva, un sádico de la política, un narzismo de la ideología, un criminal disfrazado de demócrata, un lobo con un sobretodo de piel de cordero, un impostor que viola todos los derechos humanos de otros amparado en la fuerza bélica en manos de asesinos. Ese es el mejor retrato del Secretario General de la OTAN. Quizás, en su juventud, quiso ser un roquero para bailar sobre los cadáveres de sus víctimas.
La OTAN se escuda en las actuaciones de esa parte de la ONU que se abroga la potestad de tomar decisiones aun cuando la mayoría de sus integrantes se opongan. Lo que está haciendo la OTAN con Libia es una callapa, es un crimen político-militar, es una aberración del derecho internacional, es un maltrato diabólico la género humano y su historia, es la aplicació rigurosa de la ley de la selva, es el uso de la destilación químicamente pura de la ignominia capitalista contrariando la voluntad dela mayoría de un pueblo que quiere hacer valer su derecho a la autodeterminación. La OTAN es una suma de los Goliath haciendo uso de armas sofisticadas contra los David desarmados de lasmismas. La OTAN es igual a Organización Terrorista Asesina Neonazi.
En fin: la OTAN no hace más que defender el insólito derecho de uso pocos Estados a ejercer la violencia –especialmente terrorista- imperialista de la minoría contra la inmensa mayoría del planeta para que siga predominando el status quo y no, precisamente, la organización de la paz en igualdad de favores para todos los pueblos.