Hacemos un paréntesis
(paríntisis) en la redacción de la respuesta a un cubano jetón, que
sin más allá ni más acá me calló a insultos a través de Walter,
para dar a conocer un comunicado publicado por un Comando de la Revolución-Zulia,
en torno del aumento de las tarifas eléctricas durante el gobierno
de Caldera y de los servicios municipales decretados por Manuel
Rosales durante su devastador paso por la alcaldía de Maracaibo. Aprovecho
también la oportunidad para denunciar al nuevo presidente de Corpozulia
quien acaba de renovar un acuerdo mediante el cual Enelven se encargará
de cobrar los servicios municipales. Hecho que va abiertamente en contra
de los usuarios quienes se verán obligados a pagar facturas eléctricas
más abultadas cada vez que a los alcaldes les dé la gana de aumentar
las tarifas municipales. En relación con esto cabría preguntar: ¿qué
objeto tiene mantener las tarifas eléctricas congeladas si mediante
el incremento de las tarifas municipales la electricidad se podría
ver aumenta. Por ejemplo, a nosotros hace años no nos viene el gas
doméstico, y sin embargo tenemos que pagarlo, porque de no hacerlo
nos cortan la luz. Y que tiene que ver la luz con el gas. Cosas de este
país surrealista.
El remitido se titula así:
Zuliano, ésta es la verdad sobre las tarifas eléctricas y otros servicios
públicos. Y continua:
“La directiva de Enelven está controlada desde hace 30 años por un grupo neoliberal cuyos cabecillas son Humberto Zabarce y Ciro Portillo, muy relacionados con Fedecámaras. Ellos, junto con Manuel Rosales y la mayoría de los actuales alcaldes del Zulia, concibieron durante el gobierno de Caldera el pliego tarifario que establecía aumentos anuales a partir de 1998 hasta el 2003, y así queda establecido en las concesiones otorgadas por cada Alcaldía y Concejo del Zulia a la egresa eléctrica. Hoy quieren aparentar que nada tienen que ver con el aumento de las tarifas. No te dejes engañar.
Rosales y los
alcaldes neo-adecos y copeyanos deben dejar el doble discurso y el show,
porque no tienen moral para exhibirse como defensores de los usuarios
y usar el problema de las tarifas como bandera político-partidista.
Antes Rosales y ahora Di Martino entre octubre del 2000 y abril del
2001 elevaron las tarifas del aseo urbano en un 180 por ciento, aumentaron
las tarifas del Gas desde junio del 2001 en un 100 por ciento y aumentaron
el impuesto inmobiliario conocido como “derecho de frente” en un
80 por ciento sin que los servicios municipales dejen de ser sumamente
deficientes y malos. En muchos barrios y urbanizaciones populares, aun
cuando los usuarios no reciben el suministro de gas ni el servicio del
aseo, se ven obligados a pagarlo para que no les corten el servicio
eléctrico, y con frecuencia los recibos de electricidad, en los sectores
populares, son difíciles de pagar porque el desorbitado monto de los
servicios municipales impiden cumplir con el pago del servicio eléctrico.
Enelven obtuvo
durante el año 2001 ganancias de 45 mil millones de bolívares. El
gobierno del Presidente Chávez canceló deudas contraídas por
gobiernos anteriores con Enelven por más de 8 mil millones de bolívares
y aportó en el mismo período 105 millones a objeto de recuperar la
empresa. Lo cual no ocurrió. En lugar de ello ENELVEN invirtió 7 mil
millones de bolívares en programas de reestructuración interna y mantiene
elevados gastos en programas ineficaces, como el de las famosas cajeras
antifraude y un fabuloso derroche en publicidad innecesaria”.
Termina con varias consignas entre la cuales se encuentra la siguiente: “Llamamos al gobierno nacional y a todas las autorices que tienen que ver con el servicio eléctrico a lograr en forma unida la recuperación de ENELVEN y colocarla al servicio de todos los zulianos”
Rosales miente
Venezuela se dispone a importar
aluminio, y como vivimos en un país kafkiano, nada de extraño tendría
que empezáramos a importar petróleo.
Una de Rosales, con la advertencia de que absoluta y rigurosamente cierta: En una entrevista por una televisora regional, el entrevistador le pregunta al prófugo que de nuevo había salido electo para la alcaldía:
-Qué le
pasa, gobernador, que lo veo un poco más delgado.
-Bueno, chico
–le responde Rosales-, es que he dejado de consumir hidrocarburos.
Por supuesto, se refería a los carbohidratos.
alfredoschmilinsky@hormail.com