Pareciera que la comunidad internacional cada día se hace más insensible frente a los crímenes de lesa humanidad cometidos por Estados Unidos de Norteamérica, como potencia imperialista que ahora asociada a la Unión Europea, tiene a la Organización del Atlántico Norte (OTAN) como el sicario que realiza el trabajo sucio que antes hacían los marines y contratistas durante las invasiones.

Una realidad vergonzosa y que no hay palabras para calificarla, es lo que acaban de hacer con el hospital de los Médicos sin fronteras en Afganistan, donde fueron vilmente asesinados doce profesionales de la salud, junto a sus pacientes, por un bombardeo efectuado por los miserables de la OTAN, que lo arreglaron todo con una hipócrita disculpa y la justificación de que son daños colaterales.

Cada día también nos golpea en la cara la crisis humanitaria, que viven millones de ciudadanos en el mundo, que huyendo de la violencia y crímenes aupados por EE UU - EU con la OTAN, han hecho del Mediterráneo la fosa más grande del universo, a cielo abierto, en un intento por encontrar la paz, que le fue rota en sus países de origen, por los modernos filibusteros representados por las élites de Washington y la Unión Europea, que los han invadido, para robarles sus reservas internacionales y sus riquezas naturales, como los casos de Libia, Irak, Afganistan y Siria, ésta última resistiendo la sangrienta agresión occidental, con la siembra de terroristas en su territorio, como lo es el Estado Islámico, que ni es estado y mucho menos islámico, porque el Islam, se asienta sobre el principio del respeto a la vida, el repudio al crimen y al robo, por estar en contra de los mandamientos de Dios.

El EI, por sus siglas internacionales, no es más que una banda de criminales entrenados por la CIA, el Pentágono y el Mossad, para ser utilizada por las potencias occidentales para desestabilizar el Medio Oriente y justificar su ocupación armada a través de la OTAN.

Rusia ha demostrado fehacientemente que esta hipótesis se convierte en teoría, porque su propuesta en la ONU para declarar al EI como grupo terroristas y crear una alianza internacional, para su persecución y sometimiento, fue vetada por la representación estadounidense. Lo otro, es que en la primera incursión de la aviación rusa, con la anuencia y apoyo del gobierno legítimo de Siria, destruyó el principal centro de logística de los terrorista y mas de 600 combatientes abandonaron sus puestos y se dispersaron en busca de huir a Europa, mientras que la coalición EE UU-UE, a través de la OTAN, en su largo accionar, lo único que ha hecho es matar civiles sirios y atacar posiciones de aliados del gobierno de Bashar Al Assad, mientras los grupos armados del EI, seguían ocupando territorio sirio.

Porque lo que busca EE UU y sus socios de la UE, es derrocar al legítimo presidente de Siria Bashar Al Asad, porque les resulta incómodo para sus apetencias de ocupación y de dominación del mundo árabe. Lo mismo están haciendo con los gobiernos progresistas de Suramérica, como son: Venezuela, Ecuador, Bolívia, Nicaragua, Argentina, Uruguay y hasta Brasil, sometidos permanentemente a presión, por parte del malandro planetario, que pretende que todos hagan su voluntad en el resto del mundo, como lo ha logrado con los títeres de Europa Occidental.

No hay escrúpulos por parte del imperio, para alcanzar sus propósitos. Recordemos el atentado contra Evo Morales, cuando el amo del mundo,desde Washington ordenó cerrar los espacios aéreos al avión presidencial, cuando ya este se encontraba en el aire. Lógicamente si la aeronave colapsaba por falta de combustible; como de costumbre el patotero, que goza de impunidad, se habría disculpado argumentando que un lamentable error por información equivocada había causado tal desgracia. Afortunadamente no todos son lacayos y el presidente aborigen, pudo aterrizar y reabastecer su nave. Ahora la entente es contra Venezuela, mientras engañan al mundo con su posición frente a Cuba, que no es más que un cambio de estrategia, aplican el garrote contra República Bolivariana de Venezuela

a la cual someten a una operación tenaza ejercida por los gobiernos lacayos de Colombia y Guyana. La más reciente agresión contra nuestro país, es la ofensa al Defensor del Pueblo, Tarek William Saad, a quien le aplicaron una cobarde treta migratoria, a través de la Interpol norteamericana, para exigir del gobierno mexicano, otro lacayo, tratar a nuestro máximo representante de los Derechos Humanos y miembro de la comisión respectiva de la ONU, como si se tratara de un delincuente. Esas son las aristas del Decreto de Barack Hussein Obama, que nos tiene como una "Amenaza inusual" para la seguridad de Estados Unidos de Norteamérica. La provocación contra Venezuela, está al día, con gobiernos vecinos, la Exxon Mobil y la entreguista y apátrida oposición, refugiada en la MUD. Frente a estas tropelías del imperio, la comunidad internacional hace mutis. En la ONU se dijo tímidamente, que el bombardeo al hospital de los médicos sin frontera "pudiera ser un crimen de guerra". ¿Que tal si eso lo hubiese la fuerza aérea de algún país no afecto al imperio? Seguramente el Consejo de Seguridad, ya habría autorizado su bombardeo humanitario, para castigar a los criminales de guerra. La pregunta que surge, frente a este malandreo planetario es: ¿Hasta cuando la humanidad soportará tanto maltrato.? Periodista* CNP 2414 cd2620@gmail.com