Qué milagroso es Capriles que sin comenzar –legalmente- la campaña electoral y, sin inscribirse en el CNE siente que está cabeza a cabeza con el presidente Chávez y, no explica de qué forma y cómo lo ha hecho para mantenerse disciplinadamente en el primer lugar, aunque la otra contraparte que está a favor del presidente aspirante asegura que, hace mucho rato, el comandante presidente, le sacó cabeza y algo que, si a ver vamos llevada ésta a una escala matemática alarga la impaciencia del majunche al sentir bien cerca de él un fogaje de rabia que no lo acerca a la meta deseada de ponerse a dirigir los hilos del poder dentro del Estado venezolano se interna en un mundo de mentiras que es el principal enemigo que lo espera de puerta en puerta cuando, trata de respirar profundo en busca de un consuelo callejero que lo anime.
Este fin de semana estuvo en Margarita caminando y contaminando la vida del margariteño con su pesada carga de estupideces que no lo desampara de su equipaje verbal que va tirando como mariposas al viento que en su corto recorrido de fluctuaciones anticipadas no pudo visitar al Cristo de Pampatar a ver si lo ayuda a cargar su pesada carga de imprecisiones que lo llevan por un solo callejón que se le estrecha cada día que pasa al diluírsele en vapores fantasiosos tantas pendejadas juntas que lo coronan como el campeón etéreo del enredo.
Un as de copa no tiene nada que envidiarle a esta carta de la oligarquía imperial, reconfortado del uribismo colombiano en todas sus categorías que le dan el anclaje de apego camuflado para ir contra la paz social del país y, como una medida que asoma como suya a primera mano es, acabar con la inseguridad en el corto plazo quizás, implantando el paramilitarismo que hizo famoso al ex presidente del otro lado de la frontera que arrasó con familias campesinos que fueron sembrados en fosa comunes sin el menor incomodo de aquél gobierno y, que éste añora para Venezuela si alguna vez llegará a Miraflores como presidente, lo que de por sí está negado popularmente –aunque mantenga una cabeza cercana a sus buenas intenciones de ser lo que no es.
El que quiera divertirse en las presentaciones “masivas” de esperanza que a diario realiza Capriles, no deje de verlo con paciencia y después compare con la realidad del país y, si está de acuerdo con él, entonces pertenece sin dilación alguna al conjunto de los irresponsables engañados que tratan de engañar a au clientela que como desquiciados que conforman parte de la oposición con la mala cabeza de estar cabeceando al lado de su candidato que ha desprestigiado la candidatura del presidente Chávez como pésimo adversario que ha resultado en la breve campaña que lleva adelante a favor de la oposición neoliberal que se embarcó de lleno con lo que le vendió los medios que lo disfrazó de payaso soñador de las rabias incomprensibles que hoy en día no encaja en muchos de los partidos que tenían otro candidato en las primarias y, ahora Capriles les ha resultado el mayor fiasco como político de toda la historia de los líderes que antes pasaron en las contiendas electorales en su representación y, sino lo creen –pregúntele a Ramos Allup- que anda cabizbajo con una torticolis de rabia que le magulla el juicio de la seriedad escondida al tener que apoyar a un “lechuguino” de su desazón y la dentera que le frota su razón de político de la IV-R, lo mantiene en un insomnio de desgano intrínseco de mal apetito de concreción que le resbala y no sabe si morirse parado o de cabeza, ya que éstas están de moda y él la tiene bien puesta dentro de AD y, quizás en la MUD.
Mientras, Capriles se suelta el moño de los desatinos invariables y juega con la paciencia de sus seguidores que se están quedando cojos de tanta ingratitud enlatada afuera que, los pone al mismo nivel de inseguridad juiciosa hacia él.
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