2. Publiqué de 2006 a 2009 cerca de 400 artículos en Rebelión de España (cuatro o cinco artículos por semana) y, aunque ningún trabajo fue censurado –solo después de 2008- recibí algunas notas de Rebelión sobre los presiones del gobierno español contra los artículos que hablaban de la ETA y del régimen represor español. De la noche a la mañana, sin explicación alguna, cero artículos. Por otra parte, Kaosenlared es aún la revista más libertaria (con excepción de las revistas plenamente anarquistas) donde me han hecho el favor de publicar la mayoría de mis artículos casi diarios desde hace ya alrededor de dos años; sin embargo esta publicación –por los trabajos fuertes, críticos, libertarios, anarquistas que publica, no ha dejado de sufrir presiones del gobierno español que busca acabarla. Incluso circula por la red un manifiesto de protesta que debemos firmar todos en apoyo si queremos evitar que la represión se extienda.
3. ¿Qué sucede cuando esos regímenes que se autocalifican de democráticos actúan igual que los fascistas clásicos encabezados por Hitler, Mussoline y Franco? Pues que empiezan a caer en la desesperación porque sienten que sus gobiernos se les van de las manos. El gobierno español del “socialista” Zapatero y del monarca Juan Carlos de Borbón estrechamente aliados al PP, no han dejado de reprimir y encarcelar a dirigentes sociales vascos y españoles que luchan por su independencia. La misma respuesta ha instrumentado contra las manifestaciones callejeras, desde que se hizo cargo de la Presidencia de Francia el derechista Sarkozy, así como lo mismo puede decirse de las represiones que ha desatado el gobierno griego contra las batallas del pueblo. ¿Piensan acaso que con esas medidas represivas pueden acabar con el descontento social del pueblo que se manifiesta contra la explotación, la miseria y la represión?
4. Si las clases dominantes políticas, empresariales, clericales –todas ellas al servicio de gobiernos imperialistas- han logrado imponer sus criterios e ideologías en la televisión, la radio y la prensa impresa, no lo lograrán en el amplio campo del Internet. Contamos con cientos de publicaciones y miles de contactos con la conciencia suficiente para evitar que las voces independientes y libres sean silenciadas. Caerán publicaciones honestas y consecuentes, pero otras se levantarán para reivindicar los derechos a pensar y a decir las cosas por su nombre. Ninguno de esos presidentes, gobernadores o reycitos esbirros del capital van a silenciar nada. Rebelión, Kaosenlared, Mujeres por la Democracia, Aporrea, Argenpress, Desacato, Red Latina Sin Fronteras, Mariátegui, El Rebelde, Revolucionemos Oaxaca, Red Ciudadana, El Insurgente, Semilla Rebeldía, Oikos/yumka o Rebanadas podrán ser presionadas pero engrosarán la resistencia.
5. En los últimos 10 años en México, con el pretexto del combate al narcotráfico y, ahora, a “la delincuencia organizada”, han sido muertos y asesinados alrededor de 35 mil personas y como si nada pasara. La mitad es culpa del gobierno y el ejército y la otra mitad de los narcotraficantes. ¿Cuántos miles más deben morir? No conviene a nadie, mucho menos al pueblo, que se abran más caminos hacia las luchas violentas y clandestinas (guerrillas en la ciudad y el campo) en sociedades que pueden ser abiertas y libres. Pero los únicos culpables de las sociedades violentas son los gobiernos y las clases poderosas que quieren monopolizar todo: la riqueza, la política, el poder y no dejan espacios para que la población se exprese o, cuando ésta lo hace son engañados, burlados, reprimidos y asesinados. Esa bárbara situación es la que se registra en México, España y otros lugares que no quieren que se denuncie en los medios.
6. Los medios de información, al ser concesionarios públicos, tienen la obligación de elevar el nivel de conciencia de la población, además de informarla acerca de la realidad con el fin de lograr su mayor participación. Sin embargo esos medios, al ponerse al servicio del empresariado, funcionan como medios privados que pueden hacer lo que les da la gana para acumular mayores ganancias. México –al ser uno de los primeros países con la mayor desigualdad de ingresos y, por tanto en inseguridad pública- de manera desafortunada ocupa también primerísimo lugar en asesinatos de periodistas reporteros y articulistas, así como de luchadores sociales; los muertos no han sido los propietarios de medios de información sino trabajadores sin protección que buscan la noticia; es el motivo por el cual no se investigan los crímenes y no aparecen los que ordenan que se asesinen a periodistas. Pero no se trata sólo de éstos, sino también de anticapitalistas.
7. Kaosenlared, Rebelión y otros medios no están solos. Todos tenemos la obligación de denunciar las amenazas o acosos que sufrimos para que la opinión pública mundial esté enterada. Yo no dejaré de denunciar que mi Cartel de la Plaza de Mérida, México, con 16 años de vida, ha sido secuestrado por el gobierno del PRI o por un grupo fascistoide creado por el panista gobierno de Calderón. Pero esto es un pequeño asunto local; lo importante es la defensa de todos los medios de expresión de izquierda y libertaria –cuyo objetivo son la defensa de los intereses del pueblo explotado y oprimido- para frenar el paso de los imitares de Hitler, Mussoline, Franco, Pinochet, Videla y todos los Reaganianos, Bushianos y demás gobernantes que en nombre de la “democracia” asesinan a los pueblos. Los medios de información izquierdistas y libertarios son nuestra única tribuna ante la cerrazón y las campañas del capitalismo imperial.
