Gaza: la cena de las cenizas

La guerra, no es entre Israel y Hamás, sino la guerra de Israel contra los niños y mujeres palestinos. Los dos tercios de asesinados por el ejército israelí en Gaza, son niños (4,000) y mujeres (2,550) y miles más de heridos y capturados. A esto hay que agregarle el bombardeo de 50 hospitales con todo y pacientes y personal médico, bombardeo de escuelas, iglesias, mercados, centros de refugiados y decenas de miles de habitaciones civiles destrozadas. Ya suman 12,000 palestinos asesinados y más de 26,000 heridos.

Los medios presentan esta situación escatológica provocada por el ejército israelí contra más de 2 millones de habitantes de la franja de Gaza, como una guerra entre Israel y Palestina.

Resulta muy paradójico y conveniente para los medios "progres", poner a Palestina en la misma dimensión y actitud militar que Israel. De esta manera se condena al que defiende la libertad, la dignidad y el derecho a la vida independiente, Hamás. Y se oculta al ocupante, al agresor, y sus crímenes; en la lógica de la guerra.

Con este tipo de suerte, los crímenes, el genocidio de niños y mujeres y la conversión en cenizas de toda una comunidad urbana, llamada Gaza cometidos por las fuerzas armadas sionistas, quedan narrativamente justificados.

Eso se observa hasta en los medios "progres" como RT y Sputnik. Que, junto a los medios occidentales, presentan que el mundo está preocupado por el final escatológico que le espera a Gaza, después de la derrota de Hamás que sobrevendría a la detonación de una bomba atómica sobre Gaza. (Esto, lo propuso un ministro israelí), o destruir con miles de toneladas de explosivos, bombas y fósforo blanco a Gaza hasta convertirla en cenizas.

Pero, en esa dirección las cosas no van tan bien, pues, exactamente a un mes de la operación "Inundación Al aqsa" que Hamás lanzó contra Israel, Hamás continúa combatiendo, en el mayor de los casos a distancia 0. Y con el apoyo de las guerrillas de Yemen y Hesbolá destruyen medios militares y provocan bajas al ejército invasor. De ahí que se prorroga el final fantasmagórico que promueven tales medios.

Aunque los movimientos mundiales de solidaridad genérica con el pueblo palestino están muy activos; todavía, no son capaces de reconocer que, es el movimiento guerrillero Hamás con la operación "Inundación Al aqsa," quien, con el esfuerzo y sacrificio colocado en esta operación militar, rompió el punto de vista de la relación entre impunidad y temor sostenida con la arrogancia sionista sobre el mundo árabe.

El ataque guerrillero de Hamás a Israel ha abierto nuevos caminos y elevado la moral de la humanidad en sus luchas justas contra la opresión y el terror impuesto por los imperialistas a los pueblos humildes, pero valientes del planeta.

Hamás desafió las que parecían verdades fijas.

La idea de que los que se defienden y luchan por sus derechos son terroristas, ha sido superada, pues los sionistas, han mostrado con sus desalmados actos de barbarie contra niños, mujeres y ancianos de Gaza y la pulverización de sus hogares, hospitales, iglesias, mercados y campos de refugiados, que las fuerzas armadas israelitas y la Casa Blanca que los apoya, son los reales terroristas.

Que el Consejo de Seguridad y la ONU con su secretario general son inservibles y sin autoridad siquiera para tipificar los crímenes de guerra de Israel, peor aún, para detener el genocidio.

Que las declaraciones de solidaridad con los palestinos, sin acciones políticas que ayuden a detener la destrucción y genocidio en Gaza, son sólo eso: declaraciones. Que lindan con la hipocresía.

Este mundo que está viendo y es testigo de un genocidio, sin hacer nada por pararlo, cargará históricamente la culpa y complicidad de los actos de barbarie que día tras día, durante un mes, del 7 de octubre al 7 de noviembre, los sionistas israelitas y la Casa Blanca están cometiendo contra Gaza y Cisjordania.

No se espera que el mundo y los medios rehabiliten el papel libertador de las guerrillas urbanas de Yemen, Líbano y Palestina, ni tampoco que esperen la cena de las cenizas para decir algo útil para detener el genocidio del pueblo palestino.

Pero, por lo menos digan la verdad y los gobiernos sensibles, hagan prácticamente algo por detener la masacre contra palestina.

No obstante, la observación que expresé sobre algunos medios, quiero afirmar que, ya hay otra versión, crítica y más objetiva de esta ocupación y masacre que comete Israel contra Gaza y Cisjordania, que circula en los medios como aporrea.org, Al manar en español, Diario Octubre e Insurgente.org. entre varios otros.



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Memo Fernández


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