El destino final del delincuente, otra hipocresía que hace perder a los candidatos opositores

Qué falsa la moral de los enemigos del proceso revolucionario, ahora pegan el grito al cielo porque el general Antonio Benavides, jefe del Core 5, expresa que el destino final del delincuente debe ser la cárcel o bajo tierra y yo me pregunto: ¿Dónde los querrán ellos? ¿En la Asamblea? ¿Quieren premiarlos por delitos cometidos?

Les quedó muy mal a los oponentes ese papelito de buena gente, de defensores de los derechos humanos de los hampones, cuando el pueblo hoy más que nunca pide a gritos seguridad, mano dura contra esa delincuencia que desangra al país.

Y si a eso vamos, lo ideal sería que en Venezuela no hubiese inseguridad, pero los mismos criminólogos y otros estudiosos del tema, dicen que la delincuencia se puede disminuir con políticas integrales de prevención, pero jamás erradicarla.

El hampa está desatada y se debe tener conciencia de que la persona que toma ese camino corre el riesgo de terminar en la cárcel si tiene suerte, porque de otra manera podría ir directo al cementerio. Esta es una realidad dura, pero realidad al fin y eso lo sabe la oposición, pero vemos que se la quiere echar de santurrona para ganar votos el 26-S.

Porque esa alharaca protagonizada por las declaraciones del comandante castrense, se debe a las elecciones parlamentarias. No hay otra explicación. Como no tienen propuesta, no les queda más alternativa que “cazar” las actuaciones y los discursos de altos funcionarios gubernamentales, para hacer campaña despotricando de la revolución.

Pudieron criticar que en Venezuela no hay sitios de reclusión donde se regenere a las personas que delinquen y eso se les aceptaría, además el Gobierno está consciente de la situación; si dicen que se debe continuar mejorando la calidad de vida de los necesitados, también se les admite, porque en eso anda el proceso revolucionario, aunque ese argumento de que la pobreza es condición del delincuente no siempre convence, los expertos no descartan que puede incidir, pero existe gente que pese a sus carencias poseen valores que los hacen incapaces de robarle un centavo a otro.

Los enemigos quisieron hacer una gracia y les salió una morisqueta. Ellos tienen como estilo la guerra sucia y otras mañas que se les revierten, como les sucedió actualmente intentando calificar de represor al alto jefe militar.

No nos asombran las declaraciones del general Benavides, al contrario, la población honesta exige severidad a la FANB…sin embargo, estos opositores como que quieren que nos llevemos a los hampones para la casa y me disculpan el arrebato, amigos lectores, pero eso es lo que provoca decir ante tamaña estupidez.

Periodista

albemor60@hotmail.com


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Alberto Morán


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