¿O sea que pasado un mes después de publicada la sentencia del TSJ que prohíbe a los medios El Nacional y Tal Cual, publicar gráficas como la ya famosa fotomontaje aberrante y terrible de la morgue, estos y otros medios pueden reincidir si les viene en gana y seguir publicando lo que quieran, incluso fotos similares o peores?
Es la lógica interrogante que muchos nos hacemos, porque qué sentido tiene que la temporalidad de la mediada se limite a un mes cuando bien pudo sentarse un precedente definitivo para que más nunca, los medios, cualquiera, escritos o televisivos, caigan en la bajeza de utilizar la muerte, la sangre y en terror para vender más o como en este caso para buscar dividendos electorales.
Queda ahora, como iniciativa a la Asamblea Nacional, de manera urgente legislar para, de una vez por todas, acabar con un amarillismo vergonzante que algunos medios, en su creencia de que con ello dañan la imagen del gobierno, tienen como costumbre y práctica permanente.-
Y que no vengan después con el cuento de que se está violando la libertad de expresión, el derecho a informar, cuando son ellos los que a diario se pasan por la faja, el código de ética del periodista y las leyes.-
Si no pasa nada y como sucede con frecuencia, se deja que las cosas se enfríen, va a tener que salir el pueblo, en uso de sus derechos a exigir acciones contundentes.-
CREO QUE MANDIGA TAMBIÉN SE EQUIVOCA
A propósito de Mandinga y sus papeles, necesariamente, a pesar de que lo admiro y lo veo con sus descarnadas verdades, debo aceptar que esta vez se equivocó al afirmar que la foto de El Nacional “no es un montaje”, pues los investigadores del CICPC, ya dejaron claro que sí lo es y que incluso había “una cabeza con tres orejas” lo cual deja en evidencia la patraña.
Callarse ante la burda maniobra, como Alberto Nolia recomienda debió hacerse, creo que no era la mejor vía, pues estamos en una guerra por salvar el país y en ella hay que enfrentar al enemigo y si se puede hacer por la vía de la legalidad, mejor aún.
UNA SOBERANIA EN PELIGRO INMINENTE
La decisión de la Corte Colombiana, congelando una de las más violatorias decisiones de Uribe, con la que le abría las puertas de ese país a fuerzas extranjeras en una clara entrega de la Soberanía Nacional y encima con absoluta inmunidad e impunidad, era algo indispensable si no querían que se sentara un precedente terrible que no era otra cosa que darle una patada a la Constitución, pues circunscribía la decisión a la voluntad de un solo hombre y echaba a un lado al Poder Legislativo quien es el que en casos como éste debe tener la última palabra.
Pero es que además convertía a esa nación definitivamente en un país satélite del imperio en grado sumo, que bien sabemos, lo que busca es poder seguir llevando adelante sus planes que a mediano plazo les garantice el acceso a los recursos energéticos y acuíferos de esta parte del planeta que a ellos, de manera inminente, cada día le escasean más.
Es doloroso que pueda existir en una Patria como la colombiana, por la que para lograr su independencia y libertad, hace 200 años se derramó tanta sangre, un hombre como Álvaro Uribe, felizmente fuera del poder, a quien no le tiemble la mano para entregar lo más sagrado de cualquier patria como es la Soberanía, en una demostración más de que es un redomado delincuente, no solo por sus antecedentes que lo vinculan inexorablemente a los paras y los narcos, sino que lo hacen responsable de los macabros hallazgos de fosas comunes con miles de personas asesinadas durante su gobierno, por lo que tendrá que pagar ante la justicia, si no humana, por lo menos divina.-
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