Hoy pude ser testigo de una de las mentiras de
Globovisión. No me malinterpreten, no es que haya
descubierto nada que no supiera antes, pero desde
luego que fue una experiencia muy curiosa eso de
chocar con la mentira de frente, en persona, o
person-to-person, como diría el "patriota" Pablo
Medina.
Resulta que me encontraba viendo yo el susodicho
canal, que transmitía la marcha del candidato Rosales,
la cual podía observar desde mi propia ventana. En
fin, que la dichosa marcha me rodeaba en "estéreo".
Todo transcurría con normalidad -entendiendo por
normalidad lo que son las transmisiones
propagandísticas de este canal. La reportera Carla
Angola se encontraba muy cerca de mi domicilio,
entrevistando a los participantes. En un momento, una
señora indignada y gritona se le acercó a anunciar que
habían cerrado el Metro, y que no podía regresar a su
casa por ese medio. Con una velocidad sorprendente,
el canal rotuló debajo de la pantalla "Cierran el Metro
cuando los participantes de la marcha regresaban a sus
hogares". Mantuvieron ese rótulo por espacio de un par
de minutos.
A mí esa afirmación me sorprendió. Pensé que,
como hacen algunos sábados, habrían cerrado
alguna de las puertas de acceso, en ningún caso el
Metro. Pero la intención del canal, obviamente, era,
con ese rótulo, crear la impresión de que alguna mano
negra -o roja, concretamente- había decidido cerrar el
servicio de transporte subterráneo para dejar a los
pobrecitos manifestantes lejos de sus casas, expuestos
a la intemperie y encima peligrosamente cerca del
"monte y culebra" que según ellos reina en Petare.
Y lo que hice fue lo lógico en estas situaciones:
bajar las escaleras de mi apartamento y comprobar la
veracidad de la afirmación por mí mismo. Sobra decir
lo que me encontré: el Metro Los Cortijos, y el de Los
Dos Caminos,funcionando con total normalidad y
prestando servicio a un buen número de manifestantes.
El espacio de tiempo que medió entre la afirmación del
canal de "información" y mi visita a las instalaciones
fue de menos de cinco minutos. Cuando Globovisión
pretendía hacernos creer -en directo- que los chavistas
que "controlan" el Metro, lo habían cerrado simplemente
para "castigar" a los participantes de la marcha, ese
medio de transporte funcionaba con TOTAL NORMALIDAD. En
ese momento el que se indignó fui yo. ¡Qué mentira tan
desvergonzada e innecesaria, y encima fácil de
descubrir!
¿Mi conclusión? Si en temas tan triviales y tan
fáciles de contrastar mienten con semajante
impunidad... ¿qué no harán con otro tipo de temas, más
alejados de la cotidianeidad? ¡¡Y estos mentirosos
compulsivos pretenden erigirse en la "referencia
informativa de Venezuela"!!
¿Necesitan más?