Los logros de la política china son notoriamente positivos.
Su economía es la segunda del mundo, para 2024 se estima un crecimiento del PIB de 5%, 100 millones de habitantes rurales salieron de la extrema pobreza el 2020, la urbanización de más de 140 millones de ex residentes rurales ha logrado su acceso a servicios públicos mucho mejores. Dispone de un sistema tecnológico y científico propio. Existe unidad política en su población. Tiene una capacidad militar importante. Es una fuerza en la geopolítica mundial.
Sin embargo en algunos medios occidentales se le atribuyen graves debilidades. Un comentario de Xinhua la agencia oficial de noticias del gobierno, las ha explicitado.
Si bien se han completado las tareas más fáciles, los desafíos restantes son difíciles y requieren mucho coraje y sabiduría políticos para superarlos. La reforma de China se encuentra en una coyuntura crítica, ya que avanzará o correrá el riesgo de quedarse atrás.
China sigue enfrentándose a cuellos de botella. Su capacidad innovadora todavía no es lo suficientemente fuerte. Es imprescindible que haga frente a riesgos financieros, asegure alimentos, energía y cadenas industriales y de suministro, resuelva problemas como la insuficiencia de la demanda efectiva, el bloqueo de los flujos económicos, servicios públicos insuficientes y presiones para la creación de empleos.
Reformas encaminadas a crear un mercado interior unificado, fortalecer las nuevas fuerzas productivas de calidad y conseguir grandes avances científicos y tecnológicos son especialmente esperadas. Son necesarias las reformas urgentes y prácticas en ámbitos como el sistema fiscal y tributario, las finanzas, la distribución del ingreso y la integración urbano-rural.
Según el partido el futuro de China depende de hacer reformas integrales y continuas en profundidad para asegurar el crecimiento económico a través de su modernización.
La decisión clave fue adoptada en la tercera sesión del Comité Central que concluyó el 18 de julio con un llamado a unirse en la reforma y la apertura.
El plenario fijó metas a cumplir el 2029 y hacia 1050.
Su herramienta fundamental es un modelo de gobierno central que planifica la economía, política, cultura, sociedad, el progreso ecológico, la defensa nacional.
El objetivo del partido es la construcción de un poderoso país socialista moderno, la gran revitalización de la nación china.
Sobre ese proceso el comentario de Xinhua expresa una preocupación.
Mientras tanto, es crucial lograr un equilibrio adecuado en el ritmo de la reforma. Las reformas rápidas y audaces deben ir acompañadas de medidas de apoyo para mitigar los riesgos y las perturbaciones sociales.
