Con fecha 8.12.06, escribí algo titulado: “VAMOS A IMPONER UNA DICTADURA”. Después de la argumentación respectiva concluia en el escrito lo siguiente: “ …Como nos referimos anteriormente, los canales RCTV y Globovisión, siendo los mas radicales, han infringido hasta la saciedad la ley RESORTE, que no la ley Mordaza, que sí se impusieron ellos el 11A-2002, . Sólo por ser reincidentes, se les debió haber aplicado desde mucho tiempo atrás (CONATEL), LA SANCIÓN MÁXIMA, COMO ES LA CANCELACIÓN DE LA CONCESION DEL ESPECTRO RADIOELECTRICO.
Hoy reconfirmo lo antes expuesto, pero haré la observación con respecto al Título de la presente. Marcel Granier, con su cara de “yo no fui”, reclama “sus derechos constitucionales”, como si se le estuvieran negando o mejor dicho violentando. Granier peca de ingenuo, al esgrimir dicha situación y ni por casualidad recuerda los siguientes hechos públicos, notorios: Mencionaremos unoscasos muy puntuales:Los derechos violentados a la Periodista Copeyana Rosana Ordonez, los derechos de la Periodista Érika Corrales, los derechos laborales de todos los empleados del Diario de Caracas y para no ir muy lejos, los derechos de todos y todas la venezolanas a estar informados verazmente, y que fue negada en los sucesos del 11 y 12 de Abril. Olvida Granier que como testigo de primera línea de ello, es nuestro compatriota revolucionario ANDRÉS IZARRA, ( coordinador del Noticiario “El Observador”, para la fecha).
Granier, con su cara muy lavada, pretende desconocer que la concesión que otorga el Estado Venezolano, tiene límites en el tiempo y que es facultad del mismo Estado de limitarlo o extenderlo. Así de simple. Es la Ley, yla Ley no distingue a quien debe aplicarse, sólo que debe aplicarse, a quien la infrinja.
Granier con su cara muy lavada, trata de calmar a los empleados de RCTV, diciéndoles mas mentiras, como acostumbra hacerlo. Esto recuerda a la gentuza del petróleo, quienes zumbaron por un barranco a 20.000 empleados de PDVSA, con la premisa de que Chávez “ya se va”. Yo le recomendaría a todos los que tienen prestaciones sociales pendientes, que las reclamen, no vaya a suceder como a los empleados del Diario de Caracas. También les sugiero no solicitar cargos en Globovisión, por cuanto si bien es cierto que la concesión no vence próximamente, tampoco les sorprenderá que se le aplique la pena máxima de la Ley Resorte, Artículo 29, por cuanto el expediente debe tener varios volúmenes, mas videos concluyentes y no los que llevó el lacayo de Ravell a la Asamblea Nacional.
Como conclusión observamos que si de derechos se trata, nuestros derechos están por encima de los derechos mezquinos de los medios, cuyo objetivo principal es el lucro, y paralelamente la desinformación, la incitación a la violencia y al odio.
NO A LA IMPUNIDAD ¡ SI A LA DICTADURA DE LA LEY.
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