En plena recta final de la batalla electoral en los Estados Unidos de Norteamérica no existe tregua y los políticos de ambas aceras aprovechan el fenómeno de la polarización para canalizar los votos.
Los problemas sociales persisten y los efectos del Covid-19, se mantienen. Asimismo, los sectores populares son los más vulnerables porque carecen de un sistema de salud óptimo y no tienen seguridad social para protegerse ante los distintos fenómenos que afectan a la sociedad.
Ante todo esto, los políticos se están oxigenando, motivado a que la semana pasada Donald Trump, hizo tendencia "su contagio de coronavirus" y a los tres días se recuperó, sin embargo, dejo mucho de qué hablar para los pro demócratas, su maniobra fue para motivar a los simpatizantes republicanos y lo logro.
Ahora, la lucha de los demócratas es llegar a la Casa Blanca y ganar los espacios del Senado, agentes económicos a través de la organización demócrata ActBlue informan que gracias a "pequeños donantes" han recaudado más de 1.500 millones de dólares, eso indica que Biden y compañía, de no llegar a la silla, llegarán al Senado, ya que con esto pueden evitar las represalias de Trump, a propósito, con ese dinero recaudado tienen opciones para continuar fortaleciendo la estructura del partido demócrata y consolidar a futuro una victoria segura para los comicios electorales en el año 2024.
Mientras tanto, los republicanos siguen consolidándose para continuar con su mandato. Hasta ahora la plataforma republicana WinRed ha recaudado más de 600 millones de dólares, fondos destinados para la campaña del presidente y candidato Trump, a fin de fortalecer y maniobrar ante las circunstancias que pueda enfrentar a pocas semanas de las elecciones presidenciales, mientras se aproximan los días, la situación en EE.UU., es más compleja y más por los efectos del coronavirus y la polarización.
Haciendo comparaciones con los comicios presidenciales del 2016, donde los candidatos Donald Trump y Hillary Clinton, gastaron más de 1800 millones de dólares, estos nuevos comicios electorales son los más costosos de la historia de los EE.UU., según La Comisión Electoral Federal, (FEC) hasta el 22 de septiembre de 2020 habían gastado más de 3.000 millones de dólares, hoy se puede afirmar que esos números cambiaron, es decir, cuando finalice la campaña podría romper la barrera de los 5.000 millones de dólares.
Los agentes económicos de ambos partidos se la juegan, pero, esta vez podría salir airoso Trump, porque tiene poder, lo sabe usar y la mayoría de los agentes financieros internos y externos lo apoyan, en suma, están los banqueros hasta magnates de historietas tendenciosas, lo defienden y le pagan comerciales de TV, con la garantía de seguir incrementando su capital en el mundo. Por otro lado, de acuerdo a la BBC, a través de la lista FEC de quienes apoyan a Biden, encontró a Jorge Pérez, un magnate cubano-estadunidense de la propiedad Raíz descrito como uno de los latinos más cotizados de EE.UU., quien antes hizo negocios inmobiliarios con Trump y ahora cambio su posición y está financiando con 2.800 millones de dólares para la campaña pro demócrata, con ese financiamiento es más que un alivio y oxigena a Biden para jugar un poco antes de finalizar la campaña.
Al respecto, ya quedan 18 días para las elecciones y según las encuestas Biden, tiene una ventaja considerable a nivel nacional, sin embargo, las encuestas no garantizan la claridad de un triunfo para el candidato demócrata. Por otro lado, Biden y Trump, cuentan con grandes magnates dispuestos a invertir en ellos, pudiéndose apreciar la inversión de miles de millones de dólares en gastos en plena campaña electoral, su finalidad es buscar el triunfo del candidato que creen proteger sus intereses de capital.
Los efectos del Coronavirus se han hecho notar y a pesar de todo, más de 18 millones de estadounidenses han enviado sus votos de manera anticipada ya sea en persona o por correo, una cifra record según Elections Project que equivale a casi el 13% de los votos totales del 2016. Aun así, Trump, cuestiona y deslegitima esa votación por correo ya que, "eso no garantiza legitimidad del voto, es un fraude".
Al parecer todo indica que la crisis política y económica en EE.UU., va a continuar así gane Biden o Trump, ambos usan a las masas como un patrón, uno para alcanzar el poder y el otro para mantenerse, y los agentes económicos se frotan las manos por sus jugosos negocios después de las elecciones.
Fuente Electrónica:
https://mundo-internationalreport.com/estrategia-de-inversion-electoral-en-ee-uu