"Los abusos nacen y se multiplican en medio del desorden,

como ciertos insectos en el seno de la putrefacción".

Joseph Sanial-Dubay

"Siempre que el sistema económico va mal, surge el racismo."

Desmond Tutu

Un amigo, amante del deporte; sus temas de conversación giran en torno al beisbol, baloncesto y ciclismo, pero nunca lo agarran fuera de base, cuando le tocan otra especialidad. Rara vez se le oye hablar de política, pero este jueves en la mañana, apenas lo vi me dio la noticia del momento en el deporte estadounidense ¡pararon la NBA! Al preguntarle ¿Y eso? Respondió con un mensaje, el cual encierra lo que está pasando en los últimos meses, hasta convertirse en el centro del huracán de las protestas callejeras, que por momentos se apagan, pero dejan el resentimiento encendido ¡En Estados Unidos, parece que a los únicos que matan los policías es a los negros!

En los Estados Unidos el racismo, es parte del comportamiento del gran capital, y lo llevan tan incrustado en el cerebro los poderosos, que prácticamente lo han convertido en una política de estado. El 15 de abril de 1947, Jackie Robinson, rompió con la barrera denigrante en el béisbol al convertirse en el primer jugador de piel negra, en pisar un terreno de juego, pero no por eso el racismo aminoró; al contrario, los abusos sobre la manera de tratar a las personas de color negro arrecieron de manera alarmante, y cada momento muere un negro en las calles de cualquiera ciudad del poderoso país del norte, por parte de policías blancos.

Eso sencillamente es parte de la política, estadounidense, y mi amigo sin darse cuenta se sumó a la protesta, que por momentos paralizó la NBA, teniendo, como sus voceros inmediatos y más conocidos: Michael Jordan y Lebrón James por sus grandes actuaciones en un deporte, que atrae a grandes y chicos, pero manchado por el racismo, precisamente en las mismas canchas de juego. Hace 6 años, para aquel momento el dueño de los Clipper de los Ángeles (NBA), el acaudalado millonario Donald Sterling, denigró de los afroamericanos (los negros) en una conversación grabada con su novia: "Puedes hacer lo que quieras todos los días. Puedes dormir con ellos, puedes hacer lo que te apetezca. Lo poco que te pido es que no los promociones... y que no los lleves a mis partidos. No traigas gente negra a mis partidos"

En aquella oportunidad, se dio una protesta en la mayoría de las canchas de este deporte, y los jugadores del equipo se negaron a jugar, no quedándole al dueño, si no vender la franquicia, pero el mal sigue presente, porque no es un problema del deporte, ni de una persona en particular, es la sociedad del capitalismo enferma, como se demuestran nuevamente. En los últimos 4 meses, la muerte de un ciudadano de piel negra –George Floyd– y uno herido, que está vivo de milagro al recibir 4 disparos de los 7 que le hicieron –Jacob Blake– han avivado las protestas, las polémicas y nos enseña a conocer, como el dinero marca la pauta en todo: las dos voces de renombre asignados para participar en medio de la discusión y la amenaza de parar definitivamente la irregular temporada por la pandemia: Michael Jordan, y Lebrón James, juegan papeles distintos en la NBA; Jordan, empresario y su participación es muy comedida; Lebrón, jugador se ha convertido en una voz firme contra el racismo, y sin medias tintas, y lo empiezan a catalogar, como el atleta definitivo.

¿Cuál es la verdad del racismo en los Estados Unidos? El pasado 16 de agosto, Amina Kahn, periodista, publicó una cifra para despertar conciencia: "Aproximadamente uno de cada 1.000 hombres y niños negros en Estados Unidos mueren a manos de la policía, según un nuevo análisis que involucra a agentes de la ley. Eso los hace 2.5 veces más propensos a fallecer que los hombres y niños blancos en un encuentro en las calles con representantes de la ley".

¿Por qué Lebrón James se está ganando un lugar en la historia, aparte de su calidad, como jugador? En el 2017 le llenaron su casa de pintas denigrantes cargadas de racismo, y lejos de amilanarse, respondió con valentía: "No importa cuánto dinero tengas, no importa qué tan famoso seas, no importa cuántos te admiren, es muy duro ser negro en América" Estamos viendo en estos dos representantes del deporte, las dos caras de la moneda, a pesar de formar parte de una elite de jugadores millonarios, uno, es un empresario midiendo cada paso que da; en el otro florece la conciencia en defensa de sus semejantes. Con razón Eduardo Galeano, no dejo un pensamiento para abrir el conocimiento en cada actuación que nos toque vivir: "somos lo que hacemos para cambiar lo que somos"