Esa actuación de Antonio Ledezma, hoy alcalde metropolitano y precandidato presidencial de la élite opositora burguesa, era la forma natural, preconcebida, de actuar en la solución de los graves problemas del país de esa oposición, cuando eran gobierno; es por ello que, cuando los oímos expresarse en torno a la actuación del Gobierno Revolucionario en el caso de El Rodeo, y claman por la defensa de los derechos humanos de nuestros compatriotas privados de libertad, atreviéndose, incluso, a acusar al camarada ministro: “A través de una nota de prensa, los diputados Oscar Ronderos (AD- Distrito Capital), William Ojeda (UNT-Miranda) y Enrique Mendoza (Copei- Miranda) miembros de la comisión de cultos y régimen penitenciario de la Asamblea Nacional, repudiaron el uso excesivo de la fuerza por parte de la Guardia Nacional en los sucesos violentos de la cárcel El Rodeo. William Ojeda recalcó que “exigimos la destitución inmediata del Ministro del Poder Popular para las Relaciones de Interior y Justicia, así como su tren ejecutivo ya que el gobierno pretende, violentando los principios más elementales de Derechos Humanos, establecidos en nuestra Carta Magna, desmontar una situación que el mismo gobierno creó, en cuanto al armamentismo y hacinamiento que hoy más que nunca caracteriza al sistema penitenciario venezolano”, solicitan en el comunicado…” (ACN, 18-06-2011). No nos queda otra palabra que pronunciarles, sino fariseos, hipócritas de mierrrr…
Pero la mentira es de pies cortos, poco a poco, la verdad comienza a florecer, y esa denuncia que formulara el camarada Mario Silva, por la vía de la investigación de los hechos comienza a confirmarse: “El plan es simple: Humberto Prado maneja las cárceles. Lo único que necesita el plan es el medio de comunicación que establezca vínculo con los familiares. Ahí comienza el plan. Están preparando una guerra interna de reclusos. Le hago un llamado a los reclusos, están preparando un golpe de Estado. Desestabilización total de las prisiones dirigida por Humberto Prado”, denunció. Antes de la intervención de la Guardia Nacional Bolivariana en los Centros Penitenciarios El Rodeo I y II, Silva dijo que Globovisión divulgó videos sobre la situación de las cárceles para exacerbar la incertidumbre y el dolor de los familiares de los privados de libertad. "¿Qué hacían las cámaras de Globovisión en otras cárceles del país? ¿Qué esperaban ellos que pasara allí?", se preguntó Silva. Indicó también que en el plan desestabilizador participan diputados de los partidos de la ultraderecha, William Ojeda e Ismael García, quienes utilizaron este viernes la preocupación legítima de los familiares de los reclusos con el fin de desprestigiar al Gobierno Nacional…” (AVN, 17-06-2011). Las declaraciones del camarada ministro de defensa, dan luces sobre los propiciadores del motín en esa cárcel: “El ministro del Poder Popular para la Defensa, General Carlos Mata Figueroa, informó este jueves que las investigaciones desarrolladas hasta el momento, apuntan a que existen militares retirados involucrados en el tráfico de armas en los penales del país. "Tenemos el caso de un oficial que aparentemente introdujo armas en el Centro Penitenciario El Rodeo 1 y 2 que ya está de baja. Hablé con el Comandante de la Guardia Nacional para localizarlo, detenerlo y hacer las respectivas investigaciones", dijo el titular de Defensa…” (VTV, 23-06-2011).
Un exhaustivo seguimiento a las declaraciones dadas a los medios de comunicación de la burguesía del para entonces, vicepresidente de la Comisión de Cultos y Régimen Penitenciario, William Ojeda, deja en evidencia lo afirmado por el camarada Mario Silva en su denuncia. Ya en mayo, anunciaba la tragedia que se presentaría un mes después: “El Vicepresidente de la Comisión Permanente de Cultos y Régimen Penitenciario de la Asamblea Nacional, Diputado William Ojeda, asegura que “cada quien tiene que comenzar a asumir sus responsabilidades; la población privada de libertad, está bajo estricta custodia del Ejecutivo Nacional, instancia de gobierno que es responsable directa de la carnicería que ocurre en el sistema penitenciario” (…) “resulta insólito que los responsables de la custodia de los ciudadanos que se encuentran en prisión, no den la cara frente a la barbarie presente día a día en todos los centros penitenciarios. Es hora que El Aissami asuma como responsable de todos esos homicidios, de toda esa violencia, porque en sus manos está la administración del régimen penitenciario”. (Prensa UNT, 15-05-2011).
El colmo del plan opositor, lo pondría la nefasta Comisión Interamericana de Derechos Humanos, CIDH, instancia de la OEA, que se pronunciaría por adelantado, apenas iniciada la toma de la prisión por los alzados en armas, “El gobierno de Venezuela debe tomar "medidas concretas" para resguardar la vida de los presos, afirmó este jueves la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que condenó la muerte de 19 reos en una reyerta el domingo pasado. "La CIDH urge al Estado venezolano a adoptar acciones de impacto inmediato en la grave situación de riesgo en que se encuentran las personas privadas de libertad", indicó un comunicado…” (AFP, 16-06-2011). Tan adelantado fue su pronunciamiento, que no esperaron a ver la actuación del Gobierno Revolucionario, la cual ha sido, hasta el presente, estricta en el cumplimiento del mandato constitucional al respeto pleno de los derechos humanos de nuestros compatriotas privados de libertad; en otro tiempo, ya sabemos cómo hubieran actuado los fariseos que hoy nos hablan del respeto a los derechos humanos, Antonio Ledezma es un catedrático en esa materia, su tesis de grado la ejecutó en el retén de Catia en 1992.
Hoy cuando comienzan a aparecer los primeros responsables de los hechos, funcionarios de la Guardia Nacional que traicionaron su juramento y del ministerio de interior de justicia, es una lástima que los autores intelectuales de las muertes ocurridas en ese lamentable hecho, sigan apareciendo en los medios de comunicación de la burguesía, como si nada; ocupando curules de parlamentarios, como si nada.
William Ojeda,
Humberto Prado, Julio Borges, Leopoldo López, son parte de la escoria
política que ha parido lo peor de la política venezolana, tal como
lo hicieron en abril de 2002, sacrificando sangre de compatriotas chavistas
y de oposición; hoy reeditan ese escenario de muerte, sus ejecutores
de muerte no son francotiradores traídos desde el exterior y colocados
en los edificios cercanos a Miraflores, sino compatriotas privados de
libertad, jóvenes venezolanos que desviaron su camino en la vida, utilizados
como punta de lanza de una política que prioriza la muerte ante la
vida, todo por salir de Hugo Chávez Frías y posicionarse de nuevo,
en la destrucción de la Patria. Vaya oposición nos ha tocado, en desgracia
de la Patria, tener…
henryesc@yahoo.es