El mes de mayo en lo personal para mí es muy especial. El 1 de mayo es el día de la clase obrera, el 2 cumple años mi hermano Adrián, el 13 cumple mi hermana Damaris (Motivo por el que desde ese día y hasta para el momento en que escribo estas líneas me dediqué unos días a vivir y a compartir en familia) el 23 cumple este servidor, y que coincide con el primer Aló Presidente de nuestro Comandante Eterno, Hugo Chávez, el 25 cumple mi madre, y el 27 cumple mi cuñado, Javier Sñanchez, a quien quiero como un hermano.
Pero no es de eso que quisiera referirme, sino de un portal que se ha convertido en parte de mi cotidianidad, que es parte de mi familia, que gracias a ella me he dado a conocer, me ha abierto puertas, y que me ha permitido desarrollarme tanto como ser humano, en lo profesional, en lo laboral y fundamentalmente en lo político e ideológico como lo es aporrea.org.
Si la memoria no me falla, mi primer artículo para aporrea fue publicado el 10 de diciembre de 2003. Sin duda era un imberbe con poca por no decir ninguna experiencia político revolucionaria, y aún cuando no forme parte de su equipo fundador, si pudiera ubicarme en ese grupo de pioneros y de esos primeros momentos de aporrea, para cuando este portal tenía un poco más de año y medio que había visto la luz por primera vez.
Creo que aporrea.org, con sus aciertos y errores, virtudes y defectos, sus altas y bajas, es una referencia obligada de nuestro proceso revolucionario. Nadie puede negar sus aportes, su impacto y que se necesita cuidar mucho un proyecto de portal que nació al calor de las luchas populares y del Golpe de Estado contra Chávez y la Revolución Bolivariana en abril del año 2002.
Hoy quien puede negar que la Patria vive momentos duros, y todas y todos debemos reinventarnos totalmente, y pienso que aporrea.org, proyecto colectivo en el que muchos tenemos cabida de las más diversas y variadas formas, de alguna u otra manera debe reinventarse y readecuarse a las nuevas realidades de nuestro proceso revolucionario.
Sin duda, no es acallando las voces críticas, las denuncias, los errores como se va a preservar nuestra Revolución Bolivariana y el Legado de Amor y Revolución de nuestro Comandante Chávez. Una crítica bien orientada, bien sustentada, que interprete verdaderamente el sentir del pueblo, que se constituya en un grito a tiempo ante errores y fallas que dentro de nuestra gestión podamos cometer nos hace bien. Y creo que sería muy bueno que no se espere a que sea la derecha la que denuncie para que nuestras autoridades rectifiquen sus fallas y errores en la que se pueda perjudicar a todo un pueblo.
Pero creo que esa crítica, sino está bien sustentada no sólo desde el punto de vista argumentativo y lógico, sino con los indicios y los elementos de prueba suficientes. Cuando a cuenta de ese derecho a la crítica, tergiverso realidades, e incluso se constituyen en calco y copia de argumentos de la derecha, pienso que hay que tener muchísimo cuidado, porque pienso que no se trata de que desde la izquierda se le haga el trabajo a la derecha para que destruyan los logros y conquistas alcanzados hasta ahora.
Cuando en ocasiones critico a alguien, pero en mi praxis cometo los mismos errores de esos reformistas. ¿Dónde queda la disposición de transformar esa realidad?
Pienso que el espíritu democrático no implica que no se afinen criterios dentro de un portal tan diverso como aporrea para darle el realce que se merece. No se trata de aplicar censura, porque no es mi talante ni mi naturaleza, pero si me preocupan las opiniones de ciertos autores en aporrea, y de ciertas informaciones que allí se publican, que lejos de contribuir al debate, a la sana crítica pero sobre todo a la generación de acciones para corregir el rumbo, lo que contribuyen es a confundir mucho más a nuestro pueblo.
Señalo esto, porque uno de mis lectores que revisa aporrea todos los días me manifestó esta inquietud, y en este caso, me permito a través de estas líneas, expresar esta opinión de él, que me parece muy importante.
Pienso que los que tenemos la oportunidad de escribir artículos y tener algún tipo de impacto en nuestra opinión pública, debemos ser muy responsables, comedidos y prudentes en nuestras expresiones. Somos referencia en nuestro pueblo, y hay un pueblo que pese al descontento y a sus reclamos, sigue apoyando el modelo de Democracia Participativa y Protagónica legado por Chávez. Por ello, pienso que, sin renunciar a la irreverencia y a los debates duros que nos caracterizan a los revolucionarios y las revolucionarias, debemos ser más leales en las acciones y en los compromisos, debemos fomentar la Unidad, profundizar en los elementos que nos unen y acercan y respetarnos en aquellos criterios en los que válida y hermosamente podamos diferir.
Pero pienso que no es tampoco tratando de ahorcar y bloquear iniciativas como aporrea.org se le hace bien a la Revolución. Pienso que aporrea es una tremenda cartelera del movimiento popular que tiene aún muchísimo que aportar. Que deba reinventarse, revisarse, readecuarse, sin duda, pero aporrea no debe desaparecer jamás, porque sigue siendo afín al proyecto revolucionario y socialista legado por Chávez y condensado en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.
Anécdotas y cuentos de aporrea tengo muchos, y confieso que extraño las convocatorias que Gonzalo, Martín, Zuleika, Juan García y otros nos hacían para debatir temas, actividades y de cómo impulsar la comunicación alternativa y popular, además de que aportes tendríamos los articulistas, foristas y el pueblo todo para mejorar nuestro portal. Creo y pienso que sería bueno dentro de lo que se pueda, retomar dinámicas como esas.
Agradezco a aporrea, no solo por la publicación de mis modestos aportes para el debate, sino de noticias cuando he asumido el rol de reportero alternativo y/o comunitario (tarea que he disfrutado mucho) o cuando algunos medios me han entrevistado, tanto de radio o TV, y también han tenido la deferencia y la gentileza de publicarme. Agradezco también a aporrea porque me abrió las puertas a otros portales para viralizar de alguna manera aportes. Agradezco a aporrea porque muchos colectivos me han integrado y me han permitido construir en colectivo tantas cosas para construir un mundo distinto y mejor, y más si éste es socialista.
Sin duda, el imperialismo está en una ofensiva terrible por la reconquista de espacios y de recursos. Pero los revolucionarios y las revolucionarias, estamos obligados a resistir y a seguir dando la pelea. Jorge Rodríguez padre lo dijo y es cierto: "El Socialismo se conquista peleando". Nadie dijo que este camino sería fácil, pero sin duda es el camino, y cuando las marchas se ponen duras, pues los duros nos ponemos en marcha.
Pero, por tantas cosas, por los rostros, por los corazones, por los afectos, por el cariño, por la deferencia y el respeto que te profeso, te deseo aporrea.org que cumplas mil años más.
Eres una parte importante de mi ser, eres mi familia. Puedo amarte, puedo molestarme contigo, pero nunca te abandonaría, porque hay una unión perfecta e indisoluble contigo y el movimiento popular.
Que cumplas muchos años más Aporrea.
Viva el Movimiento Popular y la Comunicación Alternativa y Revolucionaria.
¡Bolívar y Chávez viven, y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen!
¡Hasta la Victoria Siempre!
¡Independencia y Patria Socialista!
¡Viviremos y Venceremos!