Al Pueblo De Venezuela,
Al Gobierno Bolivariano de Venezuela,
A los Pueblos y Gobiernos del Mundo,
A los Medios de Comunicación Nacionales e Internacionales,
A la Opinión Pública Nacional e Internacional,
Al Mundo entero,
Hermanos y Hermanas:
Recordemos y esparzamos el ejemplo y las convicciones revolucionarias de otro gran mártir de las luchas revolucionarias populares de nuestra América, como lo fue Mariano Pujadas, y rindamos honores a toda su familia, victima también de los crueles y asesinos metodos de la derecha en contra de nosotros el pueblo.
Mariano José María Francisco Pujadas fue un guerrillero que nació el 14 de junio de 1948 en Barcelona, España y fue asesinado el 22 de agosto de 1972 en Trelew, provincia de Chubut, Argentina fue el fundador de la organización político-militar Montoneros en la provincia de Córdoba.
Estudió agronomía en la Universidad Católica de Córdoba, donde comienza a militar en una organización estudiantil peronista: la Agrupación de Estudios Sociales AES, la cual posteriormente se fusionó con Montoneros.
El 1° de julio de 1970 unos 25 miembros de Montoneros ocupan diversos locales públicos en la localidad de La Calera, pero por errores de la organización son detenidos muchos militantes, muere Emilio Maza en un tiroteo, y cae en poder de la policía un fichero con los datos de integrantes de la organización y, además, pistas que conducen a la individualización de los militantes que habían asesinado al expresidente Pedro Eugenio Aramburu. Pujadas pasó a la clandestinidad pero en junio de 1971 fue hecho prisionero.
El 15 de agosto de 1972 en una fuga masiva, en la cual, por fallas en la organización, el segundo grupo de presos, entre los cuales estaba Pujadas, salió con retraso del penal y se quedó en el aeropuerto de Trelew rodeado por integrantes de la infantería de marina por lo cual debe entregarse. Fue trasladado a la Base Naval Almirante Zar y se lo asesina junto con otros 15 presos en la llamada Masacre de Trelew el 22 de agosto de 1972.
El 14 de agosto de 1975 el grupo paramilitar Comando Libertadores de América asaltó la casa de sus padres José María Pujadas y Josefa Badell y los mató a tiros y luego despedazó con granadas al igual que a sus hermanos José María y María José de 28 y 18 años respectivamente, dejando con vida en la casa solamente a dos menores.
Entre los cadáveres se encontraba un menor que salvó su vida de la detonación de la granada por encontrarse tapado por los cuerpos de las otras personas asesinadas.
Para el momento, la provincia de Córdoba estaba intervenida y el poder cayó en manos del brigadier Raúl Lacabanne, quien a través de su secretario privado Miguel Egea financiaba al Comando Libertadores de América, organización formada por militares, policías y civiles que operaban bajo las órdenes del militar retirado del Ejército Héctor Vergez, alias “Capitán Vargas”, y un suboficial de la Aeronáutica, Pedro Raúl Telleldín, quien se hizo cargo del Departamento de Informaciones de la Policía. La locura de este grupo de asesinos, desembocó en una de las matanzas más brutales que se han ejecutado en Córdoba.
Los padres y hermanos de Mariano Pujadas, eran una familia catalana que llegó a la Argentina en 1953, por el terror que imponía el franquismo, y aunque tanto José María Pujadas como su esposa, Josefa Badell, eran brillantes médicos, recibidos con diploma de honor, cuando se instalaron en Córdoba se dedicaron al desarrollo avícola.
Su asesinato se debió a que, al ser entregado el cadáver de Mariano a sus familiares, los militares les prohibieron abrir el ataúd, para ocultar la tortura y ajusticiamiento al que había sido sometido, ya que la versión oficial sería que murió en un enfrentamiento con el ejército, al intentar escapar. Esta orden fue ignorada por su padre, quien abrió el ataúd y corroboro que su hijo “Mariano tenía heridas en las piernas, los brazos y muy pocas en el tórax, pero sí tenía un brutal hueco en la nuca, lo que corroboraba que había sido fusilado y muerto con un tiro de gracia”.
Esa noche de la masacre, en la casa se encontraban el matrimonio Pujadas, sus hijos José María, María José y Víctor, la esposa de José María y la hijita de ellos, María Eugenia. Los Pujadas tenían dos hijos más que no se encontraban en casa: Ricardo y Ángeles. Los que se sobrevivieron esa noche fueron Víctor, que tenía once años, y María Eugenia, de tres meses, porque los encerraron en un baño. De los presentes se salvó milagrosamente la esposa de José María, pero falleció a los pocos meses a causa de las secuelas de aquella noche. Los tres hermanos que quedaron (Ricardo, Ángeles y Víctor) y sus respectivas familias se fueron a España con muy pocas pertenencias. Ninguno de los tres volvió a vivir a la Argentina…
Rescatando la Memoria Histórica Revolucionaria.
Con Bolívar y Chávez, decimos ¡a la carga!
Desde Venezuela, Tierra de Libertadores, a 522 años del inicio de la Resistencia antiimperialista en América, y a 204 años del inicio de Nuestra Independencia,
Coordinadora Simón Bolívar
Revolucionaria, Solidaria, Internacionalista, Indigenista, Popular y Socialista.