Ojalá Putin no cometa los errores de Gorbachov: repetir las volteretas de un jugador tramposo, que obró junto con Reagan, Bush, Walesa, Wojtyla y la Otan para lograr el fin común de desintegrar la URSS y propiciar la extensión de Washington y la Otan, hasta las fronteras rusas.
A Gorby, como le llamaban en occidente, lo pusieron a bailar como un trompo. Veamos las volteretas: crearon un pantalón vaquero con la marca Gorby, por desmontar el Pacto de Varsovia, derribar el muro de Berlín y "acabar con la guerra fría," le otorgaron el premio Novel de la paz.
Por el "pacto de caballeros, traicionado," a través del cual permitiría que Washington y la Otan, rodearan Rusia e implantaran gobiernos pro-occidentales, en las ex repúblicas de la URSS; luego, acabar violentamente con las repúblicas rebeldes como Yugoslavia y Albania. Eventos de los cuales fue testigo. Y que conste, hasta hace un par de meses, el Kremlin ha comenzado a dudar de "la buena fe" de los socios europeos y todavía no logra hacer a un lado o desafiar las sanciones y moverse con independencia por el mundo.
Ya como colofón ideológico, con sus volteretas de reformas y anticorrupción del glasnost y la perestroika, logró atizar el anti socialismo con el sindicalismo liberal como el de Lech Walesa en Polonia, también, se pudo reabrir de camino cristiano ortodoxo ruso con el apoyo del papa Wojtyla, que venía cargado de un visceral anti comunismo y contra el ateísmo.
Como producto de todas esas trampas y volteretas del movimiento renovador de Gorbachov, se derrumbó la Unión Soviética y se dejó a Rusia débil, desintegrada y expuesta a la agresión occidental. Gorbachov fue consagrado como el hombre que cambió la historia mundial (del capitalismo).
Si Lenin dejó a los rusos sentados sobre un barril de TNT, Gorbachov, se asustó con el encargo y tan "infantil", apagó la mecha y la soltó en manos de Washington y la Otan.
Ahora, a Putin le tocó restaurar la desintegración soviética, pero desde los intereses capitalistas de la nación. Recientemente declaró, el presidente ruso: "Nuestra misión es acabar con la guerra de Kiev contra Donbás y defender a Rusia."
Sin embargo, después de los informes triunfalistas de las fuerzas armadas rusas sobre Ucrania, llega el invierno y los bombardeos de las Fuerzas Armadas de Ucrania sobre Donetsk no se detienen.