La ‘France-Presse’ AFP, la primera de todas las agencias de prensa, fue fundada como "Agence Havas" por el millonario Charles-Louis Havas en 1835. Dos años después, la Monarquía le encarga la elaboración de una "correspondencia ministerial" destinada a los agentes del Estado, con lo que quedan establecidas, para siempre, las estrechas relaciones entre la empresa y el Gobierno Francés.
En 1852, Monsieur Havas cede la compañía a sus hijos, quienes la inician en el negocio de la publicidad y, para ahorrar costos, llegan a un acuerdo con dos antiguos empleados de su padre, Reuter en Londres y Wolff en Berlín, que darán origen a las agencias que llevarán sus nombres, ambas secretamente ligadas, como HAVAS, a las políticas internacionales de sus gobiernos.
En Venezuela, la Agencia Havas tendrá un papel importante en difamar al gobierno de Cipriano Castro (1899 – 1908) y fomentar el apoyo internacional a la llamada "Revolución Libertadora" (1901-1903), coalición de caudillos encabezados por el banquero Manuel Antonio Matos, y aliados con empresas trasnacionales (New York & Bermúdez Company, Orinoco Steamship Company, el Ferrocarril Alemán y el Cable Francés entre otras). En esa guerra se darán dos invasiones y se librarán unos 150 combates, hasta la definitiva Batalla de La Victoria (noviembre 1902), el mayor evento de la historia militar venezolana, donde Castro con 6.500 hombres logra derrotar a los 14.000 anticastristas que intentaban tomar Caracas.
Un mes después, a partir del 9 de diciembre de 1902, la Agencia Havas justificará mundialmente el cobro compulsivo de la deuda externa, el bloqueo naval de las costas venezolanas por Italia, Francia, Holanda, Bélgica, España y México, y el bombardeo de los puertos venezolanos por Alemania e Inglaterra.
La Agencia Havas, obediente a la línea dictada por su gobierno, silenció la reacción indignada de varios países de la región, especialmente la del canciller argentino Luis Drago, quien protestó la medida de cobro de deudas por la fuerza —pronunciamiento conocido como Doctrina Drago— y va a manipular los hechos para justificar la agresión. Cipriano Castro sobrevivió al ataque, no así las relaciones entre Francia y Venezuela, rotas desde 1906 hasta 1913
La Agencia Havas continuó siendo instrumento oficioso de la política exterior del gobierno colonial francés al punto que, en los años 30, el Estado la financia en un 47%. En 1940, cuando Francia es invadida por Alemania, la Agencia pierde la poca independencia que tenía y mientras la parte publicitaria sigue siendo privada (con el nombre Havas), la parte informativa se vuelve un departamento del gobierno pro-nazi de Vichy, con el nombre de ‘Oficina Francesa de Información’ OFI, dependiente de la ‘Agencia Francesa de Información de Prensa’ AFIP, instrumento de propaganda nazi. A la liberación de Paris (20 agosto 1944), periodistas de la resistencia toman la OFI y la convierten en Agencia France-Presse, nombre que conserva hasta hoy.
Como agencia oficiosa del gobierno francés, la AFP censurará y manipulará información sobre las luchas independentistas de las colonias francesas, y sobre los acontecimientos de Egipto, Argelia e Indochina; notable será su cobertura sesgada del bombardeo aeronaval francés de los "barrios nativos" del puerto de Haiphong, el 23 de noviembre de 1946, que mató a 6.000 civiles vietnamitas y dio comienzo a la guerra de Indochina.
Hoy la AFP, fiel a esa tradición, encabeza la jauría mediática que transmite, en cadena internacional permanente, la por ellos tan deseada caída del "dictador" Maduro. No son los únicos, pero son los peores, minimizando los crímenes de la violencia opositora y atribuyéndolos al gobierno venezolano que, por mucho que les pese, sigue siendo un gobierno democrático. Tal como en Libia, la AFP comparte la línea difamatoria de los EEUU y los países europeos de la NATO. Una cosa es ser parcial, otra mentir de manera repugnante.
Me viene a la memoria el fotógrafo de la AFP a quien, años atrás, mientras cubría una barricada opositora en el Este de Caracas, un joven opositor le disparó a bocajarro –y sin mediar palabra o provocación alguna- un tiro de pistola 9mm en el pecho, sólo por ser negro. El fotógrafo sobrevivió gracias a su chaleco antibalas, pero ¿sobrevivirá la poca credibilidad de la AFP a su infame cobertura actual del golpe de Estado contra Nicolás Maduro? Voila un Misterio de la Ciencia…