El mundo entero sigue observando el oprobio que desde la creación formal del Estado de Israel, hace ya casi siete décadas, padece el pueblo hermano de Palestina. Con esto queda demostrada la necesidad de crear un nuevo orden geopolítico mundial, para lograr el equilibrio en las relaciones internacionales, y romper así con la hegemonía de los países que se creen dueños del mundo.
Basta ya que el Estado de Israel, apoyado por el maldito Imperio Norteamericano, siga sometiendo a nuestra hermana Palestina, que en su legítimo derecho lucha para que se le reconozca como Estado. Pienso que todos los hombres y mujeres justas del mundo deben apoyar la causa palestina, la Historia nos demuestra que tienen el legítimo derecho a su territorio. ¿Qué pretende Israel? ¿Perpetrar otra nueva masacre? Es un conflicto asimétrico que demuestra al mundo lo miserables e inhumanos que son. Y no me refiero al pueblo israelí, sino a sus élites políticas de ultraderecha, que a costa de lo que sea tratarán de evitar la creación del estado palestino.
Tenemos un nuevo genocidio en puertas. ¿Qué papel jugará la ONU en esta oportunidad? ¿Será tan patético como siempre? Es admirable por parte del pueblo palestino la resistencia que durante tantos años han mantenido, y lo han logrado solo con su unidad y autodeterminación para llegar a ser independiente y soberano.
Hoy la excusa para el conflicto es acabar con el gobierno de unidad palestino acordado entre Hamas y Al Fatah. Yo me pregunto si el Mossad, que es un cuerpo élite del estado israelí, no es una amenaza permanente para el pueblo palestino. Si algo describe la asimetría del poder bélico son estos cuerpos. En cada enfrentamiento de Israel contra el territorio palestino viene como consecuencia el aumento de los asentamientos israelíes, restándole territorio a la hermana Palestina. ¡Qué inmoralidad! Y la ONU, bien gracias. Qué fácil es atacar una población inerme, cuando se cuenta con uno de los ejércitos más avanzados del mundo, armado hasta los dientes. Y por si fuera poco, con un arsenal nuclear que, pese al secretismo que lo envuelve, se calcula entre 100 y 300 ojivas.
La élite política israelí y su ejército nunca, óigase bien, nunca, tendrán la fuerza de espíritu, ni la mayor arma con que cuenta el pueblo palestino, que es su dignidad y capacidad para resistir. Estas letras no pretenden más que dar un merecido reconocimiento a los pueblos que luchan por su autodeterminación, como es la valiente Palestina. ¡Adelante hermanos! ¡No están solos! ¡Honor y gloria para el pueblo palestino!
Con profundo amor,
Zulika King.
Coordinadora del Movimiento de Batalla Social Punta de Lanza.
En Guatire, la Villa Heroica, a los 9 días del mes de julio de 2014.
