Barack Hussein Obama es un político que nace en una propiedad estadounidense fuera de sus fronteras americanas, Honolulu, Hawái, el 4 de agosto de 1961, fue el 44º presidente de los Estados Unidos de América desde el 20 de enero de 2009 hasta el 20 de enero de 2017. Fue Senador por el estado de Illinois, quinto legislador afroamericano en el senado y primer candidato afroamericano nominado a la presidencia por el Partido Demócrata y primero en ejercer el cargo presidencial. Para el mundo entero aquello era fin de mundo, un negro primer inquilino de la Casa Blanca, váyalo, era como para no creerlo, pero después de la sorpresa te da la vida, mucha gente creyó iba a hacer muchas cosas en favor de la negritud abusada en Gringolandia especialmente, pero no, resultó ser otro burgués más, ahora vestido con una capa negra, y es así cómo su pueblo y el mundo comienza a saber de su mandato. El 7 de julio de 2009, mientras estaba de viaje por Moscú, responde a un comentario del vicepresidente Biden sobre un posible ataque militar israelí contra Irán, "Hemos dicho directamente a los israelíes que es importante tratar de resolver esto en un contexto internacional de una manera que no cree un mayor conflicto en el Oriente Medio" El 24 de septiembre de 2009, Obama se convierte en el primer presidente gringo en presidir una reunión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Como usted podrá notar el paisaje político se ve muy agradable, en cuanto a la al manejo del Imperio. Pero ahora dejemos para más adelante lo que va a pasar con Obama frente a su responsabilidad; que aun él creerá es un sueño y nada más. Bien, pasemos entonces a la narración de algunos episodios de nuestra majestuosa revolución liberadora.
Al hablar míster Harrinson, representante de Estados Unidos en Venezuela, radicado en Bogotá, Colombia, con cierta rudeza del comportamiento del Presidente de la gran Colombia, Simón Bolívar, el Libertador, cosa que llegó a oídos de Bolívar, en una carta al encargado británico en Bogotá, contraparte y rival diplomático de Harrison, Bolívar le dice que los esquemas pro-monárquicos que le indilgan jamás por su mente han pasado. Bolívar aprovecha la oportunidad para fijar su posición con respecto a los Estados Unidos y le dice que en él coexistían elementos de admiración y desconfianza. Bolívar confiesa en el Discurso de Angostura, febrero de 1819, la admiración por el pueblo e instituciones norteamericanas. "El pueblo norteamericano es un modelo singular de virtud política y rectitud moral; esa nación nació en libertad, se crió en libertad y se mantuvo sólo por la libertad" y lo ratifica en un ensayo sobre educación pública, donde habla de "la República de Estados Unidos, esa tierra de libertad y hogar de la virtud cívica" Entonces, es lógico preguntarnos, ¿Y cómo es eso que un ejemplo de virtud cívica pueda tener la intención de plagar la América con tormentos?
Aunque en verdad y a primera vista pareciera paradójico, la misma admiración de Bolívar por las virtudes del pueblo estadounidense lo puso en guardia contra sus burgueses dirigentes y gobiernos, y así lo ratifica en el mismo Discurso de Angostura: Los Estados Unidos está destinado al triple yugo: La ignorancia política, la tiranía de sus gobiernos y los vicio introducido por sus naturales pervertidos, por lo que no sería posible nosotros vivir bajo las mismas leyes. En efecto, el genio nuestro, el venezolano insigne sospechaba que las instituciones políticas de los Estados Unidos eran demasiado perfectas para durar sanas indefinidamente. lo que era simplemente una razón más por la que las naciones latinoamericanas ni siquiera deberían intentar emularlas. Tal como observó en otra ocasión, "Pienso que sería mejor para América del Sur adoptar la forma de gobierno del Corán antes que la de los Estados Unidos"
