Definitivamente Ravell no puede ser más asqueroso por que el cuerpo no le dá. El mafioso, conspirador de magnicidios y golpes de estado, ese perenne incitador al odio, a la violencia y la rebelión, que miente, calumnia, vilipendia, difama al gobierno y manipula, tergiversa a su antojo la información, debería estar preso desde hace tiempo, como aquellos dueños de medios de comunicación en Rwanda que incitaron y ocasionaron el inolvidable genocidio en ese país, hace más de diez años.
Sale a chillar cual rata subterránea, topo, musaraña que es, dando su pronóstico de pendejo, de que “el ataque al canal se veía venir por el lenguaje de violencia de algunos funcionarios”. ¡Hipócrita! Además, ¿es gafo, gooffie o se la dá? ¿Cuál lenguaje de violencia? ¿De dónde viene la violencia Ravell? ¿Si tú lo que quieres es ver muerto a Chávez?
Su descarada conspiración para un magnicidio pretende taparla con esa balurda frase de psiquismo chimbo imitando a un Walter Mercado: ”el ataque se veía venir, y tal y tal.” ¡Cucaracha, canalla! ¿Quién carrizo se cree? ¿Y por qué no está tras las rejas?
Hasta se dió el tupé de llamar a José Vicente Rangel para amenazarlo, diciéndole “cuando te acuestes en las noches, acuérdate de Danilo Anderson.” (¿¿¿???) Y luego dice "yo no fuí."
La Fiscalía General deja mucho que desear cuando se han presentado estos casos de intento de golpe o magnicidio. Las experiencias que hemos vivido los venezolanos en los últimos años lo afirman. Aquí hubo “preñados de buenas intenciones” y todo. En cada caso se han zafado, escapado descaradamente de sus responsabilidades y aquí no ha pasado nada. ¿No ha pasado nada?
Además, tenemos un CONATEL ciego, sordo y mudo. Un ente burocrático, de cargos ejecutivos, con tremendos sueldos y utilidades, para terminar haciendo nada o muy poco. A los venzolanos no les sirve un ente así.
Estos golpistas, magnicidas, dueños de la canalla mediática, además de todos esos vendepatria y lacayos de la oposición, deben pagar con cárcel, como los buitres criminales que son, todo lo que le han hecho y continúan haciéndole no sólo a Chávez si no también al pueblo. Los venezolanos estamos esperando desde hace tiempo que se haga justicia. Año tras años vienen con shows y planes diferentes pero con un mismo objetivo: “matar a Chávez.” Y digo "matar a Chávez" porque vivo no les sirve. Muerto es mejor.
Si estos criminales son intocables, entonces no hay nada que hacer. Luego no se quejen de las bombitas lacrimógenas de Lina Ron.
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