Los únicos países que en la actualidad manejan su economía más o menos sin dificultades, son los países realmente comunistas o medianamente socialistas con la potente China a la cabeza. Y de los cuasi socialistas, como fueron los gobiernos de Grecia, España, Portugal y otros partidos de la derecha con rimbombantes nombres de partidos políticos dizque socialistas, ya se rompieron los parches con los que amarraron a los trabajadores y sindicatos del Planeta. Sin descontar, que en este momento se USAron y USAn esos países antes mencionados para hacer creer al Mundo que el socialismo fracasó sin explicaciones.
La Clase Obrera mundial y sobre todo esa Clase Obrera europea, asiática y norteamericana que no se educa en lo social y que por décadas le importó un bledo las problemáticas de la Clase Obrera de los países considerados tercermundistas, afincó sus “esperanzas” en sus corruptos gobiernos ultraderechistas y patronos que hacen parte fundamental de la economía, las leyes y lo social de esos gobiernos. Patada testicular a la Clase Obrera mundial, cuándo esos patronos son los “primeros ministros”, “presidentes” y otras tuercas y tornillos del poder en esos gobiernos. En este momento lo experimentamos en América Latina con los presidentes patronos en Panamá, Chile, Honduras, Costa Rica, México, Colombia y otros. ¿No es la estúpidez más grande? ¿No legislan para sí mismo y su entorno esos patronos gobernantes?
Ahora bien, los indignados y ocupys que buscan las formas y deformas para llamar la atención de los que lo saben todo, gobernantes patrones, no se manifiestan con la real izquierda mundial que son a ciencia ciertísima los únicos que pueden darles soluciones tangibles a sus problemáticas políticas, económicas y sociales. Pero como bien sabemos quienes vivimos atentos a lo que ocurre en las manifestaciones mundiales, no asoman las consignas, las banderas o las pancartas de izquierda real porque los ocupys e indignados del mundo capitalista, pretenden soluciones sociales y económicas con las banderas de la misma derecha que los indigna.
Entonces la pregunta en el tintero dice: ¿Por qué son anticomunistas y antisocialistas los indignados y los ocupys? De seguro hay respuestas de todos los calibres para este interrogante, y mientras no se respondan con la necesaria seriedad, indignados y ocupys seguirán burlados por sus gobiernos y, patronos que les gobiernan. ¿O al alcalde actual de Nueva York le importa la problemática de las mayorías desprotegidas en los guetos y barriadas de su City? ¿Le importó a Berlusconi ahorcar hasta el cansancio a los italianos? ¿Y de Piñera y Martinelly que esperan los chilenos y panameños? ¿Los ocupys e indignados seguirán sus luchas desde la derecha o los temores y sus miedos les impiden buscar el beneficio mundial desde el socialismo o el comunismo real? Y le aclaro con el agua limpia que todavía queda en el planeta a ocupys e indignados, que los patronos gobernantes no moverán sus filosofías mentales maltusianas, mientras no vean carácter en las manifestaciones de todas las plazas y calles del Mundo; y ese carácter sólo se logra con posiciones de humanismo donde el socialismo y comunismo real nos dictan la cátedra necesaria para tal fin.
¡Independencia y socialismo!
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