La histórica intervención de los estudiantes progresistas y la deserción de otro grupo opuesto, inició consigo una nueva mirada de país. En esta última semana, se ha demostrado que el espacio brindado por la Asamblea Nacional, sirvió como el umbral, de una puerta, que durante toda su existencia, negó la oportunidad, que hoy día, y de manera inédita, permitió el repique y voz de los estudiantes venezolanos.
Lluvias de críticas y frustración de un lado, elogios y orgullo del otro, lo cierto es, que la luz y la inteligencia fresca, se presenta para poner de manifiesto la visión y el rumbo de país que debemos tomar definitivamente. Si uno analiza la salida de RCTV del aire, la retirada de algunos dinosaurios políticos retrógrados enclavados en el espacio de discusión, las lágrimas que llenaron la pantalla de televisión con caras bonitas, la manipulación mediática durante estas semanas previas a la puesta en discusión del debate estudiantil, es fácil darse cuenta, como RCTV, alimentaba el odio, alimentaba la ignorancia y obstruía en ese espacio radioeléctrico, con una mirada de país virtual y forma de discusión conspirativa, aprovechando la amplitud y cobertura en la señal del canal 2 y 7. Bastó la oportunidad a un debate en cadena nacional con nuestros jóvenes...y allí, la polémica, la crítica y la propuesta que se viene levantando desde hace una semana, hasta estos días por venir incluso. Salvo algunas excepciones, la disociación psicótica comienza a calmarse y el aire de paz en Venezuela comienza a sentirse... de hecho, el grito de: “ ¡Chávez vete ya!, se agotó”. Ahora el cambio es: “libertad de expresión”... ¡Válgame Dios que libertinaje!
Queda demostrado que Venezuela, no es RCTV, queda demostrado que el farandulerismo en nuestro país, es de un mínimo sector, que las ideas rebotan en los cerebros de la gran mayoría de nuestros jóvenes y que la distorsión comunicacional, comienza a desenmascararse para quedar al descubierto. Por su puesto, que el plan no acaba, para eso, Globovisión como punta de lanza en este aspecto, aprovechando el reconocimiento de todo un país hacia esta juventud estudiantil, comienzan a tender puentes y alfombras para el debate de los estudiantes, proponen espacios televisivos, utilizan la experiencia comunicacional para embaucarlos en una cacería, y como respuesta reciben el tiro certero de la mesura e inteligencia. Invitarlos a los espacios de Globovisión como punto de debate, busca entre otros intereses, levantar una audiencia que demuestre el sitial de rating, para optar a un buen pedazo de la torta publicitaria que deja RCTV. Demostrar entre corte publicitario o negro (como lo llaman en televisión), una posición política disidente que, previo a mensajes subliminales y distorsionados, jueguen en contra de la presencia de estos jóvenes, quienes en escasos días, se han ganado el cariño y afecto de una nación entera. Ellos, quienes tienen su RCTV endógena, maniobran un plan oscuro, de promoción, a través de estos jóvenes, que, gracias a intervenciones inteligentes y progresistas como Osly Hernández, que invocó, al debate público, mas que el televisado, en el propio escenario de Globovisión, con una contraparte identificada políticamente como miembro de Bandera Roja. Osly, invitó a que se dé mayor oportunidad de intervención, para otros jóvenes universitarios y en otros espacios mas acorde con el debate, con la fuerza y el alerta que imprimen muchachas y muchachos como la misma Osly. A estos medios, les sigue fallando la asesoría publicitaria y mediática, así como los actores de guión y libreto que se hacen llamar líderes.
Como complemento de la matriz comunicacional, salen voces oscuras y políticas “a la Oscar Pérez”, para descalificar a los jóvenes que como digno ejemplo, trabajan en el sector oficial (el cual denunció públicamente) y estudian, tratando de enlodar y manchar una reputación. Lo cierto es, que la formación, que como ciudadanos ejemplares, levantan estos muchacho venezolanos, está ratificada en el corazón de un pueblo. Tal vez, cosa muy distinta, a las andanzas del señor Pérez en su juventud, a propósito de los comentarios de antecedentes policiales mostrados por Mario Silva, en el programa “La Hojilla”. Allí la diferencia de estos jóvenes progresistas que hacen un doble esfuerzo para labrarse un futuro, a la de un grupo de jóvenes resentidos, que se llenan la cabeza de “cajita feliz” y comida sintética, para retorcerse el cerebro carcomido de odio y agredir verbal, física y sicológicamente, a un compañero estudiantil que piensa distinto a ellos, como fue el caso de Robert Serra, estudiante en Derecho de la UCAB, en las ferias de comidas rápidas de esta universidad, y donde además, y en una clara demostración de desprecio y “status” social, le fueron lanzadas monedas, como símbolo de superioridad material... Mi abuela diría: “Son tan pobres...que solo tienen dinero”
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