Aquello que se puso de moda en Venezuela por paranoia opositora, de hacer de Chávez culpable de todo, empezando por el deslave de La Guaira, los efectos de los fenómenos climáticos llamados niño y niña, que hubiese un terremoto o tsunami en alguna parte o se inundase Cumanacoa y que el propio pueblo chavista lo convirtió en lo de “por curpa e´ Chávez”, tenemos una casa, mi mamá se graduó de bachiller y entró a la universidad; “por curpa e´ Chávez, tengo una bonita escuela y una canaimita; “por curpa e´ Chávez”, en la casa nos metemos las tres papas al día y otro rosario de “por curpa e´ Chávez”, ahora pareciera ser “por curpa e´Aporrea”. Con la diferencia que hasta ahora, hasta que este escribidor lo diga, nadie había dicho “por curpa e´ Aporrea.Org”, desheredados o ignorados como yo pueden tener un portal donde poner lo que escribe y llegarle en muchos casos a un universo de lectores significativamente alto a la semana. Pero hay algo más, “por curpa e´ Aporrea” en ella pueden escribir quienes se sientan tentados a hacerlo, decir lo que les venga en gana, en favor, en contra de algunas conductas del gobierno o mejor hacer las críticas necesarias a la conducción del proceso y hasta dispararle a la página misma y sus editores.
Hasta podemos decir que “por curpa e´ Aporrea” podemos defender al gobierno sin dejar de hacerle crítica y mostrar la peligrosidad que representa la oposición para la mayoría de los venezolanos.
Aporrea, vuelvo a repetirlo, es una excelente página. Revísese su línea informativa con sindéresis y se encontrará un equilibrio digno de elogio, por lo menos con respecto al mundo de la izquierda. Pero algunos, bastantes son, la toman como si fuera una pera de boxeo y, perdónenme vuelva utilizar una frase inserta en un artículo que publiqué recientemente, como “la pagapeos”, por todo lo que dicen quienes en ella escriben. Como si un diario cualquiera, respetando el derecho a opinar, coloca en la página de opinión algo que uno no le guste, fuese culpable de lo que es responsabilidad del autor o escritor.
Percibo, y me expongo me muestren lo contrario, pese a que los editores de la página forman parte de “Marea Socialista”, o una parte de ellos, no lo sé, la línea editorial mantiene su equilibrio y amplitud, tanto que publica hasta a quienes también fustigan a esa tendencia que todavía, según tengo entendido, se mantiene en el Psuv.
Si usted escribe, señalando lo malo que la oposición hace, de lo que mucho abunda, no sólo le insultan, y es posible le anoten en una lista negra o maldita, sino que le caen a piñazos a la página, como si lo escrito no es suyo sino de Gonzalo Gómez. Si crítica al gobierno, intentando ayudarle a mejorar lo que cree mejorable, habrán muchos que le insulten y también a los editores de Aporrea. Es más, me ha sucedido, que si se elogia o exalta un proceder gubernamental, saltarán de la oposición y dentro de quienes se creen más revolucionarios que la revolución misma a aplicarle feos calificativos, lanzarle denuestos y en este caso también le sacan la madre a Aporrea. Encontramos situaciones extremas como aquella cuando algunos evaluaron a Maduro como contrariando los deseos de Chávez, optaron por retirarse de la página como si ella fuese culpable de lo que ellos creyeron ver.
Hay quienes creyéndose demócratas y revolucionarios quieren que Aporrea sea sectaria y cerrada, donde la crítica no tenga espacio. Hacer lo que hace la página y sus editores, con quienes no tengo ningún vínculo político, es hermoso, loable y una excelente demostración de humanismo y respeto al pensamiento dentro del campo revolucionario. Eso es “curpa de Aporrea”. Por eso, pido perdón a Aporrea que, en algunos casos, “por mi curpa”, le saquen la ascendencia.