La marcha programada para realizarse este sábado 27 de noviembre de 2010 fue suspendida por mucha lluvia como si se tratara de un juego a campo abierto.
Una pequeña minoría de escuálidos se quedó con los crespos hechos y, otros perdieron su dinero en las pancartas que mandaron a hacer que se les quedaron frías de gusto y de vivaz alegría.
Antonio Ledezma está que arde de rabia sepulcral, ya que iba a ser uno de los oradores que hablaría después de la marcha en contra del Gobierno y de Chávez, por lo que el discurso que le escribió Manuel Rosales debe guardarse en los documentos de la Historia Perdida para la posteridad en que la humanidad ha de esperar para enterarse del fecundo contenido político del filósofo que retrasará la apetencia de los escuálidos de pedirle sin razón peras al horno.
Los asistentes del interior que fueron traídos a reforzar el montón de marchistas, han quedado en desbandada muertos de frío caraqueño y otros que vinieron en avión andan dando carreras en el Aeropuerto de Maiquetía a ver si consiguen un pasaje para ir a Margarita a tomarse un escosés que les calme las ansias de poder, entre ellos a Ramos Allup que no encuentra como sacar al presidente Chávez de Miraflores y hace lo posible de disfrazarse de cordero viejo.
La pérdida que arrojará la no marcha es de los yanquis que siempre ponen “el chivo y el mecate” y los dólares, por lo que alguien asomó que a la MUD se le cayó una pata, porque hay mucha gente de ellos molesta por tal decisión mojada, pero como ellos son blancos se entenderán con Ramón Aveledo que fue quien dijo que son mayoría de las elecciones de diputados, porque 65 mata a 98, lo que refuerza su espíritu de summa cum fraude de la universidad verde de sus sueños.
Estamos seguro que la sangre no llegara al río Guaire –dijo, Cabeza de Motor, alias Óscar Pérez- al celular de Enrique Mendoza en una chamba de guarimba oculta entre los dos en comunicación directa a media noche, -porque quieran o no somos más acá en Perú que ellos, afirmó, y Enrique Mendoza pasivo sin la curita en la cara –respondió, que sea lo que la MUD quiera.
Leímos algunas pancartas de las muchas que quedaron envueltas de soledad a lo largo de la ruta que seguiría la oposición, una de la que destacamos su contenido por lo profundo e hiriente de su frase, como es: “Chávez vete ya para Cuba” y, otra: “Con Guillermo Zuloaga y Globovisión hasta el dos mil siempre” y la más simpática y flameante de todas, escrita con mano zurda, observamos: “Ustedes serán Gobierno, pero nosotros somos mayoría” y la más absurda de todas, decía: “Privaticen todo, pero con La Polar no se metan”.
Me informé de fuente precisa e insoslayable, de la que tengo prohibido dar su nombre y, es que hay miles de fanáticos opositores molestos de toda calentura, por la decisión inconsulta de suspender la marcha por lluvia que, el motivo no convence, porque así como llueve escampa y más bien se alega que posiblemente hubo una epidemia de diarrea de miedo en la MUD, y por tal motivo vino la contraorden del norte.
Marcha que no se da es marcha muerta y de ahora en adelante la convivencia de los escuálidos estará marcada por la sutil frase, marchamos o no marchamos contra viento o marea y la otra parte dirá sino llueve.
Se me olvidaba narrarles que en alguna parte del discurso que Antonio Ledezma daría en la tarima, tenía que explicar el porqué Manuel Rosales no asistía a la misma y lo anunciaría así, “debo informarles queridos asistentes que el compañero y amigo Manuel Rosales, no está presente, porque tiene cosas más importantes que hacer en Perú que lo mantienen alejado de ustedes y odia decirles la verdad y, es que si viene lo ponen preso por perseguido político, por ser el político más honesto del mundo y, eso lo compromete abiertamente con este régimen, pero puedo asegurarles que pronto estará en el Zulia mandando y recuperando lo suyo que es también de ustedes y así finalizaba el alcalde peregrino.